LAS EMPRESAS VASCAS QUE CONSTRUYEN LAS
CIUDADES DEL FUTURO EN QATAR
AHOZTAR ZELAIETA
El sector empresarial por el que pasean, puertas giratorias mediante, los grandes nombres de la casta política del oasis vasco, guarda estrechos lazos con la monarquía absoluta qatarí desde hace más de una década. Gracias al rol diplomático de Patxi López o Juan Carlos I, firmas como Ibedrola, Repsol, Idom, CAF o Sener se han lucrado de las abusivas condiciones laborales del país.
“Entre 400 y 500 trabajadores migrantes. No sé la cifra exacta”. Así contestaba Hassan Al Thawadi, secretario general del comité organizador del Mundial de Qatar 2022, cuando le preguntaban, en un canal británico, por los fallecidos durante las obras de preparación del torneo. En febrero del 2021, The Guardian aseguraba que 6.500 trabajadores migrantes habían muerto desde que el emirato recibió el encargo del evento. Estadios, parques, transportes y otras infraestructuras han lucido brillantes, dejando a la sombra la mano de obra que ha quedado por el camino. Varias empresas vascas, con sede o cuna en Euskadi, han hecho caja con las “ciudades del futuro” qataríes. Entre ellas, Sener, Idom, Ulma, Trameinsa, Surco y Tesa.
El Mundial de Qatar
pasará a la historia como el más caro, contaminante, explotador y corrupto de
la historia. Un presunto caso de sobornos ha llegado hasta la Eurocámara, con
una macrorredada y detenciones que incluyen la de una vicepresidenta. Sin
embargo, poco sabemos del rol que han jugado las empresas vascas como las
energéticas Iberdrola, Petronor, Bahía de Bizkaia Gas, Nortegas y Guascor, la
ferroviaria CAF Beasain, la aeronáutica Aernnova o la naviera Ibaizabal en el
Golfo, donde mantienen estrechos lazos económicos desde hace décadas.
Sánchez Galán, el embajador
“¿Quién manda
realmente en Euskadi?” Esa es la pregunta que lanzaba Gananzia para cuestionar
la “dependencia” empresarial vasca sobre el Golfo Pérsico”. En el caso de
Ibedrola, lo cierto es que esta es una pregunta relevante. La filial
estadounidense de la energética con sede en Bilbao está participada por Qatar
Investment Authority (QIA). Por su parte, la filial luxemburguesa de QIA es
accionista de Iberdrola. De hecho, es la que más capital posee, un 8,7% (esto
es, acciones por valor de 6.000 millones).
La empresa
presidida por Ignacio Sánchez Galán ha ido fortaleciendo sus vínculos con Tamin
bin Hamad al Thani, actual emir del petroestado. El 18 de mayo de 2022 se hizo
público un acuerdo entre Iberdrola y la citada agencia de promoción de la
inversión qatarí, (QIA), pocos días después de la gira española del emir al que
todos los empresarios españoles rindieron pleitesía. Es conocida también la
amistad que han ido fraguando Galán y el jeque Mohammed bin Abdulrahman al
Thani, viceprimer ministro y ministro de Relaciones Exteriores. También su
buena relación con el consejero delegado de QIA, Mansoor bin Ebrahim
al-Mahmoud.
En su último libro,
Qatar. Sangre, dinero y fútbol, Fonsi Loaiza dedica un capítulo a las
relaciones entre la empresa con sede en Bilbao y este país. El periodista
destaca que Iberdrola inició sus actividades en Qatar abriendo una oficina
comercial en Doha en septiembre de 2004. Allí también ha construido la central
de Mesaieed, con una inversión cercana a los 2.000 millones de dólares. Además,
en el Parque Científico y Tecnológico de Qatar se ubica Iberdrola Innovation
Middle East, un centro que tiene como objetivo sentar las bases de la
digitalización del sistema energético.
Fruto de estos
acuerdos y relacionados informales ha nacido Qatar-Spain Business Council,
copresidido por Ignacio Sánchez Galán y el jeque Khalid bin Khalifa bin
Abdulaziz Al Thani. El consejo incluye a grandes empresas españolas, como el
grupo de comunicación Prisa, la entidad financiera Grupo Santander, las
constructoras Ferrovial, FCC, Copasa y Ecisa, la inmobiliaria Colonial, el grupo La Liga, El Corte Inglés, y Aguas
de Valencia. Por parte qatarí están, entre otros, el Qatar International Islamic Bank, Al Faisal
Holding Company, Al Wataniya International Group, Al Mana Group y Lulu
International Group. En un acto organizado por la entidad, el presidente de la
patronal CEOE, el empresario nacido en Getxo Antonio Garamendi, señaló “la
necesidad de cooperación entre las dos partes en varios sectores como la
industria, las infraestructuras y el deporte, especialmente con la proximidad
de la Copa del Mundo de 2022”.
El presidente de la
mayor eléctrica española tomó su jet privado y acudió el 24 de noviembre a Doha
para apoyar el Mundial de Qatar y a sus responsables en una maniobra de
comunicación para amortiguar las críticas que estaba recibiendo el Estado durante
los primeros días del torneo. Como ha contado la prensa, allí mostró sus
honores a las autoridades del emirato, rechazadas por la mayoría de gobernantes
del mundo (ni Estados Unidos asistió a la inauguración). Shakira, Dua Lipa y
Rod Stewart también rehusaron participar en el evento cuando todo parecía
listo. Nadie quería verse relacionado con un país que no respeta los derechos
LGTB, que es machista, que no respalda libertades básicas y ni siquiera parece
tener un recuento de cuántos trabajadores han perdido la vida en los últimos
años durante las obras que han impulsado a marchas forzadas. Pero a Galán esto
no ha parecido importarle.
De hecho, en una
entrevista Galán definía al emirato como “un país lleno de virtudes y voluntad
de progreso”. Virtudes y progreso como el que trataron de mostrar con esos
grandes y lujosos estadios en campo abierto. Para la final, por ejemplo, se
reservó el estadio dorado con forma de cuenco en la “futurista” ciudad de
Lusail, construida en medio del desierto exclusivamente para el Mundial por la
firma Qatari Diar, rama inmobiliaria del fondo soberano de Qatar. Sus grandes
avenidas contienen un skyline repleto de lujosas torres y centros comerciales.
Tiene dos adornos más: un parque de atracciones y una isla artificial que
alberga una playa. Allí hay infraestructura “made in Oasis Vasco”.
Idom y Ulma en la corte de Lusail
La UTE encargada de
las obras del estadio de Lusail, liderada por Acciona, contrató a Idom, una
consultora made in Euskadi con estrechas relaciones con la Administración vasca
y, concretamente, con exaltos cargos del PNV. La firma fue contratada para
“proporcionar un servicio de asistencia a la licitación” de las obras del
estadio de Lusail y la “presentación de la propuesta técnica sobre ingeniería
de Instalaciones (MEP) para el concurso de diseño y construcción”, así como
para la “asistencia a la UTE durante la fase de obra”.
Se desconoce cuál
fue la carta de presentación de Idom en Qatar o quién se encargó de realizar la
diplomacia, pero lo cierto es que el estadio de San Mamés, en cuya polémica
construcción participó Idom, resultó ganador en la categoría Stadium of the
Year de la gala World Stadium Congress, celebrada en el país en 2015. Las
condiciones laborales durante las obras del estadio bilbaíno fueron denunciadas
por los sindicatos por “explotación” e, incluso, “semiesclavitud”, también en
opinión de EH Bildu con respaldo de junteros vizcaínos de PSE-EE.
Idom plantó otra
semilla en el oeste de Doha, cerca del Al Khalifa Stadium. Allí creció “un gran
foco de actividad urbana, económica y deportiva” donde desarrolló su “Master
Plan” de la mano de Aspire Academy, una agencia independiente financiada por el
gobierno y con sede en Doha encargada de gestionar este tipo de
infraestructuras deportivas.
En la propia
capital, cuando contrataron a FCC para acometer la obra del nuevo puente
peatonal de Doha, la empresa vizcaína Trameinsa (una empresa cuyos clientes
principales son el Ayuntamiento de Bilbao, el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia
o la promotora y constructora inmobiliaria Jaureguizar) aportó el sistema de
barandillas del lugar.
Importantes obras
de ingeniería realizadas en la ciudad del futuro Lusail tienen sello vasco. La
cooperativa Ulma, ahora noticia por su salida del Grupo Mondragon, está vinculada
al proyecto Lusail Boulevard Tunnel. La propia cooperativa presume de haber
ejecutado la obra “en tiempo récord”, un túnel con una longitud de 655 metros y
una anchura de 45 metros que dispone de tres huecos. El central está destinado
al tráfico ferroviario, con dos líneas en cada dirección, y los dos huecos
restantes a la Autopista A3. El túnel requirió 300.000 m3 de hormigón y fue
parte de la infraestructura de enlace de transporte para el Mundial.
Además de Ulma e
Idom, otras empresas vascas también han participado en la construcción de
Lusail. Durante el levantamiento del hotel de seis estrellas Katara Twin Towers
Lusail, promovido por Katara Hospitality, y presidida por el Jeque Nawaf bin
Jassim bin Jabor Al Thani, la empresa guipuzcoana Surco publicitaba que fue
contratada para colaborar en las obras “desde los suelos hasta las losetas y
escaleras, desde las suites hasta los espacios públicos”.
Ingeniería e industria militar vasca
Lusail está
conectada con la capital, Doha, gracias a un tren ligero cuya “ingeniería de
revisión”, así como la supervisión de obra, han corrido a cargo de Sener,
empresa vasca que también ha desarrollado importantes obras civiles para la
línea roja del metro de Doha. Es una firma con importantes intereses en la zona
como en el proyecto de alta velocidad Etihad Rail en Emiratos Árabes, en los
metros de Riad y Meca de Arabia Saudí y en la red ferroviaria nacional de Omán.
Sener está en manos
de los Sendagorta, una de las familias de Neguri más acaudaladas. El origen de
su riqueza es la industria militar, y, más tarde, la ingeniería y el buen trato
recibido por parte de las instituciones públicas. Fue acusada de amañar
contratos y posee un largo historial de contrataciones con la administración
vasca. Asimismo, esta empresa también ha fomentado la industria de la guerra en
Qatar. En el sector armamentístico, Sener ha colaborado en la fabricación del
avión de combate Eurofighter Typhoon, que ha sido adquirido por el Estado
soberano árabe. Por otra parte, la empresa vasca Sapa Placencia, liderada por
el presidente de la Real Sociedad de Fútbol Jokin Aperribai, participó en la
fabricación de los Leopard, carros de combate que también fueron adquiridos por
Qatar.
Su Majestad el Rey
de España, Don Juan Carlos I, y Su Alteza Real, el Jeque Mohamed bin Zayed Al
Nahyan, Príncipe Heredero de Abu Dabi, así como el subcomandante en jefe de las
Fuerzas Armadas de Emiratos Árabes Unidos, estuvieron en la inauguración de una
planta de energía solar promovida por Sener.
La familia Sendagorta,
con empresas en Panamá, mantiene estrechos contactos con la Familia Real
española. Su empresa pertenece al exclusivo club que se reúne con Felipe VI en
Qatar y anteriormente con Juan Carlos I en Arabia Saudí. En 2014, Enrique
Sendagorta recibió de manos de su “viejo amigo” Juan Carlos de Borbón el primer
Premio Reino de España a la Trayectoria Empresarial, en un acto que se
convirtió en un homenaje al monarca que abdicó pocos días después.
Patxi López como emisario del borbón
Hay que recordar que
Sener fue la empresa de referencia para el viaje a Qatar del entonces
lehendakari Patxi López, poco después de ser seleccionada para el Mundial de
Fútbol 2022. El lehendakari llevaba una carta firmada por Juan Carlos I, que ya
había visitado Qatar en 2003. Una misiva en la que recomendaba a las
autoridades qataríes hacer negocios con empresas vascas. Aquella misión vasca
de negocios, datada en el año 2011, se centró en establecer relaciones con
Qatari Diar, la inmobiliaria encargada de “levantar de la nada” la ciudad de
Lusail, objeto de denuncias por maltrato laboral y dirigida por Ghanim Bin Saad
Al-Saad, un amigo cercano del emir de Qatar.
Patxi López, tras
reunirse en la sede de la inmobiliaria Qatari Diar, llegó a afirmar que las
obras de Lusail eran un “gran proyecto de desarrollo urbano y sostenible que va
más allá de acumular edificios o líneas en un mapa, y presenta oportunidades
extraordinarias de desarrollo para que empresas vascas puedan participar”.
Poco después del
viaje de Patxi López al país del Golfo Pérsico, Qatar Holding, una sociedad
vinculada a Qatar Investment Authority (QIA), se hizo con el 6,17% de las
acciones de Iberdrola, lo que supuso una inversión de 2.021 millones. A finales
de ese año, en 2011, el lehendakari galardonó al presidente de Iberdrola con el
premio Lagun Onari del Gobierno Vasco.
La anécdota del
viaje fue que el príncipe heredero trasladó al entonces lehendakari, Patxi
López, su agradecimiento al presidente de la federación española de fútbol,
Ángel Villar, por el apoyo a Qatar para que consiguiera el mundial. El actual
portavoz del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, primero como
cartero y luego como portavoz, le contestó al mandatario que Villar era del
Athletic Club de Bilbao. Más tarde, se desveló que Villar, como vicepresidente
de la FIFA, fue multado por negarse a colaborar plenamente con la investigación
del FIFA Qatargate.
En 2013, ya con
Iñigo Urkullu en Lakua, el líder del Gobierno Vasco mantuvo un encuentro para
“estrechar lazos” con el embajador de Qatar. El Lehendakari subrayó que “las
relaciones comerciales entre Euskadi y países como Qatar estaban “creciendo en
los últimos años” y afirmó que este territorio “es un buen destino para la
inversión gracias a las políticas de reactivación económica que se están
desarrollando”. Además, remarcó “la capacidad y el esfuerzo de
internacionalización de las empresas vascas”.
Los negocios aeronáuticos vascos
El futbolista sueco
Zlatan Ibrahimovic declaró antes de celebrarse la final del Mundial de Qatar lo
siguiente: “Messi levantará el trofeo, ya está escrito”. Lo hacía en referencia
a un jugador que lució publicidad de Qatar Airways durante seis años en el
Barça. El patrocinio fue promocionado por la prensa con el affaire del FIFA
Qatargate, una trama por la que desfiló la inmobiliaria Qatari Diar.
Qatar Airways
también es una importante fuente de ingresos para la industria aeronáutica
vasca. Un total de 32 entidades asociadas en el clúster de Aeronáutica y
Espacio de Euskadi, Hegan, participaron en la construcción del modelo A350 XWB
de Airbus, que contó con 80 pedidos por parte de la compañía de vuelos qatarí
en 2015. Una firma alavesa lideraba el clúster, Aernnova, que recibió la
inversión de un fondo controlado por Qatar Investment Authority.
Otra empresa vasca
con amplia experiencia en Qatar es Tesa, quien participó en la construcción de
la ciudad residencial de la petrolera Shell, en Al Khor, una de las sedes de la
cita mundialista. Entre sus clientes destacan el Hamad Medical Centre y el
Ministerio de Interior. Precisamente, en la misión de negocios liderada por el
lehendakari Patxi López se ofreció al Ministerio de Interior de Qatar
colaboración en materia de seguridad.
Participación vasca a todo gas
No sería la primera
ocasión en la que empresas vascas se ven envueltas en redes de corrupción
tejidas en torno a un mundial. Sin ir más lejos, tras la celebración del
Mundial de Brasil 2018, se desveló que un cártel ferroviario implicado en sobornos
a políticos de diversas tendencias construyó la infraestructura “necesaria”
para el evento y terminó encareciendo los precios del transporte para los
ciudadanos que salieron a protestar. Entonces se destapó el papel de la
internacionalizada CAF Beasain en la trama.
CAF Beasain, con
oficinas en Doha y millonarios contratos en Emiratos Árabes Unidos y Arabia
Saudí, pujó por un contrato de 300 millones en Qatar tras su elección para
albergar el Mundial. De algunos negocios de CAF Beasain en el Golfo Pérsico han
sido testigos Felipe VI, acompañado de un directivo de la compañía ferroviaria,
Andrés Arizkorreta, cuya mano derecha, Alejandro Legarda, estaba implicado en
los Papeles de Liechtenstein. Legarda presidió Nortegas, la segunda mayor
distribuidora de gas en el Estado y cuyo 20% ha estado controlado por el
Consejo de Inversiones de Abu Dhabi hasta junio del 2021. Tras Legarda llegó
Iñaki Alzaga, que preside a su vez el Grupo Noticias.
Qatar es el mayor
exportador de gas natural licuado del mundo y hasta 2019 fue el segundo
proveedor de gas natural al Estado español. La entidad con participación
pública, Bahía de Bizkaia Gas, contó con la colaboración de Qatargas para
realizar un estudio que garantizaba la seguridad para atender a “metaneros de
hasta 270.000 m3 de gas natural licuado”. El actual número dos del PNV Joseba
Aurrekoetxea se encuentra en el consejo de esta firma.
Repsol, la compañía
energética dirigida por el exconsejero de Industria y expresidente del PNV,
Josu Jon Imaz, también lleva más de una década firmando acuerdos con la
compañía Qatargas, en cuyos proyectos ha participado la alavesa Tubos Reunidos,
con oficina en Dubai desde 2013. Por aquel entonces, la mayor parte del gas de
Oriente Medio que llegaba a Euskadi procedía de Qatar.
Las relaciones
bilaterales vasco-qataríes en el sector energético alcanzaron un hito
importante en 2011, cuando la Familia Real de Qatar mantuvo un encuentro con el
exvicelehendakari, Jon Azua, quien ejercía de vicepresidente de la energética
vasca Guascor. El encuentro sirvió para crear una “joint venture” con
inversiones de 200 millones de euros en dos proyectos: una fábrica de motores
por combustión y una planta de gas.
Jon Azua, fundador
del grupo privado Fenix Oil & Gas, llegó a desplazarse a Qatar para
presentar los proyectos a representantes de la Cámara de Comercio de Doha. El
exvicelehendakari pretendía meterse en la liga de los vascos que jugaban en
Qatar. Era el caso del multimillonario vasco Daniel Maté, CEO de Glencore,
multinacional minera en la que Qatar llegó a controlar el 9,25% de las
participaciones.
Otro empresario que
juega en esta liga es Alejandro Aznar, propietario de la naviera vasca
Ibaizabal. Se trata de uno de los empresarios que pagaron los 4,4 millones de
regularización fiscal de Juan Carlos de Borbón. La naviera Ibaizabal, con
intereses en el sector gasístico, opera en Qatar bajo bandera del paraíso
fiscal de Malta. En Qatar ha domiciliado Ibaitex LCC, controlada por Ibaigol
Maritime, esta última implicada en los Papeles del Paraíso. Alejandro Aznar, a
su vez, es consejero de Minersa, empresa vasca del sector minero que figura en
los Papeles de Panamá. Está casado con Mónica de Oriol, sobrina de Íñigo de
Oriol e Ybarra, artífice de la fusión Hidroeléctrica Española con Iberduero
para formar la actual Iberdrola.
El sector
empresarial por el que pasean, puerta giratorias mediante, importantes nombres
de la casta política del oasis vasco, guarda estrechos lazos con las
autoridades qataríes desde hace más de una década. Concretamente, varias firmas
y representantes vascos, se han convertido en corresponsables del torneo de
fútbol que se recordará, en especial, por todo aquello que, precisamente, no
tiene nada que ver con un balón.
Fuente:
https://www.elsaltodiario.com/qatar/empresas-vascas-ciudades-dictadura-qatar-mundial
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