LA, LA, LA....
DUNIA
SÁNCHEZ
La, la, la.
Brinca con el esplendor de los soles de septiembre que se emancipan cuando el
brío de tu alma se acuesta con el ocaso. Aquí estás andando de aquí para allá,
de allá para acá en la búsqueda pertinente de esas alas que te revuelquen en
lagunas doradas por la amplitud de tus deseos. La, la,la…rumoreas una vieja
canción siempre presente en tu memoria y con ella avanzas hasta lo bello
guardado en lo hondo de tu rostro. Te
evades del vaivén de la vida, en estos instantes eternos no quieres saber nada.
Solo el recorrer con tus zancadas cada hoguera donde la paz unifica los seres.
A ellos ves. En ellos te acurrucas y el calor desprendido emociona tu corazón.
Te vuelves a levantar, retornas en esa danza larga…la, la, la…y sigues canturreando esa canción. Sin más te
encuentras cara a cara con un espejo nacido
de esas doradas lagunas y te miras. Te ves más joven, con el radiante
salto a la esperanza que hila cada pedazo de firmamento en astros de tus
sueños. Se siente purificada, agua que
estelar que la induce a ser singladuras de sí misma. La, la,la…canta alto y
fuerte con la visibilidad de un mundo mejor, con el deseo en amplitud que la
desnudez de unos ojos que miran y miran la danza de la armonía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario