RELIGIÓN A LA FUERZA

RELIGIÓN A LA FUERZA

ANGHEL MORALES

Respeto a que cada cual crea en lo que le de la gana siempre que respeta a los demás, me da igual que sea católico, budista, islamista o de la cienciología, pero reclamo mi derecho a no adueñarme de ningún Dios y a practicar mi ateísmo en buenas relaciones con mis semejantes. Creo que venimos al mundo de forma particular y somos cada uno diferentes y originales, pero que intentan en agruparnos en manadas para controlarnos mejor y el hombre ha ido creando dioses desde sus orígenes, partiendo del brujo de la tribu a un imperio con estado como el católico -mi reino no es de este mundo- a los islamistas que hacen de la política y la religión la misma causa -bueno, aquí y en este momento también-. Manadas, muchas manadas, por eso creo que hay que devolverle a cada uno su libertad, creo que hay que rescatar al individuo de en medio de la manada.

Semana Santa, porque se ejecutó a un individuo que se rebeló contra la leyes que le imponían y al que hoy en día le han robado su mensaje y los herederos de aquellos que lo ejecutaron, los que hacen leyes en contra de la justicia son los que se han apropiado de su mensaje y lo imponen a su manera contra los que decidimos mantenernos al margen o aquellos que ven claramente que sus enseñanzas han sido manipuladas e intrumentalizadas para manejar y controlar a las masas.

Soy ateo por convencimiento propio, no porque alguien me lo haya impuesto y se que en este mundo hay montones de personas que son como yo y otras que apuestan por dioses creados por el hombre y que por supuesto todos tienen derechos. Mas cuando se impone el criterio de una creencia contra la de los demás es cuando se vulneran los derechos del individuo.

Vivo en una colonia ocupada por señores que entre otras cosas presumen de un estado laico y aconfesional y es otra mas de sus burdas mentiras. Ni España es un estado laico y mucho menos es aconfesional, aquí se impone claramente la de un grupo sobre los demás y esto es perfectamente condenable, si presumen de que hay que cumplir la las leyes, la de respetar las diferentes creencias, también la de los ateos debe cumplirse. Ya en 1971 viví en el Sahara ocupado por España una represión contra los saharauis que trataron de manifestarse después de una Semana Santa para reivindicar sus creencias y fueron cruelmente reprimidos y apaleados, pero creo que esto no es el Sahara ni España se rige por una dictadura ¿o si?

Que el estado de forma vergonzosa apueste descaradamente por una religión me parece intolerable y condenable desde el derecho que todo ciudadano tiene a creer y practicar la religión que crea conveniente, los miembros del gobierno tienen también el derecho a creer en el Dios que les de la gana y acudir a actos en su memoria, pero que lo hagan en nombre del estado me parece intolerable y creo que es algo que se debe modificar, aunque esta secta religiosa sea quien controle a parte del estado, se vea beneficiado por el, no pague impuestos y goce de muchos privilegios. España hace tiempo que dejó de ser la reserva espiritual de occidente, la Semana Santa no deja de ser sino una mera atracción turística, folclore puro y duro, pero los representantes de un estado laico no pueden ser participes de estas celebraciones, no con la vitola de representantes del estado. Ellos también son representantes de los ateos y otras religiones, que lógicamente se sienten ofendidos. Tampoco entiendo que hace el ejercito armado desfilando en estas procesiones, Cristo no movió un dedo para defenderse, estaba en contra de la violencia, fueron los militares los que lo humillaron, los que se rieron de el mientras agonizaba en la cruz, los que se repartían su túnica, creo según mi apreciación personal que lo menos que querría ver Cristo a su alrededor eran militares. No lo digo solamente del ejercito español, para que no piensen que es algo personal, lo digo de cualquier país que intente poner al lado a militares y fe cristiana, creo que en algunos lugares como en La Laguna cerca de donde estoy ahora ha sido la iglesia la que ha pedido que los militares no desfilen en las procesiones, pero eso creo que lo abortó la beatería. Tampoco entiendo que un estado laico o aconfesional ponga la bandera a media asta por un señor que ejecutaron hace dos mil años, si cada religión pide lo mismo apaga y vamos.

Lo dicho, no se puede imponer una religión a la fuerza metiéndosela por las narices a creyentes o no creyentes a gente de otros credos, creo que los privilegios no deben existir porque hay mucha gente como yo que se puede ofender, aunque muchos callan por miedo a las represalias, parece mentira que en pleno siglo XXI se sigan imponiendo estas cosas, la fe es algo personal, imponer un credo va contra los principios mas elementales de la convivencia. En fin, se que mis palabras no servirán para nada, seguiremos ejecutando a los Jesús de turno y los soldados seguirán riéndose de su agonía. Tristemente lamentable.