¿Electos para robar? ¡¡¡NOOO!!!
Cándido
Quintana
¿Qué hacer ante tanto atropello, que hacer ante tanta corrupción
de mierda, que hacer ante tanta deshonestidad política? ¿Tragarnos la lengua,
admitir que somos unos exagerados, dar por buena la peregrina aseveración del
presidente Rajoy de que en España no hay una situación de corrupción
generalizada, o aceptar como de recibo todo lo malo que esta sucediendo? La
galopante oxidación de los engranajes políticos de este País lo está
corrompiendo todo, y ciertos sectores empresariales y bancarios tampoco son
ajenos a ello.
Pero ante la evidencia del más grave delito que se pueda
cometer, atentar contra el erario que -todos- hemos constituido, ya ven las
salidas después de alegar una y otra vez inocencias o hacerlo por el bien común
o desconocimientos ¿?, ¡estamos electos! Que quiere decir esto, ¿que por lo
tanto pueden? ¿Pueden que, lucrase a costa de los tan depauperados recursos
públicos? ¡Que desfachatez, que poquísima vergüenza, que deleznable sentido de
responsabilidad y de solidaridad! Necesitamos de una Justicia ágil y
contundente para enderezar el -proa al marisco- rumbo de este País, de este
Archipiélago Canario, de esta Isla de Tenerife.
Urge dotar a nuestras arcas públicas al máximo para poder
atender tanta necesidad perentoria, que no son -puertos de granadillas,
teresitas y similares-, y ante la escasez derivada de la crisis galopante que
atravesamos, no queda otro remedio, de momento, que recuperar urgentemente los
dineros que han volado, que son demasiados. Hagan cuentas de lo que los Medios
sacan un día sí y otro también, y tengamos claro que lo que está saliendo no es
prácticamente nada comparado con la realidades aún ocultas en un País con
corrupción generalizada como España, que lidera el ranking de países con
políticos, grandes empresarios y banqueros corruptos de los del mundo
desarrollado.
A lo mejor a algunos hay que recordarles que aunque estén
tipificados de diferentes maneras, que no se roba exclusivamente por meter
directamente la mano en la lata del gofio o en gastar dinero público en
capítulos no permitidos, ni financiarse ilegalmente, en lo que algunos partidos
políticos son todo unos expertos. También en otorgar concesiones públicas a
cambio de ciertas prebendas, o propiciar o admitir sobre-valoraciones de bienes
a adquirir desde lo público, etc., porque realmente esas concesiones y
sobre-valoraciones sólo persiguen un botín, un sabroso margen a cargo del
erario, o sea de todos nosotros, para que los -sinvergüenzas de costumbre- se
lucren. Y de esto en Tenerife tenemos algunos casos que han sangrado nuestras
arcas hasta dejarlas prácticamente en quiebra, no hace falta dar nombres de
Ayuntamientos y de tramas por sobradamente conocid@s.
Urge despolitizar completamente la Justicia, pero de verdad,
para que se constituya realmente en el poder independiente, congruente y
operativo que el País necesita. No puede ser que cuando un Juez da pasos
esperanzadores que ponen a algunos de los que me he referido en su sitio, se convierta en punto de mira de la propia
Justicia, porque todo se nos desmorona aún más. Si lo logramos y que el ladrón
no lo sea por robar un pan, porque se trata de una carencia que tiene que ser
atendida por los servicios sociales, sino por atentar contra las arcas
públicas, que por la crisis actual debe ser declarado crimen de estado,
habremos corregido el peligroso rumbo de colisión que llevamos. Mucho dinero
debe retornar desde empresarios deshonestos, pero mucho más aún desde
políticos, partidos e instituciones varias que no tienen licencia para robar,
el Pueblo no les ha elegido para esto.
Cándido Quintana –
Presidente de la Plataforma de Defensa del Puerto de Santa Cruz
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