PREVARICANDO

PREVARICANDO

JOSU AIZPURUA

Lo único seguro en este Estado78 es que prevaricando es gerundio.

Lo demás, la independencia judicial y la separación de Poderes; son leyendas urbanas de poca credibilidad. La Independencia Judicial está aún más lejana que la Independencia Vasca.

¿Quién cree que los togados son ecuánimes y sin partido? Nadie, pero unos disimulan y otros no.

El Movimiento Nacional, cedió sus togados al nuevo Sistema78, y lo mismo que en las demás cotas del Poder se equiparó Movimiento y Democracia y, sin más, los fascistas togados pasaron a ser demócratas conversos sin cambiar de fundamentos y objetivos. Tamaño despropósito se consolidó, se perfeccionó y se camufló para nunca jamás ser revisado.

La mayoría de los juzgadores tienen “presupuestos”, prejuicios sociales contra los juzgados, y en el orden político son infumables. Hemos visto en el TOP posturas, ademanes, frases ante los políticos juzgados que de por sí invalidarían toda la supuesta justicia que debe tenerse en un Tribunal. ¿Podrían someterse con toga en mano a la acción del detector de mentiras? Piénsenlo.

El Estado78 tiene los togados elegidos por “partidos”, pero no por todos, sólo por los PPSOE fundacionales, con sus taras fascistas de origen y su propósito de continuar el franquismo sin Franco, pero con su mismo modo de vida e Historias para mayor gloria de La Casta.

Los togados solo deben aplicar, pero….

Hay un foso negro en togalandia que lo hace inservible para la Justicia. Los togados elegidos por partidos afines, situados por tendencias sectarias, y ajenos al sentir social, no pueden elegirse entre ellos y menos por los partidos: no hay solución.

La Democracia es la solución a todo. También a ellos.

Deben someterse al criterio social y presentarse en listas profesionales, con su visión social y jurídica para que el Pueblo (¿Qué es eso?) los conozca y elija lejos de las cúpulas partidarias y La Casta. Solo así empezaría el renacimiento del Sistema78 hoy ya absolutamente colapsado. La cosmética PPSOE no hace más que embardunar su futuro.

Marchena, Llarena, García, son el fruto del togacidio78, no sus culpables y sí probablemente los más listos de la tropa. Su manejo “oficialista” del asunto Puigdemont ha llevado al Estado78 a ser visto con asombro por Europa y a convertirse en pie de barro para cualquier enfoque político. Su empecinamiento revela que sus objetivos no son jurídicos, pues se plantan antes de conocerlos, y en pura Democracia debieran estar silentes mientras la Cortes debaten, y a su fin ejercer sus funciones, nunca de opinión y sí de lealtad al espíritu legislador sin buscar mañas legales. Son como USA, autonombrados Gendarmes de un orden no consensuado.

Votos a un movimiento regenerador de la Justicia que salga de su seno y arrincone a La Casta, los PPSOE, y las togas de boatos y mamandurrias. En estos países del Estado78, hay multitud de causas y damnificados que están ansiosos de que se alumbre el futuro de justicia.