ALFONSO X
JOSU AIZPURUA
¿El sabio? No es
cierto, en la Historia ocupó un sitio de privilegio para conocer la “ciencia”
de otros países, pero su oficio fue de político y su intento y visión,
peninsular, quedó escrita en las 7 Partidas y podemos hoy ver que sus errores,
inmensos, todavía los arrastramos y en él arrancan los VOX para su demencia.
Sectarismo,
ambición, desigualdad, represión, esclavitud, racismo, todo ello anidaba en su
cabeza y con ello manchó la Península, quizás para siempre.
Todavía en 1476 andaban Alfonso y Fernando, peleando en Toro para ver si éramos castellanos o portugueses, y cada mochuelo se fue a su olivo. La Península nunca fue España.
La Democracia que
en la herencia científica griega se intuía, no entró en su cabeza, ni en la
monarquía que le siguió, ni en Castilla, ni en el Imperio español, ni en la
España de camuflaje de conquistas, ni en el Franquismo, obra cumbre de La Casta
que impuso su criterio de Grandeza, y buscó en los demás la pequeñez; hacerlos
malos para ellos ser los buenos.
Mientras Europa olvidaba
y superaba sus criterios de desigualdad, “Spain is diferent”, por
voluntad franquista, y luchó contra los Aliados democráticos en su fascista
División Azul. Y ametralló a los ancianos, mujeres y niños que huían de la
barbarie fascista, en La Desbandá, y desde la radio, los aviones, y el crucero
Canarias (C-21), que en 1937 ametrallaban a los huidos para impedirles la
libertad, todos empujaban. Hasta 2022 en el paseo de Santa Cruz de Tenerife,
sus amos y su alcalde, han mantenido la hélice del crucero Canarias(C-21) que
impulsó aquella matanza inhumana. Hay sádicos en mi ciudad, que gozan con la
eliminación de ancianos, mujeres y niños, desvalidos y en busca de ayuda, a los
que el fascismo de Franco y Mussolini, masacraron con impunidad.
Hoy paseo frente al
hueco de la hélice, y agradezco al que la retiró y entró en el
siglo XXI.
Aquel monarca
castellano, Alfonso X, puso las bases del Imperio castellano, fracasado dominador
de la Península y con el oro americano de todos los pueblos indígenas débiles
que la maquinaria bélica castellana aplastó e introdujo en su redil bajo el
nombre de España Ultramar.
Puso multitud de obstáculos
legales para la igualdad del Género Humano, que el interpretaba piramidal, con
los suyos en la cumbre, y los demás descendiendo en derechos y calidades, desde
raciales, religiosos, de extranjería, o de nacimiento. Siervos y esclavos
fueron los encargados de trabajar para la cumbre, donde se asentó La Casta.
La Democracia,
quimera en la que se empeñan los Pueblos inteligentes, es la que ya en este
siglo XXI ha desenmascarado a los ladrones, esclavistas, y falsificadores de la
Historia de la Humanidad, donde sólo reflejaron la de sus partidarios e
ignoraron la de los oprimidos, vencidos, esclavizados y pueblo en general que
seguía sus sesgadas Leyes.
Borremos la
historia pues no es lo que hubo si no lo que quisieron decir los amos y
sufrieron los esclavos, y las mayorías silenciadas.
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