GUERRA

GUERRA

AIZPURUA tar JOSU Mª

¡Guerra! clamó ante el altar

el sacerdote con ira;

¡guerra! repitió la lira

con indómito cantar:

¡guerra! gritó al despertar

el pueblo que al mundo aterra;

y cuando en hispana tierra

pasos extraños se oyeron,

hasta las tumbas se abrieron

gritando: ¡Venganza y guerra!...

Y maldita sea: siguen igual.

Los recientes pasos de los oligarcas y la casta en la llevanza social del Estado no están dirigidos a restañar heridas y aminorar brechas sociales y políticas, NO. Van encaminadas al conflicto social, a agudizar sus consecuencias, a negar la legalidad de la mayoría opositora.

Atrás quedó, el Espíritu de la Transición, hoy muñeco del Halloween, con la cara de Carrillo y las tetas de la República.

El ardor guerrero que en manos de Blas Piñar y la falange, quedó escondido entre poderes institucionales y chiringuitos, ante la presión UE que no quería restos franquistas, pero fue mantenido y promocionado, y hoy rebrota con alharaca y ruido, para ocultar su escasa dimensión y la inutilidad de sus recetas.

Pero en un País de Países, je, je, donde la población es prácticamente analfabeta política, estas bravuconadas fascistas, calan, y su destino siempre será la guerra Civil o Mundial. Los poderes que alentaron el fascismo y perdieron la II Guerra Mundial, hoy se lanzan a un nuevo enfrentamiento convencidos de que ESE es su único camino de dominar el mundo que con China en lontananza vislumbran nefasto para sus privilegios.

Recomiendo ver documentales de las Guerras, ver sus campos regados de cadáveres juveniles, ciudades destruidas y los humanos entregados a la supervivencia vil.

Pues es ahí donde estos malditos quieren llevarnos, embaucando a los suyos con que serán los “otros” los que sufran y pongan sus cabezas en la calle para que los suyos las pateen. Los jóvenes al hoyo y Don Mariano al bollo. Llevan siglos en lo mismo.

¿Van a permitirlo? Es necesario alzar la voz con fuerza y hacer que esos traidores salgan de sus trincheras, con sus caras, con sus millonarios cotizantes, con sus ideas y soluciones al descubierto.

Nada es nuevo y sus intenciones son las de siempre, reforzar sus patrimonios y aniquilar a sus oponentes.

La casta hispana, nos trajo desde un territorio donde no se ponía el sol, y donde robaban a mansalva, hasta este anochecido territorio del que aún cuelgan Canarias Ceuta y Melilla coloniales, y en el que sin represión no consiguen asentar un Estado en el que las cuatro naciones se encuentren conformes. Por ello nos quieren llevar a la guerra.

Malditos sean si lo consiguen y yo quiero alzar mi grito por la paz y la negociación entre iguales.