jueves, 15 de octubre de 2009

DECADENCIA LITERARIA

Confieso, que cuando se dedica a la asquerosa y repunante profesión de escribir a lo último donde uno puede recurrir es a abrir un blog, pero en un intento desesperado por conocer como se vive en la bajeza literaria, e decidido abrir un blog, para intentar competir en ridiculez y en decadencia con ciertos plumiferos venidos a menos o a lo mejor, siempre han estado en este punto de la nada.
Todavía no entiendo, para qué coño sirve un blog sino es para lamer el culo a los amigos y a los poderosos y por el contrario poner a parir a nuestros enemigos o a los desgraciados. Los blog suelen tener menos calidad literaria que los SMS, lamer el culo a alguien no es literatura, ni contar la cantidad de gilipolleces que cada idiota hace al día, ni sus frustaciones -paga un psiquiatra-, ni los complejos galdosianos. Esto de tener un blog es como llevar los pantalones de campana, todos iguales o los cerebro tónicos apapanatados que compran las camisetas en las grandes superficies, al final todos juegan en el mismo equipo: atrasados consumistas.
Lo dicho, ingreso en el Club de la DECADENCIA LITERARIA e abierto un blog, ya soy un idiota compulsivo, me uno a la manada de borregos que escriben sólo como terapia, pero que no los lee nadie. Aquí estoy;

1 comentario:

  1. sí, terapia, pero que es el arte sino terapia... están más vivos los blog que las editoriales... la cuestión es escoger... y este tuyo demuestra el empuje y el fuego... ale, viejo bimbache, palante siempre

    ResponderEliminar