BLUFF
AIZPURUA tar JOSU Mª
El bluff es del
género de la ensoñación de Marchena, y podemos tomarlo por un sinónimo de
España78. Ahora ese supuesto Estado “Grande” vuelve a correr, como en Sahara,
para salir de Afganistán regando de sobornos para que no los masacren. ¿Quién
los metió allí? Recuérdenlo pues hoy tiene mucho del ayer. Físicamente fue
Aznar, pero realmente fue la derecha y sus paradigmas.
La UE es ahora la conveniencia de Alemania y Francia, ya sin la piedra en el zapato de UK que al fin recupera su destino y en ello le irá mejor. España78 no tiene lugar, aparte de relleno, en esas aventuras internacionales, pues su lugar segundón la obliga al trabajo interno, a buscar una cohesión y progreso que hoy no tiene.
Pero la gran
derecha hispana, prietas las filas, ve causas internacionales en la que
embarcarse, más por sacar un duro que por patriotismo, pero con ello contamina
a una juventud crédula e ignorante. ¿Qué ir a resolver desde un país en banca
rota, precario, desestructurado y con brechas de género, de clase, de
nacionalidad, y pendiente que los turistas sean sus fuentes de ingresos?
Mándese a mudar.
En las matanzas de
Vitoria-Gasteiz, los heridos recibieron en el Hospital la visita de Fraga y su
TV, pero sin audio y los insultos eran relatados por la voz en off como
conversaciones. Ayer lo recordé cuando la misma voz en off relataba lo
contentos que se iban los niños de Ceuta mientras que yo vi tras los cristales
las peinetas que nos dedicaban. Bluff, siempre bluff, y que siga la rueda.
Esta corrupta e
injusta UE, monigote de los Lobbies, no toma en serio la naturaleza de esta
España78, hibrido entre Españistán franquista, y Españilandia de diseño, que es
un bluff para el espíritu de los fundadores de la UE. Los que impidieron que la
Reforma Agraria se hiciera en la República, hoy cobran las ayudas a los
campesinos, que con el señuelo de ayuda al campo: es para ellos. Bluff for
ever.
Once millones de
votantes, sorprendidos por que el 15F se metiese en el Gobierno, hoy no pueden
admitir que los niños de Ceuta sean objeto de negociación marroquí, fórmula del
más rancio franquismo. Y la UE no puede consentirlo. Son solo 900 muchacho-as
que en esa UE poderosa pueden encontrar la redención que en su territorio natal
no encontrarán.
¿Para qué nos sirve
un Gobierno social-comunista, si hace lo mismo que el ultraderechista? Bluff.
Trota Mariano trota; que estos ni se enteran.
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