EN VÍSPERAS DE LA FIESTA
CRIS COVO GÓMEZ
Un año más la Semana Santa impregna
nuestra atmósfera, nuestras vidas, vuelve a florecer en las calles, está en
boca de la gente.
Este tipo de manifestaciones dista
sin embargo del conocimiento verdadero de Dios, de nosotros mismos. La imagen
de la cruz, de los pasos sangrantes, viene a perpetuar en conciencia que la
vida es dolor, sufrimiento, un dramático pesar que se transmite de generación
en generación, siendo ésta una idea bien distinta del conocimiento del yo, del
acercamiento al ente primigenio que da sentido y color a la vida, del maestro
que duerme en nuestro interior, esperando nuestra liberación, el conocimiento
de la persona, el nosce te ipsum del que hablaban los antiguos.
En vez de potenciar estas cualidades,
nos hemos quedado en la imagen dantesca, terrible que cierta casta nos ha
impuesto, ciñiendonos a la triste imagen de aquel profeta que no fue aceptado
en la sociedad de su tiempo, y cuya memoria respeto como la que más.
Se hace necesaria una evaluación del
ser humano, el puente hasta el superhombre del que hablaba Nietszche, sin
olvidar quienes somos ni de donde venimos, reciclados desde la experiencia de
épocas pasadas sin tropezar nuevamente en el miedo y los obstáculos.
La raza ha sido llamada a responder,
a culminar, a completarse, algo que las manidas voces de los predicadores no
alcanzan a comprender.
Tal vez de una vez se logre entender
que vinimos aquí por una razón, que nuestro actual estado de ser tiene un
propósito. Que el sepulcro no es el final sino el principio, no es el fracaso
sino la victoria sobre las pasiones humanas y los siglos de oscuridad que
nos llevan a pensar las mismas cosas,
siempre reproduciendo identicos errores.
Animo desde este concurrido blog a
que cada uno descubra la fuerza verdadera que dota nuestra existencia de algún
sentido, convecida de que así sea.
Un año más saludos a los ami@s de Nación
Canaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario