MALDITOS TRAIDORES
JOSU AIZPURUA
El General McArthur
proclamó en la ceremonia de rendición del Japón fascista la inutilidad de la
Guerra y la necesidad de crear nuevas instituciones mediadoras para evitarla.
Pero hoy ante la
invasión de Putin, la oligarquía USA y su OTAN con su títere Zelenski responden
con la Guerra y no con la negociación; malditos traidores.
De derrota en
derrota, Zelenski nos sumerge en la comedia USA, que nos lleva a Europa a la
sumisión OTAN y a la desaparición de un lugar en el Mundo multipolar. EEUU,
China y Rusia son los ejes sobre los que el Mundo gestiona su camino.
Y la derecha europea, roto su camino fascista por los EEUU de McArthur, no ha sabido renacer en Democracia y ocupar un lugar en el progreso social. Hoy solo sabe añorar el fascismo.
La Democracia de
McArthur, de Kennedy, de Obama, no es la que hoy practican las derechas.
Dirigidas en la sombra por mafias, corruptos y oligarquías, los que por su
situación económica de poseedores los secundan son traidores a su condición de
derechas, y a su condición de Género Humano; malditos traidores.
Nunca aceptaremos
que la violencia sea la única alternativa y menos como Guerra.
Desde la Democracia
Cristiana, se han ido perdiendo sus dos principios; democracia y cristiana y
vemos al “gallo” haciendo coro para el trono del PPVOX. Y tríos en la SER para
apariencias muy peligrosas y sectarias. Nada hay por la derecha que haga
justicia a la sociedad que ella predicó en el siglo XX.
Y las sociedades
del siglo XXI, segmentadas y con brechas insalvables necesita que ese 30% de
pequeños poseedores donde se esconden los oligarcas y los dirigen, hagan caso
al 70% de desposeídos, manipulados, alienados e inermes, para lograr espacios
de progreso en los que una nueva derecha responsable intente un proyecto de
Sociedad semejante al prometido en el Espíritu de la Transición.
Hoy se avergüenzan
de sus actos, tienen que ocultar su pasado con leyes de secreto, no dejan que
la TV de imágenes de los muertos en la Guerra, ni de los ancianos muertos del
C19 en sus asilos, ni de los acuerdos a los que llegan y por que los llegan.
Sánchez y el Sultán callan.
Todo tiene un hedor
a corrupción y traición de Casta; traidores a todo menos su bolsillo que es hoy
su razón de ser. Derechita cobarde; maldita traidora.
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