EL ARRASTRE ES CRUELDAD
ANIMAL
ABELROMAN HAMID
El arrastre de ganado es una forma de crueldad animal y lo afirman los profesionales de la sanidad animal, los veterinarios. ¡Y todo esto se hace por dinero!¿Dónde está la ética y la moral? Si definimos el concepto de ética y moral cuando actuamos, es no causar sufrimiento a uno mismo, a los demás, a los animales y al medio ambiente. Y a los animales se lo estamos causando de forma consciente o inconsciente. Los veterinarios de Avatma (más de 500 profesionales en todo el país) dicen: no podemos justificar la utilización de animales en este tipo de competiciones y su innecesario sufrimiento por el simple hecho de ser tradiciones populares, por lo que consideramos que estas prácticas tendrían que ser erradicadas a través de la modificación de las leyes de protección animal. En el ayuntamiento de La Laguna, su reglamento dice, se prohíben los animales en espectáculos, fiestas populares que puedan derivar en crueldad, malos tratos,
daños y sufrimiento. Decía un filósofo espiritual, que el verdadero amor tiene que ir acompañado de conocimiento, si no, no es amor verdadero. Y para comprender el sufrimiento que se causa a los animales en el arrastre de ganado, necesitamos conocer que opinan los veterinarios de Avatma. Cómo se produce y porqué ese sufrimiento. El sufrimiento no dura 20 segundos, de la prueba en sí, empieza mucho antes, en los entrenamientos, sin ningún tipo de control, ni miradas indiscretas, ahí son golpeados y castigados. ¿Por qué les asusta la vara? Porque la han probado… algunos les aplican, collares eléctricos y drogas. En estas pruebas existen dos tipos de sufrimiento el psíquico o emocional y el físico. Y esto atenta al bienestar. Como bienestar animal se refiere cuando el organismo no debiera presentar alteraciones emocionales ni fisiológicas, es decir no deberían interferir en sus condiciones normales. El sufrimiento sigue en el momento en que abandona su lugar de origen, desde la subida al camión, su transporte por carretera, su llegada a la fiesta local, se ven sometidos a un ambiente de ruido, música, gritos, luces, megafonía. La capacidad auditiva de las vacas es casi el triple que de los humanos, lo que les provoca estímulos desagradables y una situación de estrés, que se van sumando y sufriendo cada vez más. No se adaptan, lo que les lleva a un estrés crónico. Además de los traumatismos físicos, por el ejercicio físico forzado, intenso, brusco, violento, con el consiguiente dolor y sufrimiento. Otra evidencia que todos habremos visto, es como jadean sacando la lengua, babean y producen espuma por la boca, síntomas de alta frecuencia cardiaca y respiratoria, son reacios a avanzar, se salen de la pista, con intentos claros de huida provocados por la fatiga y el miedo, que les provoca dolor y angustia injustificada. Los movimientos respiratorios y el jadeo reflejan el alto grado de hipoxia. Todo ello sería la consecuencia lógica de la dificultad de los pulmones para oxigenar al animal. En resumen, la excesiva actividad metabólica, una inadecuada oxigenación de los tejidos y la acumulación de cantidades excesivas de ácidos orgánicos (pirúvico, láctico, acético...) debido a la incapacidad de eliminarlos por vías oxidativas (utilización de oxígeno), provocarán un descenso del pH, lo que se conoce como acidosis metabólica, que es un parámetro inequívoco de sufrimiento en estos animales, ya que se produce un drástico desequilibrio metabólico celular y en consecuencia de la función corporal. Y estos datos de información y conocimiento lo tienen que asumir los ganaderos que aman de verdad a sus animales, como ya lo hacen algunos que han dejado de hacer arrastre de ganado.Tratar con humanidad a los animales es tratarlos con compasión,
consideración y sensibilidad. Por eso los que tratan con crueldad a los
animales, no les gusta que tratemos de “Humanizar” a los animales.
ABELROMAN HAMID
COORDINADOR
RED CANARIA SOLIDARIA CONTRA LA CRUELDAD
ANIMAL
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