NO CABE
JOSU AIZPURUA
La verdad, la
realidad, no cabe en los paradigmas del españolismo redundante en el siglo XXI.
Sus posiciones de camuflaje no pueden ocultar el colonialismo español
transmitido desde Alfonso X de Castilla y adoptado de inmediato por todos los
poderosos europeos. ¡Qué fácil era hacerse rico esclavizando a negros
africanos, y obligándolos a trabajar en los terrenos robados; sin sueldo, sin
condiciones humanas, y golpeado como motivación!
Salir hoy con soflamas patrióticas sobre un “españolismo” de hazaña bélica es un fraude a la Historia, a la verdad, a la realidad, y al concepto social del siglo XXI que ya se centra en los DDHH.
Los robados y
esclavizados, eran indígenas semidesnudos, pequeños y desarmados, que veían
como su aldea era invadida por caballos, perros y castellanos, armados hasta
los dientes con corazas en las que sus flechas resbalaban. Sus mujeres eran
violadas a discreción. ¡Que grandes gestas!
No conformes con
ello, y necesitados de más producción azucarera, en la mayor ofensa al Género
Humano, del calibre del Holocausto, implantaron la esclavitud del negro.
Perseguido como
caza, secuestrado, encadenado y trasladado a América, allí fue vendido como
mercancía al mejor postor, y desprovisto de su condición, idioma y nombre, pasó
a ser propiedad del amo blanco, y su destino la esclavitud por
generaciones.
Esto; mis amables
lectores es algo que aún hoy me perturba por las noches, y más por los días en
que ignorantes fascistas alardean de su podredumbre moral y reclaman la exaltación
del españolismo.
El españolismo del
pasado es esta amarga píldora.
El españolismo del
futuro no puede nacer de estos cafres ignorantes que vociferan por calles y
Congreso.
Y esta es la verdad
y la realidad de un kilombo histórico que la Casta se resiste a abandonar y con
ello castra a territorios nacionales y personas con visión de futuro.
Con sus mimbres no
se puede hacer un cesto; solo una horca.
Salgan ya de sus
escondites los Humanos del siglo XXI, a olvidar la falsa historia escrita por
plumillas de pesebre, y todos a comenzar el futuro Orden Social, sin brechas ni
discriminaciones, con igualdad de oportunidades y meritocracia. Métanse en su
casa; sr. Marqués, y no moleste.
En mi banco del
parque, he visto lágrimas de remordimiento en antiguos servidores del cacique
isleño. No eran conscientes de su colonización y de su sometimiento.
Pues bien; hoy ya
lo saben, y su voz debe alzarse por encima de REF y RUP, para exigir sus
carreteras-autopistas, sus aeropuertos y puertos, sus fábricas y empleos. Todo
para sobrevivir en competencia con Baviera y con Marruecos. ¿Por qué no?
Fuera los vendedores
de humo españolista.
No se trata de
quitar nada a nadie; se trata de dar a los que nunca tuvieron, la oportunidad
de ser orgullosos canarios y luchar en igualdad de oportunidades con el resto
de la Humanidad. Es de Justicia.
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