INVOLUCIÓN
JOSU
AIZPURUA
Desde Manrique, las
Canarias van en continua involución; pa´trás.
Construir unas
Canarias siglo XXI cada vez es más difícil y su destino, español o marroquí, es
un hándicap insuperable pues el caciquismo barato nos tiene agarrados por los
huevos, que suena machirulo, pero no sé cómo se dice en Ireneo.
Y hablando de ella, no encontrar lugar para una luchadora y firme en su credo, es una muestra más de los guiños a la Casta para que sus submarinos marquen el rumbo que más les favorezca; comandante Errejón y cabo Baldobí.
Pero es el Mercado,
amigo, ósea el santo capitalismo interpretado por sus amos, los oligarcas del
Mundo, que, aunque pelean (los siervos por ellos) en Ukrania, están muy unidos
y sólo discuten por reparto de dinero.
La “clase”
política, no es reflejo de otra cosa que la sumisión a un Guion y Argumentarios
de la acreditada ganadería de La Casta. Cada uno según los intereses de su
Lobby, alguno es muy feroz y acuchilla por la espalda al que los plumillas del
pesebre machacan desde los Medios.
Y así: solo y
desvalido, el arriero va, el arriero va.
Ya nada queda de la
Utopía que nos unía en el pasado, ya las niñas del presente perdieron su faro y
no recibirán compresas gratis, ni la píldora o sostenes; nada de lo suyo será
público y seguirán objetos de Mercado. ¿Piensan en que destino le espera a una
hija de soltera de una negra en la España Vaciada?
Pero ¿Quién se
vació Castilla?
El río de oro y
plata que robaron por el Mundo sus soldados, se lo quedaron sus amos, pero no
lo invirtieron en su tierra castellana a la que por siglos masacraron y hoy
arrancándola Madrid y la salida al mar por Santander, han dado el golpe de
gracia. Quedan dos falsas Castillas condenadas al subsidio, y sin su capital
emborrachada de ayusismo..
Y estos, los que
juntaron apellidos, siguen en el machito y se aprestan a asaltar las urnas
primero y las arcas después, basados en la impunidad de sus togados que
mantienen el dorado exilio del que mató al elefante.
El grito de “vivan
las caenas”, los escasos de neuronas, los jalean, y van a la urna a cortar el
desarrollo de sus hijos y nietos. Son los esclavos felices.
Y los esclavos en
primera línea se playa, se afanan por aparentar rojerío, por confundir al
proletario y por maldecir a Irene, como responsable de todos los males de las
mujeres.
Abandonaron la barricada y es el Mundo que nos viene; párenlo que me bajo.
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