FRASES ROBADAS

 

FRASES ROBADAS

QUICOPURRIÑOS

Me perdonarán a los que me dirijo. A Uds que también escriben, pero que lo hacen para crear, con un fondo musical, una preciosa melodía. Para dar a luz una bella canción que es el fruto de la unión de la letra y de la música. A Vds, a esos que son capaces de convertir en pura magia esos acordes con letra para ser escuchados una y otra vez.

 Yo no. Mis escritos, no llevan canto, solo letra. Si Vds, quieren, les ponen música y, más adelante, compartimos el resultado, si quieren.

La magia del internet, de las redes, es que desde donde estés, te puedas meter en la casa de la persona que un día escribió un cuento, o una canción inolvidable, de esas que te llegaron hasta dentro, de las que permanecen  en tu memoria. Y tú, desde tu casa, “hablas con esa persona”, te comunicas, aunque directamente no te lea, porque alguien, le dirá, desde cualquier lugar perdido del mundo, viste lo que este escribió de ti. Y de repente te contesta con una frase amigable diciéndote que le escribas cuando quieras.

 

Frases robadas, que son las que llevas en tu memoria, desde siempre, las que te acompañan….., de las que hoy me apropio para dar vida y sentido a este cuento. Palabras profundas como estas:

“ Yo no te pido…”

¡Ya!. Lo adivinaste……….. “Que me bajes una estrella azul…”

O…eternamente…..”Yolanda”.

         Y qué decir de…” hoy puede ser un gran día plantéatelo así…, o que, por cierto, al techo no le vendría nada mal una buena mano de pintura”.

         Pero dilo antes de que, …” nos dieran las diez y las once, las doce la una y las dos y las tres, y desnudos al anochecer nos encontró la Luna”. Lo de besarse en cada farola, es otro cantar, Sabina.

 

Porque, saben, que…”resistiré…resistiré”…aunque, “no te quieras enterar que quince años tiene mi amor”. Y me da igual que seas, que seas una chica “ye,yé.”, o que Tenerife tenga seguro de Sol o de que el abuelo un día se alejó de España.

 

         O que no te acuerdes de que, volando voy, volando vengo, o de que a Mallorca voy con mi canción después de poner un puente….

         Me duele que no recuerdes que,…” la playa estaba desierta” y  de que además Eva María se fue buscando el Sol y la Playa y no se sabe qué más.  O de si te olvidaste del ..…” Cuéntame, como te ha ido, si has conocido la felicidad”.

         Había un caballo que corría por la sabana y que estaba triste y cansado y que no se daba ni cuenta….. y bamboleo y bamboleo…

         También, una que se sacó de una acordeón unos pajaritos por aquí y pajaritos por allá, “pam, pin, pam , pum...”

         Izquierda izquierda, derecha derecha, delante, detrás, un dos tres. Era una canción, no una referencia política.

         Pero no voy a pedirte hoy otra vez que me bajes una estrella azul, ni que me  “Contamines, ni que te quedes conmigo” y menos aún en “La Puerta de Alcalá”, diciendo aquello mírala, mírala, o de Carlos III llegó…  Ni recordar, lo de mi querida España, esa España mía, esa España nuestra, esa, la que también llevaba su ramito de violetas.

         Ya me voy despidiendo, pero antes te digo, devuélveme las llaves de la moto y, Lucy, que no para de llamarte, y siempre me sale tu Mamá en el aparato, cuando no hay razón para amar.

          Y es que ya sé que los años van pasando y nos vamos haciendo viejos. Así, que, no me llames extranjero porque haya nacido lejos. Porque ya sé que de vez en cuando la vida toma contigo café.  Y también que amores se van marchando como las olas del mar, que amores se vuelven viejos, mucho antes de empezar a amar.

         Y es que al fin y al cabo, la vida es una tómbola, “ tom, tom tómbola”,  pero llena de luz y de color.

         Y ya sé que…. lo nuestro se acabó y te arrepentirás….y recordarás nuestros días felices….

         Pero y al final, al fin y al cabo, ¿qué queda?: pues que la vida, que es bella , como aquella preciosa película.

         Del sapo de la noche, del sapo cancionero, de ese que vive soñando junto a su laguna, no diré nada, pues toda la vida me ha acompañado y entre él y yo hay un pacto de silencio cómplice que no voy a romper ahora. Tranquilo sapito que nuestro secreto está a salvo.

 

                                                      quicopurriños a 9 de enero de 2021