¡HASTA SIEMPRE PABLO! CULTURA CUBANA DE LUTO POR MUERTE DE
PABLO MILANÉS
La Habana, 22 nov (Prensa Latina) Basta revisar las
redes sociales para coincidir en que el fallecimiento del cantautor Pablo
Milanés en Madrid une hoy en el dolor a los nacidos en Cuba, a pesar de
diferencias políticas o preferencias musicales.
Presidente de Cuba lamenta deceso de cantautor Pablo Milanés
Moscú, 22 nov ( Prensa Latina) El
presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, lamentó hoy el fallecimiento del
cantautor Pablo Milanés a los 79 años en Madrid, España.
El mandatario, quien se encuentra de visita oficial en Rusia, envió condolencias a través de su cuenta en Twitter a la viuda e hijos del artista y a Cuba.
«Desaparece físicamente uno de
nuestros más grandes músicos. Voz inseparable de la banda sonora de nuestra
generación», expresó el jefe de Estado en la red social.
Por su parte, el primer ministro
Manuel Marrero refirió que la cultura de la isla está de luto por la partida la
víspera del reconocido cantautor, uno de los fundadores del movimiento de la
Nueva Trova en el país.
Considerado uno de los
imprescindibles exponentes de la canción de autor en español, Milanés recopiló
una obra significativa para los cubanos de la isla y otras fronteras de América
Latina con un repertorio superior a las 400 piezas.
El músico nacido en la oriental
ciudad de Bayamo, el 24 de febrero de 1943, forjó su carrera profesional con
gran versatilidad interpretativa, de la cual se nutrió el Grupo de
Experimentación Sonora, junto a otras voces emblemáticas en la isla.
Ganador de dos Grammy Latinos (2006)
y una estatuilla a la Excelencia Musical (2015), conjugó una mixtura de géneros
y sonoridades en el continente, que oscilaron entre la tradición y la
modernidad, en tanto su discografía abarcó el filin, el jazz, la rumba, el son
o el bolero, desplegados en medio centenar de álbumes.
¡Hasta Siempre Pablo!
Por Graciela Ramírez Cruz / Resumen
Latinoamericano Corresponsalía Cuba.
Pablo Milanés ícono de la cultura y
la canción cubana falleció. La triste noticia nos golpea a todos los que junto
a él en Argentina, España y Cuba en inmensos conciertos cantamos con lágrimas
de emoción Yo pisaré las calles nuevamente…, Yolanda, El tiempo pasa… y tantas
otras de sus preciosas composiciones.
Su voz clara y profunda llegaba al
alma. Durante muchos años soportó una dura enfermedad, pese a ella jamás dejó
de componer y cantar como el Maestro que fue, dando siempre su excelencia,
profesionalidad y el cariño que destilaba.
No lo conocí personalmente pero
siempre lo sentí cercano, más allá de coincidir o no en algunas cuestiones
políticas. Como argentina siempre le agradeceré su apoyo a las Madres y Abuelas
de Plaza de Mayo y su mítica canción por nuestro Santiago de Chile
ensangrentado.
Este fue un año muy duro para
Pablito, como todos lo llaman en Cuba, la muerte de su hija fue un golpe enorme
y a ello se sumó la crisis de su enfermedad crónica.
Agradezco a la vida vivir en Cuba y
haber disfrutado su último concierto transmitido en directo por la TV cubana
hace a penas unos meses.
Lo vamos a extrañar muchísimo, como
se extraña a quienes se quiere y han partido temprano. Pero lo encontraremos
siempre que hablemos del amor y de la vida.
¡Hasta Siempre Pablo!
Muerte de Pablo Milanés une en el dolor a los cubanos
La Habana, 22 nov (Prensa Latina)
Basta revisar las redes sociales para coincidir en que el fallecimiento del
cantautor Pablo Milanés en Madrid une hoy en el dolor a los nacidos en Cuba, a
pesar de diferencias políticas o preferencias musicales.
Y es que las canciones del fundador
del Movimiento Nueva Trova cubana, junto a Silvio Rodríguez y Noel Nicola, son
parte indiscutible de la banda sonora de la historia de las ultimas seis
décadas en la isla caribeña.
Con los temas de Pablito, como lo
llamaba cariñosamente mucha gente en este país, nació y creció la mayoría de
las últimas generaciones de cubanas.
La eterna Yolanda fue motivo de
inspiración para muchos enamorados, como mismo otras acompañaron la épica
revolucionaria o condenaron los desmanes de las dictaduras en Latinoamérica.
El ministro cubano de Cultura,
Alpidio Alonso, manifestó que no hay palabras que puedan expresar la enormidad
de la pérdida que representa la muerte de Pablo Milanés para la Cultura Cubana.
“Su legado poético y musical es
inmortal. Lleguen nuestras condolencias a sus familiares, amigos y admiradores
de todo el mundo”, señaló en su cuenta de Twitter.
“Triste noticia. Cuba despide a
Pablo Milanés, uno de los imprescindibles de nuestra cultura. Su creación
musical nos acompañará siempre”, escribió el presidente de la Unión de
Escritores y Artistas de Cuba, Luis Morlote, también en esa red social.
Al igual que diversas instituciones
y personalidades de la cultura cubana, transmitió sus condolencias a
familiares, amigos y a los muchos seguidores de su obra.
Sobrecogido por el dolor, el
reconocido decimista cubano Alexis Díaz Pimienta recordó esta noche en su
página de Facebook su texto dedicado al autor de tantas canciones emblemáticas
del pentagrama iberoamericano:
ETERNAMENTE, PABLITO
Pablo Milanés, Pablito,
ídolo de los cubanos,
con la guitarra en las manos
y la vista al infinito.
Pablo de voz-manuscrito.
Pablo de luz cristalina. Pablo,
entrecalle y esquina
de varias generaciones:
Gracias por tantas canciones
(para el alma, medicina).
“Yo no te pido”, Pablito,
“que me bajes una estrella
azul”, ni que hables con ella
de lo que yo necesito.
Solo te pido —y te invito
a— que vivas mucho más.
Tú nunca abandonarás
—ni hoy ni luego ni después,
señor Pablo Milanés—
El “amplio espacio” en que estás.
Este ídolo que hoy se ve
retando a la muerte terca
“no es perfecto, mas se acerca
a lo que siempre soñé”.
Cantor sentado y de pie.
Hombre de la frente erguida.
Cuídate. Cuídanos. Cuida
todo lo que siempre has sido.
“Te prefiero compartido
antes que vaciar mi vida”.
Te debo una buena parte
de mi infancia-adolescencia.
Te debo la transparencia
en la vida y en el arte.
Y la voz como estandarte.
Y la música que arrulla.
Te debo ser quien no huya,
quien no cede y no se ablanda.
Y el buscar a mi Yolanda
eternamente en la tuya.
Querido Pablo, mejora.
Pablo querido, hazme caso.
Aunque veas el ocaso
mira hacia el sol, hazte aurora.
Querido Pablo, es ahora
cuando más te necesito.
Cuba entera, a todo grito,
con tu voz en la garganta
levanta velas y canta
¡Eternamente, Pablito!
¡Pablito es Cuba, Pablitoooo!!
¡Eternamente, Pablito!
Desde el pasado 11 de noviembre, la
Oficina Artística del Premio Nacional de Música (2005) informó la suspensión de
sus últimos compromisos de trabajo por problemas de salud asociados a una serie
de infecciones recurrentes.
El artista se encontraba
hospitalizado en la capital española siendo tratado de los efectos relativos a
la situación clínica provocada por una enfermedad oncohematológica que
padeció por varios años.
Considerado uno de los
imprescindibles exponentes de la canción de autor en español, Milanés recopiló
una obra significativa para los cubanos de la isla y otras fronteras de América
Latina con un repertorio superior a las 400 piezas.
El músico nacido en la
oriental ciudad de Bayamo, el 24 de febrero de 1943, forjó su carrera
profesional con gran versatilidad interpretativa, de la cual se nutrió el Grupo
de Experimentación Sonora junto a otras voces emblemáticas en la isla.
Ganador de dos Grammy Latinos
(2006) y una estatuilla a la Excelencia Musical (2015), conjugó una mixtura de
géneros y sonoridades en el continente, que oscilaron entre la tradición y la
modernidad en tanto su discografía abarcó el filin, el jazz, la rumba, el son o
el bolero, desplegados en medio centenar de álbumes.
Asimismo, hizo reverencia a la
trova tradicional, la canción de resistencia popular chilena y profesó tributo
a figuras de la historia cubana como el Apóstol José Martí o el poeta nacional
Nicolás Guillén; también a íconos latinoamericanos a la altura del brasileño
Chico Buarque y los grandes del bolero mexicano, entre ellos, Armando
Manzanero.
En la isla, el artista ofreció su
último concierto en el popular coliseo de la Ciudad Deportiva, donde acudieron
miles de connacionales en un noche marcada por temas icónicos y otros de su
reciente álbum Días de Luz, cuya gira promocional lo llevó a escenarios de
Estados Unidos y España.
Tras casi tres años sin
cantar en su tierra, Pablo constató el afecto de los suyos por su creación
cargada de las vivencias y realidades de la isla, a tono con su declaración de
principios durante más de seis décadas distinguiendo el panorama de la trova
cubana.
Cultura cubana está de luto por muerte de Pablo Milanés
La Habana, 21 nov (Prensa Latina) El
primer ministro de Cuba, Manuel Marrero, afirmó hoy que la cultura nacional
está de luto por la muerte de Pablo Milanés (1943-2022) y expresó sus
condolencias a familiares y amigos.
Por medio de su cuenta oficial en
Twitter, Marrero lamentó el fallecimiento del “reconocido cantautor cubano, uno
de los fundadores del Movimiento de la Nueva Trova”.
Con gran dolor y tristeza,
lamentamos informar que el maestro Pablo Milanés ha fallecido esta madrugada
del 22 de noviembre en Madrid, divulgó la oficina artística del músico por
medio de un comunicado.
Agradecemos profundamente todas las
muestras de cariño y apoyo, a toda su familia y amigos, en estos momentos tan
difíciles. Que descanse en el amor y en la paz que siempre ha transmitido.
Permanecerá eternamente en nuestra memoria, refirió la nota oficial.
La Unión Nacional de Escritores y
Artistas de Cuba lamentó también la partida física de uno de los grandes
trovadores cubanos de todos los tiempos, y envío sus condolencias a familiares
y amigos.
En tanto, la institución cultural
Casa de las Américas recordó “los vínculos sagrados de Pablo con la Casa” y en
particular con Haydée Santamaría, como expresaba Roberto Fernández Retamar.
La Empresa de Grabaciones y
Ediciones Musicales de Cuba apuntó que Pablo seguirá latiendo en sus canciones
y en su legado, que es y será eterno.
El pasado 11 de noviembre, el Premio
Nacional de Música (2005) informó la suspensión de sus últimos compromisos de
trabajo por problemas de salud, asociados a una serie de infecciones
recurrentes.
Desde hace unos días, el artista se
encontraba hospitalizado en Madrid y era tratado por los efectos relativos a la
situación clínica provocada por una enfermedad oncohematológica que padeció por
varios años.
Considerado uno de los
imprescindibles exponentes de la canción de autor en español, Milanés recopiló
una obra significativa para los cubanos de la isla y otras fronteras de América
Latina con un repertorio superior a las 400 piezas.
Junto a otros grandes como Silvio
Rodríguez y Noel Nicola, fue uno de los fundadores del movimiento de la Nueva
Trova en Cuba y sus canciones hoy forman parte de la banda sonora de varias
generaciones dentro y fuera de la nación caribeña.
Tras conocer la noticia de su
muerte, las redes sociales han estallado con mensajes de dolor y tristeza.
Eterno Pablo
Yuris Nórido / CubaSí
Ha muerto Pablo Milanés.
Cuba lo llora, como se llora a un
grande. Como se llora a uno de los principales referentes de la cultura. Como
se llora a un símbolo. Porque Pablo es un símbolo.
Ha muerto Pablo Milanés, cantautor
inmenso, poeta que encarnó como pocos el espíritu de su pueblo.
Generaciones completas de cubanos
hicieron suyas sus canciones. Esos temas integraron (integran) la banda sonora
esencial de una nación.
Pablo cantaba con Cuba. Cuba cantaba
con Pablo.
Fundador, junto a Silvio Rodríguez,
Noel Nicola y otros tantos, del Movimiento de la Nueva Trova, aportó a la
cancionística cubana la singularidad de una vocación lírica, de la mano de una
peculiar calidad interpretativa.
Su voz era un torrente de matices,
un ámbito de múltiples resonancias, melodiosa concreción de un impulso raigal.
Y en sus letras confluían las marcas
de una gran tradición trovadoresca y los nuevos caminos de una lírica atenta a
los desafíos de la contemporaneidad.
Le cantó al amor, le cantó a la
Patria, le cantó a la gesta de un pueblo, su pueblo.
La obra de Pablo Milanés es
patrimonio indiscutible de la cultura cubana.
Cuba llora a un imprescindible.
Sus conciertos siempre fueron
celebración de la vida. Miles entonaron con él versos inolvidables, en veladas
que devinieron fiestas de la evocación.
Tenía la capacidad de resumir
aspiraciones, sentimientos, homenajes colectivos.
Una y otra vez compartió escenarios
y estudios de grabación con significativos artistas. Solía hacer la voz segunda
en muchas interpretaciones a dúo... pero ¡qué segunda voz! Prodigio de la
armonía, de la compenetración fructífera.
Los valores formales de sus
creaciones están fuera de discusión, tienen incluso una densidad y un vuelo
sinfónicos, aunque fueran concebidas para una guitarra sola.
Por eso la música y las letras de
Pablo Milanés pueden encontrar plena realización en encumbradas convocatorias y
en la tertulia íntima de los amigos.
Lejos del país que amó y encumbró
con su obra, a los 77 años ha muerto Pablo Milanés. Pero él siempre fue
presencia permanente. Fue y será, porque hace mucho garantizó la sobrevida.
Pablo es Cuba, como lo son los más
grandes artistas nacidos en esta tierra: supo aprehender el ángel indómito de
estas islas, recrear su vuelo maravilloso, volverlo poesía y música para todos
los tiempos.
Pablo querido, emblemático más allá
de las polémicas, ejemplar en su entrega a su arte, fiel a un acervo
compartido. Pablo de todos. Pablo eterno.
Sentidas notas en prensa mexicana por fallecimiento de Pablo Milanés
Ciudad de México, 22 nov (Prensa
Latina) Consternación, sentimiento, amor y nostalgia, pueden resumir hoy las
expresiones de pésame y al mismo tiempo dolor, de la prensa mexicana por el
fallecimiento del trovador cubano Pablo Milanés.
Al pueblo de México le ha dolido
mucho, pues Pablito -como se le conoce entre sus admiradores y allegados aquí-
había programado un concierto en este país para el próximo día 30 y la gente
esperaba escuchar por enésima vez El breve espacio en que no estás, Yo no te
pido, Yolanda, Para vivir, Yo me quedo, El amor de mi vida y una larga lista de
éxitos casi imposible de enumerar.
La repercusión en la prensa
mexicana, escrita, radial, televisada y digital, ha sido unánime, como si todos
los medios procuraran no pasar inadvertidos ante lo que todos consideran una
tragedia muy sensible para la música cubana y universal.
Todos, sin excepción, relatan su
trayectoria musical desde que surgió a la escena internacional entre los
fundadores del Grupo de Experimentación Sonora del Icaic y del movimiento de la
Nueva Trova junto a Silvio Rodríguez, Noel Nicola, Vicente Feliú, Sara González
y otros que han hecho historia y elevado a rango universal la música y la
composición cubanas.
Posiblemente su rostro sea el más
repetido hoy en diarios, revistas y la televisión en las notas informativas
que, además de noticiosas, son en sí mismas un merecido homenaje al bayamés.
El pasado 13 de noviembre, 17 días
antes de la fecha para actuar en México, la noticia de su hospitalización en
Madrid, cayó como una bomba entre sus admiradores esperanzados de que
reaccionara al tratamiento para la enfermedad oncohematológica que padecía, la
cual origina tumores en órganos encargados de formar sangre y en los ganglios,
y lo obligaron a mudarse a España para recibir tratamientos, explicaron medios
mexicanos.
La prensa nacional destaca que, como
un hecho muy simbólico, su última presentación en La Habana fue en un concierto
en la Ciudad Deportiva, en la que cientos de cubanos compartieron las canciones
más adoradas por sus compatriotas que eligió para esa noche de nostalgia en la
que se le vio muy emocionado.
Su muerte la víspera conmociona a
Cuba y al mundo, es uno de los comentarios más generalizados, así como el parte
oficial de su fallecimiento, y datos biográficos y de su exitosa carrera
avalada por medio centenar de discos con más de 600 canciones de su autoría,
compilados y presentados en Cuba en 2017 por la disquera BisMusic.
Pablito querido y nuestros 22 años
Fidel Díaz Castro
(Escrito hace una semana)
Rebelión
(Al Guille Vilar, que me lanzó la
idea)
Hace tiempo, yo anhelaba
encontrar la dicha eterna.
Siempre, a base de reveses,
pude ver la realidad.
Se considera por no pocos la canción
puente, el eslabón perdido entre el filin y la nueva trova. Pablito la escribió
a sus 22 años, como dice la propia canción, un muchacho. Y la saboreo ahora y
pienso en él, quien será siempre el querido Pablito -aún me cuesta llamarlo en
tono de mayor.
Increíble el arte, su vida se puede
leer retrospectivamente ahora desde ese texto.
Cuando uno sigue su obra puede
sentir a un ser humano profundamente sentimental, algo melancólico. Desde la
primera vez que conversé con él (fue a mis 22 años más o menos cuando le hice
una mini entrevista en el patio de la Uneac tras intimo concierto con Sara) lo
sentí un ser tierno, amable, de una sonrisa sedosa, cercana.
Los que me conocen saben que soy
comuñanga hasta el home, y claro que me han apenado su distanciamiento con la
revolución y alguna que otra declaración, pero nada de eso disminuye en mí la
pasión por esa obra raigal en la cultura cubana, incluso -también en la cultura
cubana de la revolución- tanto por sus canciones como por su manera de cantar
con esa voz que sale de las entrañas de la tierra nuestra -cubana, humana.
Le cantaba a mi tristeza,
a mi dolor y a mi muerte.
La tristeza en mí vivía,
viendo el dolor, a veces,
a acompañarme en la búsqueda
del camino hacia la muerte.
Por otra parte es cierto que se
cometieron errores e injusticias con él, especialmente cuando era muy joven, y
los hay que aprovechan ahora para decir que la revolución debe ofrecerle perdón
públicamente por su tiempo en la UMAP, etc. Yo no estoy para nada en contra de
que se reconozcan, incluso que se estudien y debatan, los errores, esta
revolución la hacen seres humanos, -hasta el más grande de nosotros lo es- y
claro que se equivocó y equivoca, inevitablemente, pero acierta -y mucho- desde
su génesis por su naturaleza, porque también la hacen seres humanos,
enamorados, que se entregan, se despeñan y crecen y quieren la felicidad para
todos. Bueno, no más muela en ese sentido. Es cierto que desde la revolución se
cometieron errores, pero también es cierto que tras aquellos primeros tiempos
de incomprensiones y medidas erráticas y arbitrarias con él y otros trovadores,
Haydee Santamaría o Alfredo Guevara (de las gestores mayores en este proceso),
o el propio Fidel, fueron atentos con ellos, y personal y públicamente, le
ofrecieron el abrazo de la revolución. Y desde ella Pablo Milanés empinó su
obra.
Pero como ser humano,
me contradigo y me opongo
al pasado que pasó
pasando por veintidós años
de penas y dolor.
Y de aquí sale mi canción.
Los seres humanos tenemos
contradicciones. Yo siempre contesto cuando pongo en mis programas a Pablito o
cuando canto sus canciones en mis trovadas, y alguien me viene con que si
declaró tal o más cual cosa, que lo que él diga es su problema, lo que él ha
creado, es el mío.
Ahora, Pablo Milanés tiene una obra
(y me cito en el propio texto): raigal en la cultura cubana, incluso también-
en la cultura cubana de la revolución- .
Trajo a primer plano, en momentos en
que parecían olvidados el filin y el bolero con una serie de discos y
conciertos del más alto vuelo; a la vieja trova con esa trilogía Años donde
invitó a grandes viejitos como Octavio Sánchez (Cotán), Luis Peña (El Albino) o
mi entrañable dios personal Adriano Rodríguez (una de las voces más grandes que
ha dado Cuba lo cual no es poco decir) para recrear aquellos clásicos de la
llamada trova tradicional inyectándolo en nuestras venas.
Musicalizó a José Martí, como si su
guitarra y voz y razón y pasión, fuesen un manantial. Así mismo con Nicolás
Guillén. Y qué decir de ese disco junto a Lilia Vera que me enseñó a amar a
Venezuela de raíz.
Si eso fuera poco, el plato fuerte,
sus canciones están entre las más importantes de la cancionistica en nuestra
lengua, y por demás muchas de ellas describen las historias, los momentos, la
esencia espiritual de la revolución cubana. Mejor decir, todas.
Me recuerdo muy niño cantando Yo vi
la sangre de un niño brotar y Ho Chi Min, con las que abrazaba al pueblo
vietnamita. A Salvador Allende en su combate por la vida, Yo pisaré las calles
nuevamente al Chile de Salvador Allende, en el que estuvo. Y a propósito de
«1estuvo» integró la brigada internacionalista que estuvo actuando en el frente
en Angola, y que junto a Silvio, Vicente, y otros tomaron a la hora del cuajo
el fusil y se la jugaron.
Yo lo que aprendí de Fidel Castro
(bueno, entre tantas cosas) y de los que con él lideraron la gesta que nos
trajo hasta aquí, es que un revolucionario lo primero que tiene que ser es humanista,
y su principal espada es el amor. Hubo combates en la Sierra en que se priorizó
la cura y el alimento a los enemigos prisioneros antes que los compañeros
propios. Cuando triunfó la revolución (o empezó a triunfar, porque esto no se
ha acabado) Celia veló por la atención y educación de los hijos de los caídos
en la contienda, de las dos partes, sin pensar que ese niño viniera de un
casquito o hasta de un esbirro. Con igual tratamiento.
Igual aprendí a respetar el dolor de
otros (no me gusta decir ajeno, porque a ninguna pena humana debemos dar la
espalda) ni de los adversarios. Fidel solicitó respeto ante la muerte de sus
mayores enemigos, entre ellos más de un presidente de los Estados Unidos, que
nos había agredido.
Lo traigo a colación porque en estos
momentos en que Pablo Milanés (-que no es para nada mi enemigo-, como creo que
declara este texto) ha ingresado y se encuentra delicado de la salud, incluso
las redes (tan breteras) lo dieron por muerto, hay quienes se ponen a criticar
palabras o actitudes suyas. Las que dijo y hasta las que no dijo, pues lo
atacan tambien los que lo tildan de traidor (a no sé qué ideología) por no
haber dicho en su último (hasta el momento) concierto en su Isla, cosas como
abajo la dictadura, la represión y otros clichés politiqueros.
Algunos lo ofenden por malicia,
otros por desconocer, o limitar su concepto de valoración a lo que alguien
declare, en un determinado momento. Que también es el derecho de cada cual,
pero en esta hora difícil se hace voto de silencio, y se desea su pronta
recuperación.
Mi tristeza la sepultaré…
y el dolor siempre del brazo de ella
irá.
Nada habrá que me provoque más
tristeza…
y el dolor siempre del brazo de ella
irá.
Vuelvo a citarme en el megatexto ya:
lo que él diga es su problema, lo que él ha creado, es el mío.
Homenaje Acto de fe, Canción por la
unidad latinoamericana Son de Cuba a Puerto Rico, Si el poeta eres tú, Canción
de la Columna Juvenil del Centenario y Cuba va (junto a Silvio y Noel), Cuando
te encontré (junto a Silvio), Pobre del cantor, No vivo en una sociedad
perfecta, Buenos días América, El pecado original, Vuelve a sacudirse el
continente… integran un cosmos que explica y nos hace sentir a la revolución
cubana, su sentido cardinal con respecto a la América Nuestra y la humanidad,
con sus grandes hazañas y sus contradicciones. Como también sus canciones de
amor (otras; porque las anteriores igualmente lo son) Yolanda, Yo no te pido,
Amor, El breve espacio, Años, Para vivir, Y ya ves nos miran piel adentro, y
nos ayudan a ver mejor nuestra propia vida.
Y vida es lo que quiero para Pablo
Milanés; física, porque la eternidad de su obra es un hecho incuestionable.
El próximo 24 de febrero, fecha
patria, el trovador, bayamés para mayor cubanidad, cumplirá 80 años. Arriba
Pablito, que vamos a armar tremenda descarga contigo, con tus-nuestras
canciones:
Y en cuanto a la muerte amada,
le diré, si un día la encuentro:
Adiós, que de ti no tengo
interés en saber nada.
Nada…
Mis veintidós años
Pablo Milanés
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