ME CELEBRO EN MI DÍA DE CUMPLEAÑOS: 30 DE DICIEMBRE
Eduardo
Felipe Sanguinetti, filósofo
, poeta y performer
En mi día de cumpleaños, me he celebrado, creo muy preciso que lo llevemos a cabo quiénes somos seres dignos, únicos e irrepetibles, nobles, enemigos y resistentes a este tiempo donde la legitimación de estafadores mentirosos mafiosos y alcahuetes se hizo rutina a los ojos de un pueblo hambreado espectador de su vida hipotecada.
Desde niño intentó derribar las últimas fronteras, que me separan del mundo de mis ficciones. Cruzo de Solum a Buenos Aires, de Soluterionte a Penny Lane, en las espaldas del sol.
Incluido en mi
obra, soy uno más entre mis personajes y mis personajes son mi definitiva
realidad.
Pero aún soy un
visitante, pues del deseo de algo real no se escapa por la memoria, ni por la
imaginación... Y cuándo el deseo ya no importe abordaré Yellow Submarine,
cerraré mi cuaderno de bitácora y se detendrá la palabra escrita.
Lo que más me
importa de este relato casual, es la nueva visión y la nueva derrota...
Miro hacia atrás,
la vida se me presenta, del principio al fin, bajo el signo del deseo de un
poder mágico, el rumbo de ese deseo evolucionando según transcurre el tiempo,
arrebatado al mundo exterior y hecho sustancia propia, intentando cambiarme a
mí mismo, cambiar el mundo, como persisto, sin pausa ni tregua, llegar a
cristalizar: un sueño, en vigilia de día o de noche.
Permanecemos en un
mestizaje de dominios, una desfiguración de lo “sublime” por lo “trivial”,
‘catástrofes’ y ‘parábolas’ que desestabilizan todas las categorías
intelectuales.
Toma ‘status’ de
religión, la ambición mediática, que, al no poder afiliarse a tal o cual
estadio del conocimiento ni a ideología política alguna, sin causa moral que
defender, ni demanda social que satisfacer, busca refugio en un purgatorio
perennis, entre el domicilio universitario perdido y el refugio “seguro” del
poder financiero mafioso megalómano.
A partir de allí,
cobra sentido la necesidad epistemológica y hermenéutica de definir y establecer
una nueva lectura: estamos ante una realidad compleja, y dentro de registros y
códigos de saberes que fueron dejados de lado, ante el poder totalitario de la
web, controlando, vigilando e imponiendo criterio de que sentir, pensar y
conocer.
Se impone hablar
francamente, sin dobleces: sentir, pensar y decir, son la consigna. Mantener la
lucidez, no desesperar y soportar con dignidad este tiempo de transición.
Impedir que muera el genio. No dejarse llevar por la embestida del aparato
represor de la mafia reinante, ante la ausencia de acción de gobiernos
sonámbulos, que pautan y pactan a espaldas de los pueblos, mansos y dóciles.
Y lo único que se
le escapa a este tiempo sin tiempo, es una actitud plena de dignidad y ética,
en temple y conocimiento de revelación apocalíptica. Esta es la coherencia, la
fuerza de cohesión que nos sostiene. Un instante de verdad equivale a la eternidad,
es la eternidad en un instante, enfrentada al instante mercantil descartable,
desechable y perentorio.
El hecho de
preguntarnos día a día si tiene algún sentido simplemente actuar en el mundo
nos lleva hacia el ‘absurdo’ y un misticismo bajo presión pandémica. Absurdo
ante una falta de comprensión cabal del mundo que nos rodea en un punto
extremadamente existencial y personal.
Manifiesto que el
hombre está dotado de una manía irreparable de buscarle un orden, un sentido a
las cosas, origen del absurdo y del final de juego, donde comienzan a accionar
los que huyen del planteo de preguntarse ¿qué hacemos aquí?… son los que han
construido un mundo para pocos, juntando bibelots, son los parásitos
colonizadores, que, cual virus de infecciones asintomáticas, en la ubicuidad de
su ser y estar, lo degradan todo.
La dominación
entonces: la comunicación. La lógica interna de las industrias culturales
implica sin embargo la promoción de lo singular, lo sorprendente, incluso lo
“anormal” de modo que el estereotipo consumidor, se nutre de una incesante y
siempre azarosa fabricación de prototipos (discursos políticos, culturales,
películas, canciones, vestimenta, gastronomía, delitos).
Enemigo de las
conveniencias, oportunismos y especulaciones, fui, soy y seré irrecuperable
para la mafia enmascarada de políticos de izquierda o de derecha, de la mano
del poder judicial y empresario, tan innecesario cuándo hablamos de vida y
redención… jamás negociable bajo las faldas de la señora política, donde están
empantanados entre olores fétidos, las lacras que dominan el mundo, ante la
mirada expectante y temerosa de los pueblos, anclados en el umbral de la vida
en libertad ... Y no olvidemos: “Ellos mandan… porque tú obedeces”, Albert Camus...
Este año 2023,
vivámoslo día a día disfrutando de la existencia tratando en paz y coraje las
urgencias más inmediatas de nuestra comunidad… Dignidad, amor, armonía, equidad
y alegría, las consignas a seguir, siempre libres resistentes y solidarios…
Nunca rendirse ante la mafia que controla la existencia de la humanidad…
¡Abrazo fraterno!
Feliz cumple mí querido Eduardo, un honor para nuestra Argentina👏👏👏👏👏👏👏👏👏
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