¿PERO FEIJÓO JUEGA A ALGO?
CARLOS
ELORDI
Núñez
Feijóo junto a Díaz Ayuso y Gamarra en
un
acto de partido en Madrid.
El proceso para la investidura se está convirtiendo en un esperpento. Feijóo confirma cada día que es incapaz de obtener nuevos apoyos y, sin embargo, dispone aún de casi un mes para seguir acaparando el protagonismo de esta ceremonia de la confusión que sólo puede conducir a su fracaso y a que sea Pedro Sánchez el encargado de intentarlo.
A la vista de este bloqueo perfectamente previsible dados los datos de partida, cabe hacer dos preguntas. Una, ¿por qué la presidenta del Congreso aceptó el larguísimo plazo que Feijóo le pidió para negociar su candidatura, cuando, en vista de las posibilidades, en menos de dos semanas se podía haber cumplido el trámite? Y dos: ¿por qué el jefe del Estado aceptó la candidatura del líder del PP si él, como todos, sabía que carecía de los apoyos suficientes para abordarla?