JM AIZPURUA
No es fácil, no.
Los que te quieren
vender unas “tablas de la ley”, te están engañando en su provecho. Da lo mismo
que sean tablas zurdas o diestras, e incluso ambidiestras, no somos iguales y
por ello no encajamos en reglas, normas, y togazos.
Hombres y mujeres,
ricos y pobres, listos y tontos, todos juntos en unas rayas que un ambicioso
monarca hizo hace siglos, dan una serie de combinaciones que desbordan a
cualquier tabla de la ley. No hay más solución que el relativismo, la
negociación, y el liderazgo de mérito.
Nada ha cambiado en
la política hispana, pues Santi y Asier, militaban ayer en las Nuevas
generaciones del PP, y como no creo que hayan cambiado de ideología, hacen una
nueva versión de su comedia para que el acojonamiento de masas les sea
electoralmente favorable.
Pero el zurdo de
tan listo que se cree; es tonto. Entra al trapo y “combate” enérgico contra ese
fantasma sin sábana que con nombre de diccionario pretende resucitar a la momia
antes de que la trasladen. Pero entre una cosa y otra: la pobreza, el paro
endémico, la precariedad, la miseria de pensiones, la falta de futuro, la ley
mordaza y la reforma laboral, a más de la Ley Electoral y el chanchullo D H´Ondt,
se acurrucan junto a la momia, en espera
de mejores tiempos.
No es el fantasma
de la derecha, la misma desde el medioevo, el que provoca la desmovilización
electoral zurda; lo es la mediocridad de liderazgo y las peleas de iluminados
tratando de imponer su persona en poltronas que les aseguren chollo.
Los lideres ahora
surgen desde arriba, desde la TV casi siempre, y personajes como Garzon
prevaricador, LLamazares, o Bescansa, a los que no quieren ni los suyos, te los
meten como sea en la TV dando opiniones pontificales. ¿A que juegan? ¿De dónde
les vienen sus enchufes en TV?
La mayoría social
del Estado, tirando a izquierdas, ha traicionado repetidas veces desde Felipe
los intereses populares para asentar los privilegios de casta, en alianzas
bipartidistas, que pareciendo “centristas” se vendían mejor en prensa. Desbancado,
aunque a medias, el felipismo, el sanchismo ha puesto en peligro la argucia de
la casta y ya no les funciona el invento. Van a por todas para una victoria de
derechas que les permita implementar el nuevo rumbo neocons y para ello les
vale lo mismo: Santi, Pablo, o Albert. El PPSOE ha muerto.
El Estado
Alternativo, ese que está por hacer y ahora tiene 180 escaños, debe rearmarse
para mantener su ventaja electoral y no asustarse de los 170 escaños de la
España nacional de 500 años (je,je) que se han subido a un cajón para parecer más
altos.
Entre los asustados
por la casta, hay muchos que son centristas, y de derecha europeísta, y es
labor del 180 tranquilizarlos, orientarlos, y negociar con ellos para
garantizar la democracia. El vocerío extremista los llevará inexorablemente al
“voto de orden”, que es lo que pretenden los que dicen que hubo un golpe de
Estado catalán, un Madrid Bolivariano, y un separatismo periférico. Y Canarias
a callar que les ponemos en pateras.
Por eso, no se fíen
de los que gritan en nombre de la “izquierda” y arremeten contra las
“ultraderechas”, pues en este escenario electoral todos están a por votos y
estos son los que dan o quitan. Expongan bien, cumplan, y ya verán que los de
Santi vuelven a vender diccionarios.
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