sábado, 22 de diciembre de 2018

DESTREZA, por José Rivero Vivas



DESTREZA
José Rivero Vivas
(Del libro inédito:
ESCRITOS EN VERSO
Obra: V.21 (a.108)
José Rivero Vivas
Diversas fechas)

DESTREZA
Diciembre de 2018
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Unidos los Hambrones
de tierra, mar y cielo,
según convocatoria
de azur concilio pleno,
se acuerda allí excluir
al soso, sin sosiego,
quien aspira también
a situarse entre egregios
señores de talento,
henchidos de alta alcurnia,
faros del universo.


Ventura desplazada
de múltiple consuelo,
la luz de blanca aurora
alumbra acre señuelo;
pronto la amanecida
ratifica el recuerdo.
Se dispone alba causa,
sin conceder requiebro,
de mostrar a quién fuere:
al margen de contento,
fino no existe nada,
aunque parezca incierto.

En la orilla del mar
dulce resuena el eco;
exuberante escena,
compás de tierra adentro.
Un murmullo se escucha
en son de florilegio:
por librarse del pobre
graban rigor al pliego;
favor de propiedad
liga sus privilegios.
La ley firme conmina
considerar el fuero,
so pena de vestir
gruesa malla de hierro.

Temprano sale a venta
la trova del pesquero;
carece de licencia
para arribar a puerto
y exhibir en mercado
su balada de premios.
Hartos de cavilar
con cadencioso sesgo,
fábula indecorosa
y perfil impertérrito,
asombra esta pamema
derivación de cuento:
mezquina sociedad
de tortura y tormento,
donde abunda desgracia
para el uno indefenso.

Revueltas de la calle:
unos, ayer; hoy, éstos,
rugen a los demás
su impavidez de asiento:
asperezas de siempre,
sutil embrollo horrendo.
Alborozado en mucho,
-de color manifiesto-,
el sandio de acomodo,
igual que el financiero,
acoplan su voz cuando
exclama llano el pueblo:
¡Enhorabuena todos;
éste sí es buen Gobierno!

En el imperio, sombras
de trasnochado velo
se esparcen por doquiera
del ser en detrimento;
falto de raciocinio
se nubla su cerebro:
goza con ver al rico,
de ancha sonrisa el gesto,
quien al desgaire canta
salmo de mero obseso:
afilado cuchillo  
con que cercena el cuello
de quien ose dudar
de su designio serio.
Obvio deber cumplido,
laurel a su denuedo.

Yacen los insaciables
si aúllan sus lobeznos
hostigando al ausente,
que peca aquí de ingenuo.
Nulo su porvenir,
la gente está con ellos;
dedicados en fe
-aleluya y misterio-,
se erigen victoriosos
ante el triunfo de medios
que constriñen su arcano
dentro del mismo seno
do palpita su arrobo
en pro de grave yerro.

Dormido está el planeta
en su órbita de miedo,
difunde al par los cambios
de insólito reflejo,
que colman la esperanza
de un corazón en riesgo.
Las horas se aproximan
para deleite y plectro
de vislumbre curioso
al punto del proceso,
por revestir el ansia
con osado ornamento.
Olvido se perfila
en horizonte prieto,
razón que el ente humano
vira en contra, soberbio.
La augusta soledad,
hoy irrumpe de nuevo:
pugna de oscura vida,
laso se esfuma el sueño.
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José Rivero Vivas
DESTREZA
Diciembre de 2018
ESCRITOS EN VERSO
Obra: V.21 (a.108)
Diversas fechas
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