PODERES FACTICOS
JOSU AIZPURUA
En la Transición, y
primeros años del Regimen78, siempre hubo un gran frontón inexpugnable que bajo
el título “Poderes Fácticos” se nos arrojaba como excusa para no avanzar en
Democracia, en europeísmo, en DDHH.
Los ruidos de
espadas nos convencían de ello; y nos acostumbramos.
Pero ese detalle
histórico, es clave en el entendimiento del 2022 preparando el 2024 que
entronará a PPVOX.
Pues ¿Dónde está el fin de los Poderes Facticos? No en el siglo XX y menos en el XXI, donde se encuentra más firme con sus alianzas en Lobbys internacionales. Franco, no era los “Poderes Facticos”, estos eran los que lo mantuvieron 40 años en el Poder y le permitieron enriquecerse, además de embobecer a la población con mitos y fascismos trasnochados.
Y nunca dimitieron;
los “Poderes Fácticos” se apoderaron en el 78 del Poder desde UCD con el Jefe
del Movimiento Suarez, hasta que neutralizaron al fascismo extremo con Piñar y
entonces, previo trufado de submarinos y ostracismos en la oposición, se
desembarazaron de Suarez y entontecida la población, siguieron ejerciendo su
Poder de “Poderes Fácticos”, siempre ocultos, siempre eficaces y siempre
antidemocráticos.
Como las meigas:
haberlos haylos.
Hoy siguen estando
a salvo de “la política”, por una compra de medios de comunicación previa que
les permite la manipulación social y el acceso al poder partidista controlado
desde sus dominios. Como en las manifestaciones del franquismo, el que más
chillaba junto a ti era el policía, en la izquierda el vociferante es un siervo
de la Casta, lobo con piel de cordero.
Los Poderes
Fácticos son la ejecutiva, el cuadro de mandos de La Casta.
Desde sus aposentos
dirigen y rectifican lo que ocurre socialmente en sus dominios, con su credo de
Alfonso X en el que no caben modernismos; Santiago y cierra España.
Palo y zanahoria
era su método, pero hoy día el intercambio de genes hecho endogámicamente ha
provocado una merma de sustancia gris, de neuronas, y sus apreciaciones de
zanahoria son escasas y se ceban en el palo. El retorno cavernario para 2024 es
un gran error, error de concepto, que les puede hipotecar sus dominios.
Potencian a Atila, pero olvidan que nosotros no somos romanos.
Nuevamente desde la Unicidad nos alientan la Diferencia, que no ven en su España y si en la UE: ellos son diferentes. Este error de óptica puede desencadenar los males del pasado, la Inquisición como rectora social, y eso será el abismo con su siglo, algo que jóvenes e intelectuales no asumirán y a los que el “palo” de los Poderes Fácticos ya no alcanzará.
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