EDUARDO
SANGUINETTI: UN INTELECTUAL TROTAMUNDOS QUE MILITA CONTRA LAS PASTERAS
Graduado
en filosofía en la Cambridge University, y autor de varios libros, Eduardo
Sanguinetti no es un intelectual clásico. Un estilo algo excéntrico delata en
realidad al artista vanguardista. De hecho tiene por oficio, también, las artes
plásticas. A lo que se suma ese aspecto mundano que rodea al viajero
empedernido, que hoy puede estar en Nueva York y mañana en Berlín. Sanguinetti,
que acaba de ser expulsado confusamente del Uruguay, vino a Gualeguaychú
atraído por la causa contra las plantas de celulosa. Y le contó a EL DIA que
prepara un documental sobre el tema para el Discovery Channel.«
Por Gustavo Carbone y Marcelo Lorenzo
¿Quién
es Eduardo Sanguinetti? A decir verdad tiene un currículum que sorprende.
Cultiva la filosofía, disciplina en la que se graduó en la Cambridge
University. Y también hace poesía. En sus libros (‘Alter Ego’, ‘Morbi Dei’,
‘Territorio de pájaros’ ‘Per se’) aparecen, así, sus intuiciones estéticas y
metafísicas.
Pero su
aspecto descoloca. No reúne la imagen del intelectual formal, discreto. Más
bien se tiene la impresión de estar frente a un personaje renacentista -acaso
este término lo defina exactamente- Alto, muy alto, de largo cabellos rubios,
se viste de modo no convencional. Se parece a un artista.
Y de
hecho lo es. Ligado a las artes visuales, Sanguinetti es un habitué de los
círculos culturales y artísticos de Belín, Amberes, Londres, Madrid, y de casas
de altos estudios de Estados Unidos, Medio Oriente, Brasil, Argentina y
Uruguay.
Lo
polifacético del personaje, le ha hecho decir al periodista Eduardo Tarnassi,
del diario La Nación, en su afán por catalogarlo, que Sanguinetti es todo menos
simple. Si hasta incluso ha sido candidato a intendente por la Capital Federal,
en 1996.
Pero
las extrañezas no acaban ahí. Resulta que Eduardo tiene vínculos familiares entrerrianos.
Su bisabuelo fue durante 18 años intendente de la ciudad de Colón. Apolinario
Ecolástico Sanguinetti, de él se trata, fundó también el periódico El Entre
Ríos.
También
está el abuelo Eduardo Sanguinetti, quien nación en Colón y fue un destacado
geólogo y especialista en petróleo, hombre de consulta en temas de
hidrocarburos del presidente Arturo Frondizi.
Pero
volvamos a nuestro porteño trotamundos -insinúa ser una suerte de ciudadano del
mundo, sin punto fijo en la geografía-. Si su estilo algo excéntrico despierta
curiosidad, también sus dichos son provocadores.
Es una
suerte de “todólogo” -opina sobre todo- en cuyo discurso transcurren citas de
Emmanuel Kant (filósofo), distinciones sobre la posmodernidad, ironías hacia
Fito Páez y Charly García, y reflexiones
sobre el presente de América Latina o el papel manipulador de los medios de
comunicación.
Pero
quizá él quiera definirse mejor como un librepensador. Sanguinetti asegura que
tiene que trabajar como el resto de los mortales para subsistir. Y que ésa es
la manera en que resguarda su libertad de pensamiento.
Desde
ese inseguridad vital lanza sus principales dardos hacia la “inteligentsia” que
controla la cultura en la Argentina, a la que acusa de estar subordinada a
intereses non sanctos.
“Me
preocupa el poco compromiso de los intelectuales” por la causa contra las
pasteras, dijo precisamente el filósofo. “Son ellos los que tienen obligación
de crear opinión sobre este tema”, subrayó durante una charla mantenida en
nuestra redacción, el martes último.
Sanguinetti
recaló en Gualeguaychú, atraído por el conflicto que hoy tiene en vilo a la
comunidad local. De hecho, según contó, prepara material para enviar al
Discovery Channel, el famoso canal documentalista.
Ligado
a la causa ambientalista desde hace mucho tiempo -asegura ser uno de los
primeros miembros de la Fundación Vida Silvestre- el entrevistado dijo estar
conmovido por la reacción de Gualeguaychú. “Lo que está sucediendo aquí, esta
pueblada, no tiene precedentes”, confesó.
Tras
cartón, manifestó su disgusto por la indiferencia que frente a la causa de
Gualeguaychú exhiben artistas, hombres de la cultura y personajes de los
medios.
Aunque
dice no estar sorprendido toda vez que “la cultura argentina en este momento
está remitida a lo que se llama la farándula”. No es mucho lo que se puede
esperar, apuntó, de “Tinelli, Repetto, Susana Giménez, o Mirtha Legrand”,
muchos de ellos más cerca de Punta del Este -la famosa playa uruguaya- que del
país.
Según
Sanguinetti, lo que se juega en el conflicto por las papeleras no es nimio. “El
tema es muy profundo. Lo que está en discusión es el núcleo constitutivo de
nuestro planeta, el lugar donde uno quiere vivir. Si es un tema que hace al ser
del planeta es un tema ontológico”, dijo al explicar la dimensión metafísica
del problema.
A la
vez, apuntó, la cuestión está dejando una enseñanza política. El hecho de que
un gobierno socialista, como el de Tabaré Vázquez, defienda con uñas y dientes
los intereses capitalistas de las corporaciones trasnacionales de Ence y
Botnia, está demostrando que la ‘dialéctica izquierda-derecha’ es un
anacronismo.
Esta
posición contra las pasteras, Sanguinetti la expresó en Montevideo durante su
estadía en la capital uruguaya. Pero por lo visto algunos artículos suyos,
publicados por el diario La República, molestaron mucho. Lo concreto es que, en
septiembre del año pasado, el argentino fue literalmente expulsado del Uruguay.
“Dijeron
que era peligroso. El cónsul argentino me sugirió que lo mejor sería que salga
del Uruguay”, recordó el entrevistado. El escándalo ganó las primera páginas de
los diarios de Montevideo, pero desde esta orilla hubo silencio de radio.
“Ningún medio argentino lo tomó”, se quejó.
Dejemos,
por último, que nuestro entrevistado nos pinte cómo ve él, un intelectual, el
conflicto de las papeleras. “El tema de Fray Bentos es un enigma, un
metalenguaje que inhibe. En todo caso, podemos pensar que es una farsa detrás
de la cual hay algo o una instancia que
nos supera. Después de un tiempo quizás nos preguntemos, ¿qué hubo detrás del
tema de Fray Bentos?”, refirió. Al mismos tiempo se lamentó de que los
fraybentinos, obnubilados por promesas de progreso, no quieran ver que lo de
las pasteras es “pan para hoy y hambre para mañana”.
Y
añadió: “Además, es llamativo que lo primero que se hace en Fray Bentos es la
chimenea de la futura planta. La chimenea es un símbolo fálico; es como plantar
una bandera. No comienzan con las construcciones exteriores; primero ponen la
chimenea. No tomo esto como afrenta, sino como un símbolo que significa: aquí
estamos”.
SANGUINETTI HIZO CORTAR LOS PUENTES 24 HS., ESTABA PEREZ ESQUIVEL, LA NOTICIA LA LEÍ EN UN MEDIO DE ESPAÑA, EN ARGENTINA SILENCIO.
ResponderEliminarEL DOCUMENTAL ES FANTÁSTICO, EN ARGENTINA PROHIBIERON QUE LO PASEN EN LA TV Y POR CABLE.
MENOS MAL QUE EXISTE YOUTUBE.
FLOR DE INTELECTUAL TIENE ESE PAÍS DEL CONO SUR INVERTIDO.