UN INMORTAL
ÍDOLO MUNDIAL MEXICANO
Rafael ZAMORA
MÉNDEZ
En este 29
de junio, cuyo santoral señala a dos
populares nombres, me complazco en dedicar el siguiente Poema, a un muy especial PEDRO, al que tuve
la inesperada oportunidad de haberle podido conocer personalmente, viéndole,
frente a frente:
Si recordar es vivir,
no cabe la menor duda,
de que se vuelve a sentir,
ese tiempo tan feliz,
que en la mente nos perdura.
Evocamos mucha cosas,
unas buenas y otras malas,
que siendo algunas hermosas,
se asemejan a unas rosas,
en el jardín de
las almas.
Los instantes ya pasados,
otra vez no volverán,
pero quedan archivados,
totalmente almacenados,
y jamás se borrarán.
Exponiendo estas ideas,
despuntadas al azar,
les diré de una vivencia,
que me brindó la experiencia,
En Caracas un buen día,
desde una tienda famosa,
la policía salía,
con un joven que tenía
la nariz con sangre rota.
Entre el tumulto quedé,
para ver lo que pasaba
y bien pronto me enteré
de que un gran artista fue,
el autor de la trompada.
En persona, PEDRO INFANTE,
allí mismo se encontraba.
Le miré por un instante,
observado en su semblante
que de un lío se trataba.
Y fue que aquel mocetón,
se volvió un impertinente
que sin merecer perdón,
le arrancó de un sopetón,
su bisoñé de la frente.
Porque metiera la pata,
en la sien se le veía,
brillante injerto de plata
que el curioso destapara,
para ver lo que tenía.
Era individuo normal,
de agradable compañía.
¡Entre la gente uno más
que de forma natural,
su sonrisa repartía!
Se informaban lindos hechos
altamente comentados.
Le cantaba hasta a los presos,
entregando buenos pesos,
a muchos desamparados.
En Venezuela él actuaba,
siempre en directo o
a “capela”.
Una vez que terminaba,
a algún pobre se llevaba,
para ofrecerle una cena.
Uno de ellos,afirmaba:
“ME METIÓ POR UN HOTELAZO,
Y UN BANQUETAZO ME DABA,
MIENTRAS LA GENTE MIRABA,
AL CABALLERO CHAMACO!
Desde Caracas partía,
a México capital.
Su propio avión conducía,
en el que se estrellaría,
en aquella serranía,
de Mérida- Yucatán.
Fue en mil novecientos cincuenta y siete.
Tenía tan solo treinta y nueve años,
y como suele suceder, la Muerte,
en nubes de leyendas le convierte,
para elevarlo a eternales peldaños.
Porque metiera la pata,
en la sien se le veía,
brillante injerto de plata
que el curioso destapara,
para ver lo que tenía.
Era individuo normal,
de agradable compañía.
¡Entre la gente uno más
que de forma natural,
su sonrisa repartía!
Se informaban lindos hechos
altamente comentados.
Le cantaba hasta a los presos,
entregando buenos pesos,
a muchos desamparados.
En Venezuela él actuaba,
siempre en directo o
a “capela”.
Una vez que terminaba,
a algún pobre se llevaba,
para ofrecerle una cena.
Uno de ellos,afirmaba:
“ME METIÓ POR UN HOTELAZO,
Y UN BANQUETAZO ME DABA,
MIENTRAS LA GENTE MIRABA,
AL CABALLERO CHAMACO!
Desde Caracas partía,
a México capital.
Su propio avión conducía,
en el que se estrellaría,
en aquella serranía,
de Mérida- Yucatán.
Fue en mil novecientos cincuenta y siete.
Tenía tan solo treinta y nueve años,
y como suele suceder, la Muerte,
en nubes de leyendas le convierte,
para elevarlo a eternales peldaños.
En Berlín, “OSO DE PLATA”,
como el actor principal.
Con “TIZOC” en la pantalla,
a MARÍA FÉLIX daba,
su “AMOR INDIO” FATAL.
“ESCUELA DE MÚSICA”,”EL INOCENTE”,
“SOBRE LAS OLAS”, “LOS MARTÍN CORONA”,
“NOSOTROS, LOS POBRES”, “LOS TRES HUASTECOS”
“CON LA VIDA DEL OTRO”, “PEPE EL TORO”,
"LA TERCERA PALABRA", " ANGELITOS
NEGROS",
"ESCUELA DE LADRONES", " CARTAS
MARCADAS",
"EL SEMINARISTA"...
¡Títulos son de agradables recuerdos
proyectados por doquier,
que volveríamos a verlos,
para intentar retenerlos,
en los brazos del querer.
Fuera el ídolo carnal,
de arrullante melodía.
En su forma de cantar,
flotaba un Don especial,
de atrayente simpatía
Hoy, mi musa aquí, le nombra
y es digno de agradecer.
¡Bendita luz que en la sombra,
nos lleva entre alas de alondra,
por los cielos del ayer!
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