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jueves, 24 de octubre de 2024

DEBILIDADES Y ERRORES DEL MOVIMIENTO `CANARIAS TIENE UN LÍMITE´


DEBILIDADES Y ERRORES DEL MOVIMIENTO 

`CANARIAS TIENE UN LÍMITE´.

ELOY CUADRA

, escritor y activista social

 Reconociendo el mérito que tiene impulsar un movimiento de este tipo, por poner en el primer plano la insostenibilidad del modelo actual canario, no es menos cierto que después de casi un año de andadura y dos multimanifestaciones es conveniente parar un momento para hacer autocrítica, y ver lo que se pudiera estar haciendo mal o pasando por alto. Cierto también que esta autocrítica habitual que acostumbro a hacer de los movimientos en los que participo o con los que simpatizo es en parte la culpable de la leyenda negra que circula sobre mí y el ostracismo al  que me han condenado muchos movimientos y partidos alternativos, pero no por ello voy a dejar de decirlo si creo que puede ser útil y servirle a alguien. Hecha la introducción pertinente pasamos a repasar algunas debilidades y errores del movimiento.

 

1.- Parecen olvidar con quién se la están jugando. Nuestra clase política actual vive en el engaño y la manipulación permanentes, eso es lo que saben hacer y así se ganan la vida, y además son esclavos de los que mandan en realidad, los de la economía, esos a los que nadie vota. Partiendo de esta base el movimiento `Canarias tiene un límite´ comete un error al pensar que van a cambiar algo las cosas porque hayan salido 100.000 o 200.000 personas a la calle una vez, o porque tal o cual político o presidente diga que han escuchado al pueblo y tienen pensado aprobar tal o cual medida sostenible. El plan es otro y lo habrán visto si han leído las 51 medidas que acaba de presentar el gobierno, dicen ellos que para una Canarias mejor que la de ahora, con el turismo encumbrado a la figura de dios supremo, con más liberalización de suelo, menos trabas, menos controles, menos impuestos y todos los favores que hagan falta a los empresarios de la construcción. 

 

2.- Le han dado al gobierno lo que quería. Si en el movimiento hubieran tenido claro el punto anterior habrían sabido que no pueden cometer ni el más mínimo fallo, pues será usado inmediatamente por el sistema para atacar sin piedad al movimiento, y esto es lo que ha pasado con las manifestaciones del 20 de octubre. Le han dado los dos argumentos que el gobierno buscaba, el primero: el movimiento se desinfla, la concurrencia ciudadana ha sido muchísimo menor que la del 20 de abril; el segundo argumento ya lo imaginan: el movimiento va contra los intereses de Canarias por señalar y acosar a los turistas que ninguna culpa tienen. No importa que sea mentira, no importa que los manifestantes hablaran cordialmente con los turistas y no hubieran ningún tipo de acoso o violencia, ellos tienen la foto y tienen a la mayoría de medios de su parte, no hace falta más en tiempos de posverdad, y así llevan una semana con la misma cantinela. 

 

3.- No se puede ir contra un gigante pidiendo enmiendas a la totalidad. El gigante es el capitalismo salvaje y el experimento avanzado del mismo que han montado en Canarias. Aquí conviven todas las mafias imaginables y el dinero fluye en cantidades espectaculares, gracias a un modelo económico que lo permite y a una clase política corrupta que lo favorece. En otras palabras, el modelo actual está perfectamente agarrado a este archipiélago, de modo que no habrá cambio ni concesión alguna salvo las que ellos quieran y no les suponga apenas coste. Así las cosas, la única vía que a mi juicio podría dar un mínimo resultado es plantear guerras de guerrillas con temas concretos y poner toda la fuerza de la ciudadanía, cada vez en cada uno de esos temas concretos, como haría -siguiendo con el símil bélico- una fuerza insurgente contra un enemigo muy poderoso. 

 

4.- Las manifestaciones no pueden ser un fin en sí mismo. Comete el movimiento el mismo error que cometió el 15M, pedir enmiendas a la totalidad y no salir de una manifestación multitudinaria detrás de otra (solo 3  años después Podemos recogió parte de esa indignación). Y es que las manifestaciones quedan en nada o únicamente en folklore, un folklore social muy bonito pero folklore al fin y al cabo, si no arrojan resultados tangibles. Si estuviéramos en Francia les diría que sí, que las manifestaciones sí pueden cambiar las cosas, pero claro, en Francia se está dispuesto a ir hasta el final con todas las consecuencias, a mantener el pulso, a reventar las calles y a lo que haga falta, cosa que no parece muy factible en Canarias. No habrá nunca en Canarias resultados tangibles si el gobierno sabe de las debilidades del movimiento y no somos capaces de plantear otras luchas concretas, también multitudinarias, pero llevadas a las administraciones, por escrito, en modo de denuncias, a los juzgados, en modo de nuevas propuestas o en modo de desmontar las mentiras, las corruptelas y los engaños del sistema frente a todos los organismos y estamentos que existan. 

 

5.- Toda la lucha pasa por la vivienda. Comete a mi juicio otro error el movimiento al diluir la lucha por el derecho a la vivienda entre otras tantas reivindicaciones y no ponerla como base y primera de todas. Olvidan que la falta de vivienda es lo que mata y destruye a la gente, es lo que expulsa al canario de esta tierra, es donde está la especulación, los pelotazos y la corrupción más grandes, es lo que crea la superpoblación, el colapso, la falta de recursos, la depredación del territorio, la contaminación y todas las demás calamidades, a través, por ejemplo, del modelo del alquiler vacacional descontrolado que ha disparado las camas turísticas en un 40% y desde  ahí hasta los 18 insostenibles millones de turistas al año. La vivienda es además la lucha que se está librando prácticamente en toda España, parece por tanto algo ingenuo desaprovechar la inercia que ya hay en otras regiones, cuando además Canarias lo sufre más que nadie.

 

6.- No hay proyecto político detrás del movimiento. La Ley Electoral Canaria es la más antidemocrática de todas las democracias occidentales, sus señorías lo saben, saben que con pocos votos y una buena red clientelar tendrán asegurada la continuidad, también saben que no hay detrás del movimiento `Canarias tiene un límite´ un proyecto claro y solvente en el plano político. ¿Entienden ahora por qué están tan tranquilos en el gobierno y siguen con su agenda sin inmutarse lo más mínimo? Para que lo vean bien les pondré un ejemplo claro de lo que son manifestaciones ciudadanas que sí tienen un proyecto político claro detrás. El pasado 20 de octubre, a la par que se celebraban las manifestaciones en Canarias, en Madrid se congregaron multitud de personas y organizaciones conservadoras clamando contra el gobierno de Pedro Sánchez, ellos sí denuncian al gobierno en los juzgados a cada poco, ellos  sí tienen un proyecto político detrás al que votar luego y continuar con su odio al gobierno, son PP, son VOX, son Alvise. ¿Qué opciones políticas solventes y confiables tenemos en Canarias para dar continuidad al movimiento en el plano político cuando toque? ¿Ángel Víctor Torres, Noemí Santana, Alberto Rodríguez, en serio? 

 

7.- La política de hechos consumados exige más prisa. Seis meses ha tardado el movimiento en dar el siguiente paso concreto, nuevas manifestaciones a mi juicio fallidas, entre tanto el sistema y su máquina depredadora no han parado de funcionar ni un segundo.  Así, hoy tenemos unas 62.000 viviendas vacacionales en Canarias, casi el 18% del total de toda España, si se hubiera actuado antes no estaríamos en esa cifra, que ahora va a ser muy difícil de retornar a viviendas de alquiler residencial. Lo mismo ocurre con la adquisición de vivienda por parte de fondos buitre o ciudadanos extranjeros o europeos y peninsulares ricos, no paran de acaparar territorio, inmuebles  y derechos, ¿a  ver quién se los quita luego? Lo mismo, ocurre con las políticas turísticas de promoción continua de más y más turismo. Y por los aeropuertos seguirá entrando gente que se quedará a vivir y a competir con el canario casi siempre con ventaja, y los 2.300.000 insostenibles habitantes de hoy serán 2.500.000 dentro de poco, aún más insostenibles; y entre tanto cada vez habrá menos canarios residentes dispuestos a luchar por esta tierra más allá del ombligo de cada uno. ¿Quién creen que va a luchar por una Fuerteventura sostenible y justa cuando la mayoría de la población de la isla ya es de fuera y anda montada en el negocio del modelo turístico actual y todas las corruptelas relacionadas? Y es que los ricos, los corruptos y los especuladores, no suelen entender de amor a ninguna tierra ni a ningún pueblo, solo aman su dinero, y como tienen bastante pueden comprar su propio paraíso particular, con cámaras de vigilancia, grandes vallas electrificadas o playas privadas, y si la cosa se pone muy mal siempre les quedará irse con su dinero a otro territorio a explotarlo igualmente. 

 

Y bien, hasta aquí lo que puedo comentar sobre el movimiento `Canarias tiene un límite´, vamos, no hay tiempo que perder, o pronto no habrá nada ya por lo que luchar. 

 

Eloy Cuadra, escritor y activista social

 

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