EL OTOÑO DE LAS
MÁSCARAS
El fascismo cabalga de nuevo en aviones que bombardean a
la población civil y hasta se sienta en los bancos de los
Parlamentos de Israel o de España, dejando caer sus máscaras cada vez que
tienen ocasión mostrando su alma mentirosa y criminal.
Hoy Israel bombardea Gaza con la saña que le identifica como parte de los mayores criminales de la Historia. Da igual que se llamen Netanyahu, Hitler, Franco, Pinochet, Mussolini, Stalin, Videla Pol Pot Pinochet y un largo etc. por citar algunos criminales emblemáticos: todos tienen las mismas señas de identidad. Esto no excusa el ataque de Hamas para quienes somos pacifistas y contrarios a la violencia, porque la vida es algo sagrado y toda guerra, como en este caso, es siempre un crimen colectivo. Y por supuesto, el otro bando, el de
Israel con Occidente, es aún peor porque la
desigualdad entre ambos es enorme. Mientras todo el mundo que se llama
democrático aunque tenga fascistas en sus Parlamentos se vuelca al lado
de Israel, presentado como víctima, el pueblo palestino, salvo una pequeña
facción armada, se encuentra solo, desarmado y asustado. Y esto nos
ha vuelto a recordar qué democracias tenemos. Por supuesto que el mundo árabe
carece de democracias, pero no intenta engañarnos. Son gobiernos, los árabes,
terriblemente autoritarios y enemigos de la libertad y los derechos humanos,
especialmente de los derechos de las mujeres, pero eso ¿ no ocurre también en
este lado? Recordatorio: Ley de Extranjería, devoluciones en caliente,( ¿ donde
están los derechos humanos? jueces contra la ley del Solo Sí ( ¿ donde la
valoración de la mujer?) ; persecución a los manifestantes a favor del pueblo
palestino bombardeado (¿ dónde libertades de expresión y
manifestación? ¿ Dónde la conciencia? Así que…
Fuera máscaras
Siempre
estuvo bajo sospecha una democracia que nunca era la de los
pueblos. No era de fiar, no es de fiar, y con sobradas razones, simplemente
porque NO ES. Esta democracia es la de ellos, no la nuestra. Está hecha a su
medida y por eso les gusta tanto defenderla.
Lo supimos
enseguida cuando vimos que en aquellos países en los que
estos “civilizados y democráticos” gobiernos del mundo “libre” de
la “humanista y cristiana Europa” posaban sus botas y sus banderas
victoriosas, aplastaban a sangre y fuego tanto en Latinoamérica, como
en Oriente o África cualquier intento de rebeldía de los
colonizados, subyugados y desprovistos de los derechos que supuestamente
defendían las metrópolis colonizadoras con su máscara de “mundo libre,
civilizado cristiano y democrático”.
De
ninguna manera aceptan que un país ose rebelarse y pretenda
arrancarles sus máscaras y quedarse con sus propias riquezas. El caso del
Chile de Allende puso de manifiesto definitivamente que la democracia, la
de los pueblos, no podía ser consentida, que la única aceptable era la versión
descafeinada de los amos de los pueblos y sus bailes de máscaras. Puso de
manifiesto que esas máscaras de aparente humanidad ocultaban gentes y poderes
infrahumanos, fascismos de diferente intensidad según la resistencia que se les
oponga, y que los criminales con corbata no solo tienen el control del mundo,
sino que hasta reciben premios Nobel de la Paz… ( ¿ Será Netanyahu el siguiente
al de Kissinger y Obama?)
Ahora bien:
lo nuevo, lo que nunca había ocurrido es lo que está ocurriendo en Palestina,
porque se acaba de crear una alianza internacional militarista “ a cielo
abierto” para proteger a uno de sus queridos amigos sionistas, a los que hay
que defender, porque siendo una potencia militar de primer orden con arsenal
atómico incluído pueden necesitar ayuda contra bandas muy desiguales en número
y poco peligrosas aunque maten. Por eso se les envía portaaviones y barcos de
última generación. Porque ¿cómo es posible que el pueblo palestino, que ha sido
invadido, colonizado, expulsado de sus tierras y de sus casas, confinado a una
franja al lado del mar pero sin derecho a utilizarlo a su conveniencia y
limitado al otro lado por un muro de más de diez metros de alto esté enfadado
por ser bombardeado durante años, humillado persona a persona, y por su causa
infra alimentado, exija tener libertad, agua, luz, medicinas, vida digna,
escuelas y hospitales decentes y hasta derechos humanos? ¿No debería
estar agradecido este pueblo porque no se les exterminaba del todo? Así que el
todopoderoso señor de la guerra Netanyahu, para mayor sarcasmo creador
del Hamas que ahora se le revuelve, acaba de anunciar a bombo y
platillo que va a cometer un genocidio y ese anuncio es aplaudido por
todos los gobiernos occidentales y hasta por mucha de esa llamada opinión
pública que no es otra que la nace de la desinformación al servicio
de esos gobiernos, pues la opinión pública carece de verdad tanto como los
gobiernos todos carecen de conciencia. Y eso hasta el punto de que
gobiernos tan “democráticos” como Francia, Inglaterra o Alemania manden a la
policía contra los que se manifiestan por las calles exigiendo justicia y fin
del genocidio al pueblo palestino. ¿ Cómo es posible semejante actitud? ¿ Cómo
es posible semejante atropello a principios éticos tan elementales? ¿ Bajo
cuántas capas de inframundo se halla la conciencia de quienes dirigen
esos gobiernos? ( Y aquí convendría decir a quienes se encargan del
trabajo sucio, los uniformados, que no es legítimo obedecer órdenes que se
opongan a la moral o a las leyes de Dios, ya que estos países se autoproclaman
cristianos. Deben saber que quien mata o maltrata recibirá de su misma
medicina antes o después debido a la ley universal de causa y efecto o
ley del karma).
Sionistas
o no, lo que estos prepotentes gobiernos de la banca, de los grandes negocios,
de las armas, los hidrocarburos, tecnológicas, farmacéuticas y demás,
nos cuentan sobre el mundo, o sobre los valores, como el valor del voto o
sobre derechos y libertades son cuentos chinos. Ni son cristianos, ni
demócratas, ni amigos de la humanidad o de pueblo alguno que intente tomar el
control de sí mismo. Su orgullo de clase solo les permite ser amigos de los de
su misma cuerda. Por eso apoyan a Netanyahu mientras contemplan con la misma
indiferencia a los que son arrasados por la bombas en la Palestina okupada,
arrasados en Ucrania, o a los miles que se ahogan en el cercano
Mediterráneo. Al fin y al cabo todo ellos son gentes de segunda clase: gente
que sobra. Y en este punto, ¿ no es legitimo preguntarse si los que están de
más, los que de verdad nos sobran no son precisamente los que
ordenan matar a sus semejantes sean quienes sean o provocan su
muerte en las fronteras del hambre?
Nuestro mundo
se va a pique, se desmorona por todos los lados, pero el más preocupante
de todos es el de la pérdida de la conciencia espiritual y ética, porque
la conciencia es el armazón que todavía sostiene a este mundo. Y vamos mal
cuando un jefe de Estado como el de Israel proclama públicamente que va a
a matar a gran escala, alardea de ello, lo cumple y encima recibe
aplausos y ayuda internacional, mientras se persigue a los que protestan. Vamos
muy mal.
¿Cuándo sonará el Gran Despertador Mundial?
14 de Octubre 2023
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