CHORIZOS

CHORIZOS

JOSU AIZPURUA

Dice M Punto que el emérito debiera volver a casa; yo creo que no, es él el que debería estar también en Abu Dabi, por presidir algo que montaba corrupción. O es tonto y no se enteraba o miente y disimula con méritos de Oscar.

La reaparición editorial y mediática de este canalla y mentiroso, que dice con todo su aplomo que “ingleses, franceses y españoles” montaron la democracia tras la II Guerra Mundial y esa es la que él apoya. Olvida que “esa”, la de la España tras la II Guerra Mundial; es la Dictadura Fascista de su amado Franco y Juan Carlos Borbón, que, tras una pasadita por el maquillador, es la que él practicó en la Democracia78, traicionando todo el Espíritu de la Transición y la buena voluntad de las derechas honestas.

Este personaje necio y grotesco, que toma por idiota al ciudadano del Estado español, al que conoce y miente desde antiguo sabiendo de la impunidad de sus actos por medio de la intervención de sus compinches de la elite, debe desaparecer de la escena mediática, su presencia es un baldón democrático. Y son las derechas honestas y democráticas las que deben desenmascararlo y arrojarlo al pozo del olvido. De su inacción surgieron las extremas derechas que nos asolan.

Conservadores y conservaduros; ¿No son capaces de encontrar políticos-as con visión de Estado y mano en el bolsillo?

La incapacidad y picaresca de este botarate ha contagiado al elenco de derechas pepero, y todos cojean del mismo pie. Y se convirtió en mal de muchos.

Personajes de esta catadura moral e ineptitud, pululan alrededor del Poder que delega la Casta y contribuyen a que la UE no se haya asentado en el solar hispano y la Constitución78 navegue en el fracaso, sin rey, sin patria y sin patrón.

No es cuestión de izquierdas y derechas, lo es de dignidad moral y ética.

Fuera chorizos del panorama político y la economía debe dejar de tener corruptores como medio de obtener el nicho institucional. Hoy hay “empresarios” cuyo único mérito competitivo es pagar poco a sus obreros. Chorizos y corruptores, emboscados donde se necesita la honradez y eficacia pública, lastran el futuro e impiden que jóvenes idealistas emprendan la tarea pendiente de un Estado justo y plurinacional, en el que la meritocracia alcance al fin las poltronas del poder.

Si aparecen; estas ratas abandonarán el barco.

Los chorizos vaciaron la España central y se concentraron para seguir hundiendo el futuro popular en base a conseguir mantener sus mamandurrias y poltronas. Acabemos con ello.