¿MANÍAS?

¿MANÍAS?

JM AIZPURUA

20. 573 Canarias

33.824 Madrid

32.969 País Vasco

30.064 Cataluña

¡Qué no! que no son manías; miren el PIB por persona del 2017, y opinen. Hay 13.251€ de diferencia entre la Metrópoli y las islas. Y si les suben un 3% anual a las dos, entonces habrá una diferencia de 13.648 €.

Canarias cada vez irá a menos con este carro autonomero mientras otros van en jet.

¡Y todavía pretenden “re-centralizarnos”!

Si no se produce una inyección UE en las islas; apaga y vámonos.

Y la Metrópoli debe ya considerar nuestros derechos históricos, ¿o acaso Beneharo no llevaba la cuenta de la vieja? Pues eso da derecho a un Concierto Económico Guanche ¿no creen? Y no profundizo más pues mi colega la escritora Bizkarralegorra ya me dio un cocotazo por mi post sobre el Concierto vasco y con ella no quiero conflictos que es muy buena gente.

Aquí todo es por la pasta y ese PIB menguante catalán explica su independentismo sobrevenido desde que los madriles marianistas se volcaron en invertir en valenciano y no en catalán.

Pero no se crean esas cosas de las estadísticas, pues si por ejemplo se van con el cuñado a un guachinche y éste se come un pollo, estadísticamente será medio pollo por cabeza, aunque usted no lo cató. Con los dineros del PIB es igual; están en la bolsa del rico y los demás estamos para hacer bulto.

¡Qué más quisiéramos que gozar del clima canario y pasear entre sus sendas! Pero, hay una realidad social y patriótica que nos muerde, que nos duele en sus miserias, que nos indigna en el cinismo de sus poltroneros, que nos apena en el miedo y la incultura de sus gentes capadas por el godo. Pero como la juventud hoy ya ve su trágico futuro entre vírgenes y pendones y gracias a Internet observa otras realidades, así como la suya sin tapujos: los jóvenes intuyen un gran futuro. Pero para llegar a ese futuro hay que atravesar el pésimo presente.

A mi como viejo y residente, nada de “canario” que si cojo la lanza y salto de pastor por los montes me dejo los dientes en el suelo, pero también más implicado en la canariedad que muchos nativos, me corresponde hablar claro, con verdad, y valiente ante las muchas presiones que recibo. Estoy en ello por que pienso que los jóvenes no deben caer en las trampas y errores que nuestra juventud cometió. La sociedad es distinta y algunos caminos ya se vieron inservibles. Lecciones ningunas, pero experiencias muchas.

Ya me gustaría a mi poder dar la fórmula de acabar con el comando mortadelo y dar entrada a gestores honrados y capaces; pero no la tengo. Ni para subir al Tete. Las cosas son bastante más difíciles de lo que parecen pues el señorito godo y sus mariachis caciquiles aprietan sin piedad. No he visto a ningún sintecho beneficiarse del “gran logro” de la bajada de precios de los aviones: lo cambiarían sin dudar por un bocadillo de queso.

Pero cuando uno trasciende a la puta realidad manipulada, se sube en la utopía, y lucha con fe, se derriten los paradigmas de la casta y entonces se abre un futuro en el que los hombres y mujeres libres tienen mucho que decir.