LOS FACHAS SIEMBRAN EL ODIO

LOS FACHAS SIEMBRAN EL ODIO

ANGHEL MORALES

Durante semanas evité escribir artículos, ni contra el Gobierno, ni a favor y me refugié con mis Coplas Jodedoras, para mantener vivo este Blog y tengo que agradecer a los muchos colaboradores, que con sus aportaciones le han dado seriedad a este medio de expresión que es mas de ellos que mío. No obstante, cuando sin comerlo ni beberlo nos cayó encima el tema de la pandemia creí que uno debía ser prudente y debíamos respetar a los que estaban trabajando por frenar la jodida pandemia, desde el Gobierno, que pese a sus múltiples contradicciones -yo creo que entendibles- intentaba controlar el problema, criticar y hablar de lo que uno no conoce no me parece prudente y pensé que todos los ciudadanos se iban a centrar en lo importante, que era luchar contra el coronavirus, pero me olvidé que vivo en una colonia controlada por un país lleno de fachas y que estos no entienden de solidaridad, ni de respeto, ni la madre que los parió. Vi a la izquierda brindando a la portuguesa todo su apoyo a Ayuso y Almeida, pero pronto me dí cuenta que no existía reciprocidad y que el Trifachito le saltaba a la yugular al grupo gobernante. 

Tres con las que saques y llevo blancas. Era su momento y los fachas siempre atacan por la espalda y ahora mismo en el Senado y en el Congreso hay un buen grupo de ellos. Sus ataques y mentiras se veían orquestada por sus colaboradores en la prensa, que siguen vendiendo aquello de que una mentira repetida muchas veces se convierte en verdad. Cualquier fallo, cualquier detalle era motivo para arremeter contra el Gobierno. Tengo que decir, que el Gobierno de las islas ha sido de los que mejor han respondido en su lucha contra la pandemia, gestionaron bien lo de la Gomera y lo del Hotel del Sur, pese a todo cayó la Consejera de Sanidad, por cosas que no tenían que ver con la pandemia y por decir que ella era la que mandaba, pasando por encima de la Comunidad Científica. Los fachas se centraron en el 8M como el culpable de que se extendiera la pandemia, se olvidaron de la reunión de fachas en Vistalegre o de los partidos de fútbol como el del Atlanta . Valencia o el del Liverpool - Atlético de Madrid, al margen de que cualquier día se mueve mas gente en el metro de Madrid que en el 8M. Se trataba desde el minuto uno de utilizar la pandemia para atacar,  no la gestión del Gobierno, sino su ideología. Atacando por las mascarillas defectuosas, pero 15 de las 17 CCAA fueron víctimas del mismo mal, como también lo fueron muchos gobiernos del mundo mundial. El Gobierno central se hizo cargo de la situación, porque si lo hubiera dejado en manos de las CC.AA. hubiera sido el KO y lo dice un canario independentista, que he reconocido el buen hacer del Gobierno Canario. Madrid fue el Centro del Mal, donde la pandemia se cebó contra los mayores de las residencias y los sanitarios, dos colectivos en manos del Gobierno de la Comunidad de Madrid desde 1990, donde los recortes y las privatizaciones mermaron a ambos sectores y los dejaron débiles para lo que se venía encima. Muchas veces acudía a las manifestaciones de LAS BATAS BLANCAS, como acudo a las de cualquier colectivo que reclame sus derechos. ¿Dónde estaban los que hoy aplauden desde los balcones? ¿No se enteraron? El gobierno siguió con su plan adelante, pese a las zancadillas de comunidades como la de Madrid y  con la colaboración de todos los confinados se le va ganando la batalla al enemigo, pero esto no les gusta a los fachas, por eso salen a las calles con todo su odio para intentar derrocar al Gobierno. Una imagen de una buena señora buscando comida en los cubos de la basura, mientras los fachas lanzan sus proclamas y sus gritos de odio contra Iglesias, Sánchez y todo lo que se menea. No he visto a los fachas ayudar a sus vecinos, ni siquiera por esa caridad cristiana de la que presumen. No a ellos les importa un huevo la ciudadanía española. Ellos quiere derrocar al Gobierno, saliendo a las calles mintiendo en los informes como hace la Comunidad de Madrid. Rechazando la opinión del Colegio de Médicos. Hasta Bertín Osborne, que no es santo de mi devoción, pero claro elemento de derechas, manifestaba que no creía que los suyos lo hubieran hecho mejor. Hoy probablemente se prorrogue el Estado de Alarma, no tanto como quería el Gobierno, pero si lo suficiente para seguir controlando al famoso bicho y esperando que no haya rebrote, sobre todo por las manifestaciones fascistas de cada día. Hablando esta tarde con unos amigos de Madrid que viven en una de esas calles elegidas por la extrema derecha para su acoso al Gobierno que tuvieran a bien colocar en su calle un cartel de advertencia a los visitantes, que diga: PELIGRO FACHAS SUELTOS.