"EL
PEPE, DEMOLEDOR DE LA CAMPAÑA DEL FA"
EDUARDO SANGUINETTI, FILÓSOFO
Y POETA RIOPLATENSE
No pretendo en este editorial construir una escritura de la
pérdida y la rebeldía, tampoco volverme un profesional del desdén, de la
suficiencia, del exilio interior "ni de nada", simplemente pertenezco
a lo moderno, siempre joven y disconforme con "las democracias
fingidas", batallador eterno, en constante actitud ética y estética.
Realmente es apasionante, vale la pena
le da sentido a esta existencia por la que transitamos, sobre todo en un
presente crítico, que exige reflexionar sobre nosotros mismos y nuestras
circunstancias, para luego accionar de manera decisiva, en discurso directo,
sin dobleces, denunciando El teatro "bufo" del que somos
espectadores, contando con José "Pepe" Mujica, como primer actor, me
llevan a escribir en discurso directo, sin dobleces, acerca de la democracia
"fingida" que soporta el pueblo uruguayo, sin espacio a
réplica...."Pepe"Mujica que está demoliendo la campaña del Frente
Amplio, hablando a diestra y siniestra sobre todo, pontificando cual Mesías del
Tercer Milenio acerca de las estrategias oblicuas para llegar ser alguien como
él, desde la ¿desmesura austera? y el personaje que se ha creado, con ayuda de
las corporaciones mediáticas de naciones genocidas, han dado en el perfil
narcisístico de este manadatario megalómano.
En octubre se elegirá presidente en Uruguay, bien, según las
encuestas pareciera que el Frente Amplio esta disminuyendo su potencial en
cuanto al caudal electoral....¿porqué?, ¿ a causa de qué conjura estaría
ocurriendo esto?, ¿es que alguien ha muerto?, ¿Lacalle Pou es un lider
carismático sin igual?, ¿el discurso de este candidato del partido Nacional es
tan avasallador que seduce cual princesa a los votantes?....nada de
eso....Lacalle Pou, en la ubicuidad de su ausencia, solo se ha asimilado al
vacío conceptual y discursivo de este tercer milenio, dejando de lado el
discurso y su celebración, asimilándose a la civilización de la
"cosa", convirtiéndose en objeto, cual sujeto del destino.
Ante "el estado de las cosas", creo sería acertado que
el Dr. Tabaré Vazquez, candidato del Frente Amplio, debería asimilarse a una
gestión de campaña, con el apoyo de la capaz y perspicaz Senadora Constanza
Moreira, un personaje indispensable en esta elección...accionando desde
perfiles imprevisibles, desde los bordes, los intersticios, desde donde el
factor sorpresa sea una constante y una modo de instalar el discurso, pues el
electorado ha mutado, no es el de hace diez años, este solo sigue tendencias y
muchas veces las palabras huelgan...pareciera que Tabaré no se da cuenta o le
teme a Mujica, pues solo el replique de tanto "blabeteo" del Pepe,
harta a quienes podemos apreciar ciertas patologías en este anciano presidente....en
septiembre parte a Noruega, curioso, mes de premios nobeles. Si Tabaré desea
ser presidente, debería mantener una reunión con Pepe el hablador y solicitarle
que haga silencio, pues como vienen las cosas, se esfuma el discurso previsible
del ex-presidente, demasiado asimilado al de los otros candidatos, en fin, todo
confuso o demasiado claro....no hablar de Azucena, la preferida de Astori que
pasa al bando de Lacalle Pou, ¡nadie dice nada?, ¿qué ocurre los periodistas
temen decir lo que sienten y piensan? o solo se dedican a alabar al hablador
Mujica, que está haciendo campaña para blancos y colorados: ¿una chambonada?
Se ha escrito demasiado acerca de los rasgos diferenciales de
las dos concepciones de democracia: la liberal y la social, coincidiendo ambas
más allá del sistema electoral: un hombre un voto: un voto “obligatorio”
(aberración que esclaviza al ciudadano harto de corruptela a concurrir a las
urnas a votarse a sí mismo pues la oferta de candidatos es deprimente, y una
pena caerá sobre él si así no lo hace), y es que ambas predican la realización,
la plasmación de valores tales como soberanía popular, derechos humanos,
igualdad de oportunidades, libre expresión, etc....hoy ausentes, solo valores
de cambio y lobbies con transnacionales y corporaciones económico mediáticas,
que hacen que una imágen de cualquier tipo, potencialice y presione al
ciudadano desprevenido y anestesiado que votará por quien lo seduzca, pues los
discursos de campañas electorales, ante la muerte de las ideologías, son
patéticamente similares.
Estos valores, han sido causa de grandes luchas políticas en
busca de su implementación, que hoy ya carecen de significancia y significado.
Pues bien, asistimos a un cambio sustancial del concepto de democracia, ella
dejó paulatinamente de lado ese núcleo vital de valores a preferir, para
reducirse a una maquinaria de gobierno, a una democracia procedimental. Ya no
más predicación de valores, lo que supone preferir lo sustancial y posponer lo
aleatorio. Para esta nueva democracia sólo vale que el procedimiento sea
coincidente con el sistema de normas. La corrupción que pulula por todas partes
se produce cuando el sistema normativo cae en desuso. Nos hemos transformado en
sociedades anónimas. No interesa ya que 15 millones de argentinos o 200 millones
de iberoamericanos o toda el Africa subsahariana vivan debajo de la línea de
pobreza, lo que interesa es que el “procedimiento democrático” se cumpla. Esto
es la democracia reducida a maquinaria procesal.
La democracia se limita a un simple procedimiento, es un
formalismo que, eso si, hay que cumplir a raja tabla. Como el dogma es que al
poder sólo se accede por el voto, el cómo se consiga, no interesa. La
conservación del poder se realiza a través de una reelección perpetua con
constituciones ad hoc, el cómo se logre, no se cuestiona.
El Dr. Tabaré y su grupo de asesores, no debe ignorar que
asistimos en nuestros días a la despersonalización de la política. Los
políticos son reemplazados rápidamente por los tecnócratas al estar la política
subordinada a la economía. Y los tecnócratas, esto es, los políticos
procedimentales, no tienen pasado en el campo de lo político. Al menos el
político tradicional tenía que dar a su clientela política alguna explicación
de sus actos, el tecnócrata no da razones, sólo beneficios a quien le paga. Los
grandes actos de corrupción de estos últimos años, en Uruguay y Argentina,
fueron llevados a cabo por tecnócratas que asesoraban a los funcionarios en
acto de gobierno procedimentales. Para el neoliberalismo procedimental no tiene
importancia la inclusión de las mayorías en el mercado de trabajo ni de
ganancias.
En la democracia procedimental de nuestros días esta lógica de
la exclusión funciona concentrando el poder político y económico en muy pocas
manos. Así los funcionarios cuando renuncian o son renunciados no se retiran,
como antaño, a sus casas, sino que son reubicados en otros puestos. La
concentración de poder y riqueza destruye rápidamente la clase media creando
una sociedad de dos velocidades: los muy ricos y los muy pobres, cumpliéndose
así el principio que dice: a mayor privatización de la riqueza, mayor
socialización de la pobreza.
No idealizo cambios, solo presiento...y los presentimientos con
bases sólidas, operan como aventadores de rutinas, prejuicios y miopías en
planos generales del pensamiento, poniendo en juego valores congelados en los
escaparates de los ideales perdidos...eso si, se precisa coraje, pues el
desafío es enorme a la hora de jugarse entero por un Uruguay, donde las
promesas de campaña electoral no han sido cristalizados, a pesar del deseo del
presidente de "morir con las botas puestas", creo mejor "vivir
con las botas puestas" y que caminen un sendero de solidaridad, justicia
en acto, fraternidad con nuestros
conciudadanos y en igualdad absoluta, para hacer de Uruguay, no un número en
los medios de marketing, cocinados en las usinas del imperio, sino una nación
libre y soberana, al márgen de tendencias y aplausos de naciones genocidas y
discriminatorias.
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