PUÑETAS

PUÑETAS

JOSU AIZPURUA

¿Dónde quedó la ética de la puñeta?

Del Estado78 debió nacer la base de igualdad del Espíritu de la Transición en la que una nueva Ley sometería a la Democracia europeísta la conjunción de la de los vencedores y los vencidos.

Pero la realidad nos trajo un estrado lleno de puñetas de derecha y un exiguo puñado de puñetas de izquierda o republicanos, además acojonados, pues los jefes del banquillo nos decían: “y si no queréis esto; sacamos los sables”.

Y el tiempo no ha enmendado esta situación, más bien la ha empeorado, convirtiendo a una de las patas institucionales de la Democracia en “” y al democrático electoral de Ejecutivo y Poder de semejante rango al Origen, y que presiona y dicta mediante sentencias la visión anti-Transición, la versión contraria a la constitucional, cuyo espíritu no puede ser opuesto al transicional, sino plegado e inscrito en el triunvirato Judicial-Ejecutivo-Legislativo, como soporte de la LEY que emana del “Pueblo-Estado” y que solo él interpreta y altera.

El Judicial reordenado en bandas, lo anula y lo que piense cada puñeta lo hará en su casa dentro de sus libertades ciudadanas pero su oficio institucional según el Espíritu de la Transición le prohíbe la reorientación de la Ley, el no plegarse al Legislativo y menos inventar excepciones en base a su conocimiento legal que de ser contrario al Legislativo será siempre de nulo derecho.

Pretender como en varios Países prefascistas, eliminar al Presidente mediante triquiñuelas legales, es causa de rebelión y debiera contar con un buen puñado de puñetas en capilla.

Estamos con un ejecutivo de puñetas por la senda del Ejercito-Golpista del 36, en el que los beneficiados por el Estado arremetieron contra él y se adjudicaron la representación que NO tenían. Eran los africanistas que ascendieron por crueldad pero que llevaron al Estado del Imperio a la NADA.

La Honorabilidad y Juramentos del cargo debieran llevar a una dimisión del que no posea en su ejercicio una ecuanimidad para juzgar a un Podemita o a un Facha. El Estado NO existe, es el conjunto de Leyes que dominan un Territorio, cambiantes, y más en el del 78, que ha sido Región,  Imperio, Monarquía fascista, y diversos Territorios que desaparecen, como el Sahara.

Libres de unos profesionales inhabilitados para ejercer su oficio institucional, la PROFESIONALIDAD, y no yo ni nadie ajeno, deberán corregir y redirigir la Justicia en su carril correspondiente.

No es difícil y todos sabemos cómo hacerlo y a quien poner p´alante como fuente de este despropósito judicial de las bandas de las puñetas y su intervención golpista en la política institucional79, que sigue con sus patas en la mesa de Bush, y al que “si hace”,  hay que ponerlo p´alante. Y hacerlo; lo hace.