martes, 14 de mayo de 2019

‘RUBALCABA’ Y ‘NOCEDO’ (EN MOTÍN DE HISTORIA)


 ‘RUBALCABA’ Y ‘NOCEDO’ (EN MOTÍN DE HISTORIA)
POR MAITÉ CAMPILLO
Aprendí a valorar que cada amanecer era un ala más a la vida luchando consciente contra la doctrina moral, asumí el marxismo como método de análisis respondiendo a la humillación, a la marginación contra el despotismo incrustado. De tanto perder y palo recibir aprendí a ganar la clase a la que pertenezco, guía y acción, la llevo dentro, paso a paso en mi vida, no se difumina. Creo en el ingeniero del verso y obrero capaz de provocar actos que nos identifica, creo en la poesía que combate al que esclaviza, de forma más amplia digo húmeda de estela contestataria ¡NO cedo NO cedo!

(Dos pasos atrás para poder avanzar). Recuerdo en soplo de historia cuando cumplí los trece, fue una irrupción de algarabía en fiebre adolescente, marcó mi irrumpir en tierra como un festejo de renacimiento del arte y cultura en militancia, más consciente que nunca la educación recibida dentro de los pilares de la infancia impregnada en metáfora, verso, canto, manifiesto de vida y esperanza de libertad, que asumí como trovadora de futuro. Aquella conmemoración marcó un antes y un después, dos pasos atrás para impulsar mi propio paso adelante, y su destino, en cuyo camino encontraría los hijos de mis padres entre emigración y exilio, tiempo no tan lejano en que a los seis, siete u ocho años se era francamente maduro; tribu altiva, laboriosa, impregnada en actos de conciencia contra la dictadura ‘y sus descendientes en la izquierda’, convertidos en portavoces de la Europa capitalista bañada de imperio gringo, ministros y presidentes de la reacción. Aquél presente que mis padres me ensalzaron como propio e independiente, brindó los primeros pasos conscientes a mis pies dentro de un circulo más amplio social en principios, que agilizaría mi caminar al mundo, a la vida, en salto cualitativo. La marcha siguió su curso, no desmayó pese a las cercas represivas y ziszás que han ido imponiendo a través de los poderes fácticos al curso de nuestros días, dio forma exterior a los sentimientos que ya yo compartía pero sobre un tejido social en complicidad de intereses más fabuloso, la sociedad como parte incuestionable.

Aprendí a valorar que cada amanecer era un ala más a la vida luchando consciente contra la doctrina moral, asumí el marxismo como método de análisis respondiendo a la humillación, a la marginación contra el despotismo incrustado. De tanto perder y palo recibir aprendí a ganar la clase a la que pertenezco, guía y acción, la llevo dentro, paso a paso en mi vida, no se difumina. Creo en el ingeniero del verso y obrero capaz de provocar actos que nos identifica, creo en la poesía que combate al que esclaviza, de forma más amplia digo húmeda de estela contestataria ¡NO cedo NO cedo! Lo grito consciente ante los ensalzados y estómagos agradecidos incluido los medios de la farsa revolucionaria a lo Rubalcaba, y frente a la imagen mediocre que a nosotros se dirigía ante el carnaval explosivo en tribuna de abril electoralista ¡NO cedo NO cedo! Y es que sin complicidad con la verdadera libertad solo se dan pasos atrás. No hay peor tiranía como dijo Montesquieu que la que se ejerce a la sombra de las leyes y bajo el calor de la justicia. Como venía diciendo, aquél día que mis padres enarbolaron como detonante en mi vida, pasé a formar parte del paso adelante` en célula humana de generaciones dispares dentro del marginal arrabal en el que se vivía; fue en él, donde di rienda suelta al No cedo más allá de la metáfora que dio nombre al pueblo. Al arrabal como soplo de historia, habían llegado mis padres en tiempo justo para yo aterrizar; trece años después, edad en peso de experiencia, estimulaba avanzar dentro de una vanguardia y retaguardia impregnada de creatividad.

Lo que debió ser un paso cualitativo social y político se convirtió en paso atrás. ‘La ‘izquierda’, rastrera, se une al fascismo-capitalista imponiendo por ley la estela de la dictadura, tropas, iglesia, imperio, monarquía y constitución, haciendo lo imposible por fusilar el sueño colectivo. La conciliación impone el cambio sin cambio. La banca internacional paga. Ejército e iglesia se suman al imperio y mediocres de la reminiscencia nazi-fascista europea imponen ‘el avance’, “transición y democracia”, arruinando el desarrollo de la propia economía social. La dictadura siguió dentro. El franquismo sin Franco se perpetua el capitalismo, lo consiguió sin esfuerzo alguno ¿O es que no vivimos cada momento de nuestra vida como perfectos demócratas capitalistas? Hay elementos que confirman nuestra trayectoria, materia que va dando forma a unas y otros desde todos los puntos cardinales (Dos pasos atrás para poder reafirmar mi soplo de historia personal frente la tumba del muerto). La ventana abierta por mis padres brindó un camino largo de luz propia a la vista, en contacto con pueblos y culturas con las que formé parte del misterio que sigo fertilizando con ojo que mira y aviva el paso del pie; entraron a formar parte del fragmento de mi vida, sencilla pero dispuesta, y me volqué. Los abracé consciente de la parte por el todo, que une y a veces condiciona partícula a partícula, base de partida en mapa sin fronteras donde el ser como gente prima por encima de todo valor material por artificial, insustancial y superfluo.

Avancé en actos propios y tomé conciencia mucho más consciente de su contenido en mosaico de geografía humana internacionalista contra burócratas y parasiticos, hoy en boga al abrigo del capital, y, me sale el grito sin que yo lo pueda sujetar ¡No cedo NO cedo!. Sigo creyendo en la palabra ‘pueblo’ en contraposición al borreguismo. Pueblo que de forma consciente y decidida, lucha, no necesita que “su voto” forme gobierno, para que el capitalismo viva mejor y el fascismo laureado salga fortalecido. Mis primeros pasos al mundo en danza del viento y compromiso atravesaron Pirineos a participar en un emotivo mitín por la República; se encontraban algunos viejitos del motín todavía en pie del gobierno en el exilio. Este acontecimiento reafirmó aún más mi ímpetu. Disfruté del contacto de Lluís Llach, Aute, y Nuria Espert (entre otros) interpretando Divinas Palabras de Valle Inclan. Canté unida en puño cerrado entrelazada en compromiso a decenas de exiliados de casi toda América Latina. Agité y pregoné principios inalienables, que defendieron decenas de maestros fusilados, ensalcé poetas y leí El Capital. Por aquellos días sentí más seguridad que nunca del camino trazado donde la palabra “éxito” o “perfecto” no encajaban en el derroche de fuerza al combatir. Clandestinidad y Resistencia, en marcha a vencer; era la tónica sobre caminos pedregosos a la vista. Avivando misiones revolucionarias ha aflorado en mi vida, flauta, guitarra, percusión, canto, teatro y poesía, multiplicando opciones en oleada de filósofos de historia enarbolando fusil y bandera de liberación en clave de sol; sigo unida a la mueca altiva de la clave. Dominada la vida cotidiana por una intensa actividad en alza ‘Nocedo’ avanza ¡NO cedo NO cedo! Hubo situaciones pre-revolucionarias en las que nuestra escuela de teatro (como a nivel de partido) sacó sus carpas en plena calle a combatir a pecho descubierto. Calle enfrentada a los cuerpos represivos de exterminación devastadores en efectos de historia.

Asumí el teatro de compromiso iluminando alas de libertad en salas, establos, mercados y plazas, vida colectiva en alianza estratégica, formación, discusión colectiva, y el cine-club de barrio quedó tomado en compromiso atronando por el fin de la opresión. ‘Teatro de Urgencia’ creado en militancia estricta y clandestinidad férrea. Escuela en onda emotiva en compañía de una pareja` del pueblo y para el pueblo, camaradas catalanes con los que compartí la mejor parte de mi vida, genios del cómic dentro de la organización de vanguardia, a la que ensalzábamos como vía hacia la revolución. Vinculamos nuestra escuela a un Comité Antiimperialista francés que toma cuerpo coordinando` Domingo Rojo, en el Marché aux puces, junto a una fanfarria de jóvenes estudiantes de diferentes culturas. Hicimos una película antiimperialista, monigotes como el Tío Sam, reyes de la tiranía monárquica y bases militares fueron fruto del super 8 en salas de cine de barrio, dimos que hablar. El antiimperialismo formó parte de nuestra cantera humana internacionalista, aún existen muestras emblemáticas, la sumisión no forma parte de mi ventana al mundo. Rubalcaba, ex-secretario general del PSOE y ex-vicepresidente, ha muerto. En las mazmorras sigue habiendo decenas de presos políticos, hace unos días salió un preso con más de treinta años secuestrado en ellas. Mientras el derroche de principios ideológico-políticos continúa ‘por la izquierda’, estómago elástico, en dependencia exterior y precariedad social a todos los niveles. Llegados a este punto mido en altura al ser humano en construcción, el socialismo es mi meta, abrazo amplio aboliendo fronteras para el abel de mi hermano. Paso adelante. Más allá de la palabra en forma absolutista “patria” y “misma sangre”. Más allá de la intoxicación por campaña “reivindicativa” en grupo mediático. Más allá, siempre más allá del cambio de fachada “porque las condiciones objetivas han cambiado”. Más allá forzando la cerradura en actos de conciencia, fundiendo resistencia contra la palabra hueca que encierra el cerrojo esclavista perpetuando ideología y economía de dominación ¿En qué sentido cambiaron las condiciones objetivas para caer tan bajo desde el punto de vista de clase?.

La libertad arropa desnudando la trama, es esa propiedad de simulación tan intrínseca en toda la “izquierda”, como en él y ella “artista” del carmín Hollywood, alfombras de salón y alcoba de la decadencia aristócrata. Hay trampa y tramposos de ambos sexos. Berthol Brecht nunca perdonaría tal mediocridad; esa pulguita dentro del universo que expuso a forma de reflexión dialéctica, y nos pregunta -¿A dónde fueron los albañiles la noche que terminaron la Muralla China?. Dónde, la izquierda del país desde donde escribo, partidos marxistas-leninistas, soñadores de las columnas Durruti y pioneros de la estela de poetas de la generación 98 y 27, dónde, dónde fueron a parar? En la llamada jornada de reflexión, portón electoralista del gran capital, creo a ver visto siluetas despertar al son del paso de nazaren@s como mansedumbre masiva, y, me pregunté una vez más apoyada sobre la ventana de mi cuarto, la lógica bertiana ¿A dónde se fueron los “constructores de revolución”, hoy transición monarco-fascista, algun@s dentro del abanico mediático como “líderes de historia” (?), aclamados como apóstoles o apóstolas intocables?. La nominada vanguardia defenestró el frente antifascista hacia` el camino de la nada. Piedra de toque que desnuda e interroga verdades como puños sobre un mundo posible en el que sigo creyendo; base de hormigas laboriosas, canto de vida e historia, vamos llegando. Las misiones imposibles son estimulantes. Decir ¡basta! me congratula porque no es de pena ni de llanto sino antorcha bertiana, “si la gente quiere ver sólo las cosas que pueden entender no tendrían que ir al teatro tendrían que ir al baño”. Los que prostituyen la palabra nunca podrán formar parte del canto, palabra y lucha, es otra cosa; contra ellos canto. La simulación en la “izquierda” es una herramienta básica de principio elemental, fundamental, para infiltrarse en la sociedad, jugar con ella y salvar el capitalismo.

Rectificar es de sabios y bueno recordar el proverbio “La cuerda cortada puede volver a anudarse, vuelve a aguantar, pero está cortada”; no confundas las misiones de un revolucionario, con las de un misionero sea apóstol o diablo, ni cuando su misión por los motivos que fuera ‘coincidiera’, uno no hace al monje como para ensalzar la sotana a tribuna de liberación, recuerda “Quién acepta ser caza está clamando por la existencia de un cazador”. Como ceniza de urna pasó el 28 de abril (para dar paso al 26 de mayo en sintonía de carnaval) de un pluralismo interclasista generoso entre leyes extraterritoriales donde asoma el brillo del oro y del petróleo. Los hilos de la filtración detonando la izquierda siguen desgarrando para que nada se levante ni coherencia revolucionaria quede. Afortunadamente la historia va más allá, la “transición” desnudó la obra del desguace, los lugares estratégicos donde se “ocultaban” desviando el carril a vía muerta. Resistencia donde se golpeó con saña las organizaciones revolucionarias, sudor impregnado de acero y entusiasmo, contra la corriente en caza de brujas. Hubo fuego y asfixia a la crítica, mordaza interna y externa ¿Sobre que bases ideológicas la “izquierda” se apoya para afrontar la realidad política y social antes y después de las elecciones?. Sabotaje y reconciliación no es un paso adelante, ni el nihilismo, ni el abrazo a la reacción. Sí, puede que algún machete se enrede en la maleza / puede que algunas noches las estrellas no quieran salir / puede que con los brazos haya que abrir la selva / pero a pesar de los pesares la voz de Silvio llega a mi.

Maité Campillo (actriz y directora de Teatro Indoamericano Hatuey)

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