LOS PEÑISTAS DEL TENERIFE TERMINARAN PAGANDO
Por Anghel Morales
Con este final de temporada, el Dictador del Tenerife ha querido
dar una vuelta de tuerca al yugo que desde que llegó ha colocado sobre la
garganta de la sumisa afición. Tres con las que saques y llevo blancas. Estamos
ante un claro caso del síndrome de Estocolmo, donde la secuestrada afición se
ha enamorado de su secuestrador y mas tarde o mas temprano termina haciendo lo
que el presi quiere, pueden tener conatos de rebeldía, pero al final quien
manda manda.
Este elemento tan negativo -el Dictador- llegó al Tenerife hace
siete años, de la mano del presidente menos querido en la historia del mundo
mundial. De casa cinco canarios, cuatro no quiere a Paulino Rivero, las
encuestas así demuestran, pero el pueblo canario tiene que seguir soportando a
este nefasto sujeto, lo mismo pasa en Tenerife, que Miguel Concepción en plan
Dictador se ha adueñado del Club. Y a joderse toca.
A mentido mas que Rajoy, pero ahí sigue, al frente del club, con
el apoyo de sus siete u ocho mil incondicionales que lo mantienen en el cargo.
Todos esos que sacan abonos y van al estadio, son los que sostienen a
Concepción, si dejaran de comprar abonos, si dejaran de ir al estadio,
Concepción ya se hubiera marchado, pero las peñitas y los aficionados dóciles
son sin lugar a dudas los culpables. Nunca han sido críticos con el presi, de
eso buena culpa tienen los telepredicadores - prensa- que hacen el juego a
Concepción tapándole todos sus errores -que son muchos-. Miguel Concepción en
una de sus primeras medidas dictó un mandato por el cual, se pasa de 8 a 115
acciones para tener la palabra en la asamblea de socios, mas todo el mundo
calló, prensa, aficionados, peñitas. El equipo cayó de Primera a segunda B en
poco tiempo, las peñas no solo no protestaron sino que hacían fiestas para
aplaudir a perdedores, único caso en el mundo mundial. Concepción ha sido el
peor presidente en la historia del club, pero nadie lo cuestiona, todos callan
y otorgan, Miguel es el puto amo. Con esta idea de cobrar en el primer partido
de play, la afición ha hecho un conato de protesta, todo de la boca para
dentro, pero al final el amo es el amo y aficionados y peñas terminarán
pagando, Miguel habrá ganado una vez mas y esta afición demuestra inmadurez. En
fin, que quien manda en peñas, aficionados y prensa es Miguel Concepción, las
peñas podrán ladrar, pero al final son todos una partida jala bolas y pagarán,
seguro que pagarán. Fuerte mierda.
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