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martes, 6 de septiembre de 2022

LA ERA DE LAS CURDAS DE ORO

 

LA ERA DE LAS CURDAS DE ORO

POR MAITÉ CAMPILLO

En la venta del Molinillo, que está puesta en los fines de los famosos campos de Alcudia, como vamos de Castilla a la Andalucía, un día de los calurosos del verano se hallaron en ella acaso dos muchachos de hasta edad de catorce a quince años; el uno ni el otro no pasaban de diez y siete; ambos de buena gracia, pero muy descosidos, rotos y maltratados. Capa, no la tenían; los calzones eran de lienzo, y las medias, de carne. Bien es verdad que lo enmendaban los zapatos, porque los de uno eran alpargatas, tan traídos como llevados, y los del otro picados y sin suelas, de manera que más le servían de cormas que de zapatos (Miguel de Cervantes: Riconete y Cortadillo)

 

Aprovecha el momento al reviente ¡Solo se vive una vez!

 

Los mareados de Curda y Curdelón, en reflejo de la tesis hecha por el hoy portavoz de las intromisiones Josep Borrell <<Los políticos usan la estadística como los borrachos las farolas: no para que los iluminen, sino para apoyarse>>. No voy a ser quien critique el dicho del vivir el momento sobre el –¡que me quiten lo ‘bailao’!– ya tu vas a ver como la juma por sí sola levanta ampollas de duelo y trampa por una gran parte de ‘asalariados especialistas’ en política democrática. Los hay que la agarran a las trompadas, otros poseídos a ritmo de salsa, las y los astutos a las escondidas no tanto por pudor sino para desafiar al propio desafío esquivando el desahucio de su investidura, algunos adornan su colapso bolinga de vistosa puntilla y otros al volumen del cancán de las arcadas, los más frívolos en el sentido lúcido de la vida pasean la tajada como una reliquia por el propio gabinete de ministros, se trata de aprovechar el fogueo del momento, a tope y sin fuga, de la bufa del mareo achispado hasta la embriaguez exprimiendo el revoltijo del elixir, en variedad de contenido textura y color del melocotón. Los más asentados sobre el timón del templo de los ‘asalariadxs’ adornan el contenido de su evasión en curdas de excitación por el poder, del poder hacerlo, sin reprimir costo en calidad exclusiva sobrados de la inversión política del oro, plata y euro pues hay quienes se empeñan, empeñando sus días, en domesticar el inviolable arte de la interpretación a forma de liberación del –¡solo se vive una vez!– Los cámaras enfocan con profesionalidad el disfrute y renacimiento en categorías de engaño sobre los escaños en contagio, salvo que caiga una cámara aliada a un objetivo inconsciente sobre una soñolienta cabeza por balancín, ahí el sujeto ‘asalariado’ se ve en reposo con ronquidos incluidos durmiendo la moña. En oportunidad de igualdad, por los escaños del Congreso, han manifestado su desfile en pantalla por igual libertad inquietos y sorprendentes brinquitos gaseosos, cocidos sobre el asiento increpando exhaustos de todo, alterando la nariz en visión ‘ciudadana’ sin decir no más que tonterías que no venían a cuento. Los ha habido que de puro conservadores se han hecho populares, como Fraga Iribarne, modernizados en campaña de adoración a Baco como el expresidente Aznar, gustoso de ensalzar el dios del vino en pos del morapio hasta tatuar la piel en un todo por la patria. Dependiendo del sector del desafío, los medios castigan y califican de muy grave, o simplemente de un ‘doblao’ gracioso según el encuadre en tirada y color que forme el marco de las alianzas en defensa de su derecho (‘al pedo’) tan natural como lógico para ellos, es delinquir, por las altas alturas en corrupción de soborno y especulación. Y es que en los países donde abunda el poder del todo sin reprimirse del nada, no hay explicación, sencillamente por ser una tentación al alcance de la mano pues bobo sería no tropezar y hacer de la trampa ley, su garrota política, contra las víctimas que enturbien su paz sobre el estímulo de su saber vivir en cada momento y en cada circunstancia, del día y la noche, los trescientos y más días del año. Ahí es que anda revuelto atrayendo los medios a destajo como protagonista irresistible el hijo de la Gran Bretaña Boris Johnson, al que delatan y exhiben piripi ciego castaña tras castaña mamao hasta la coronilla unido en embriaguez, a otro de los desafíos internacionales, en cadena de los mareados de Curda y Curdelón que forman las fieras de la política asalariada, el ruso Borís Yeltsin, y de cómo cambia la cosa pese a ser uno inglés y otro ruso en relación a Hermann Tertsch ‘de perfil español muy español’ soldado de la patria voxiana, por convicción sin tregua alguna más aún cuando la altura del arte mayor de la curda, se eleva y sube, más silenciosa y sepulcral como en misa mayor.

 

Del Rey emérito pareciera en medios de largo alcance que todo lo que avecina no estorba. Los alumbrados en dinastía en distinción de igualdad son arropados, protegidos, y justificada, hasta quien les carda la mona. El tropezón hace dar el paso más largo, no más, ni ocupa tantas portadas ni telediarios la mona agarrada por ofensiva que sea pues ser es Juan Carlos I <<el inocente el campechano el que bebe la paz en sus manos>>, y hasta podría por rey, con y sin moto, caerse del asiento en marcha o atravesar vitrinas de escaparate hasta aparecer como príncipe de las tinieblas, junto al abuelo, de cuando salía de picos pardos trasnochando mañanitas; pues por vivir así, más vale no morir, que vivir muriendo llegando a emérito de feria en feria echo un cromo e incluso en esos mismos momentos y en suma de escándalos seguir defendiéndolo de toda inocencia, y todo mal, excluyéndole responsabilidad hasta prohibir todo comentario en su tiempo, de Rey, sobre su persona, se tenga o no razón en su delinquir hurtado hasta hacer de un miserable uno de los más grandes millonarios: ¿Tantos años viviendo de ello, y cómo se las arregla?… –¡Viajando a los Emiratos Árabes!–. Trompa, Curda y Curdelón se pasean según categoría asignada sobre la alfombra roja <<son los santos inocentes>> ajenos a la borrachina y borrachín de la calle. Al que esnifa el oro y bebe la curda en grandes fiestas y grandes salones les disfrazan de asesores, actores, empresarios, bancarios, políticos, doctores, abogados y jueces curderos como corderos mareados del oro ninfado embriagados diluidos en nada, hete aquí entre ellxs al pitiyanqui ruso Boris Yeltsin, pues no solo aparecía en ropa interior como en las recepciones dando tumbos, claro que su presidencia fue tras el derribo ya del muro de Berlín, o sea una forma de superar su farsa rumbo a la Casa Blanca, la que le reconociera como el pelele europeo más internacional de todos los payasos políticos hechos a medida, pero no mucho menos ni más borrachín que Isabel II, o Bill Clinton, pero sí más folclórico fogoso y bufón, entre pichones alemanes, del siniestro capitalismo guía de los escuadrones de la muerte servil del imperialismo. Los hay que sus borracheras han acosado y causado dentro y fuera de su país estragos, hasta regar hijos bastardos prostituyendo mujeres a temprana edad deshaciéndose de embrazadas defenestrando mujeres prematuras y demás víctimas de extraños accidentes de tráfico y paradas de corazón. Borracheras decrépitas, jumao de todo en corrupción imposible de negar ni borrar, han sido las del campechano jefe de estado por la gracia del Caudillo, no menos populistas aunque sí quizá más costosas, sosas e insípidas que las del cantante de opera Boris Yeltsin. El campechano no tiene arranques tan viriles ni ímpetu tan dinámico más bien a la chita callando, se le ha visto la cara como un cromo entre arañazos sobre el tejado de zinc a la espera. Su “primo”, otro apestoso sátrapa Rey de Marruecos, que pertenece al clan de los poderosos alcohólicos, NO-anónimos, pese a que prohíba tomar alcohol en el país natal. Y es que la ley divina de la moralidad por ellos asignada se la pasan por la entrepierna, entre botella y botellón a destajo de las orgías del oro entre tanga y balacera, rodeados de matones guardaespaldas con una torrija de espanto vuelta y vuelta fritos de todo. Ya ven que nada tienen que ver con la inteligencia de los que pretendiendo olvidar la miseria en ocasiones necesitaron del calor del barro, y la amistad, junto a una jarra de vino como en la obra de Valle-Inclán cuando estando en ‘Luces de Bohemia’ un borrachito en la Taberna Picalagartos, cada vez que Max Estrella, disertaba sobre los poetas y el gobierno, exclamaba: –¡Cráneo privilegiado!–.

 

Los medios de especulación de la era de las curdas de oro, andan aplicando su versión sobre la primera ministra finlandesa Sanna Marin Party, resaltando aparte de su derecho a vivir el momento ser mujer, joven y moderna; ser libre, como la mediática Ayuso, del hacer de su vida ‘política asalariada’ una parranda del saber vivir y organizar fiestas en su distinguida residencia oficial, de forma simpática y liberal cuantas orgías de alcohol y sexo, por derecho, la vengan en gana sin tener que ser criticada como una vecina cualquiera, ni por ángeles de la guarda ni ministros ni prensa, ni Dios, trino, por ser primera ministra mujer neo-fascista en derroche de rusofobia, que no sólo ha acelerado junto al presidente de Finlandia la entrada de su país en la OTAN, sino una de las y los primeros gobernantes de Europa en pronunciarse a favor de la prohibición del turismo a Rusia; y, todo, bajo la lluvia del << Soy humana y a veces hecho de menos la diversión y la luz en medio de estas nubes oscuras>> -¿Las que ella misma fomenta y persigue dando palos de ciega, no para que nos iluminen sino para apoyarse en ellas, como los borrachos en las farolas en Tesis del ministro Josep Borrell? Liberales, y socialdemócratas, durante todo el siglo veinte-veintiuno han abierto las puertas al fascismo l pasado martes el gobierno finlandés, anunció que la cantidad de visas otorgadas a los rusos, se reducirá en un 90 por ciento a partir del 1 de septiembre). El problema no es solo quién hace la ley, quien maneja los hilos de su técnica como especialista del horror es tan importante, como ser conscientes de quien la eterniza políticamente de entre nosotrxs, para no cantar el número equivocado de quienes son fiel servidor y mejor lacayo, que nos presentan apadrinado y ya líder en ley del tirano reforzando sus días, del ejercer agravio, al que respetar exigen reconocer y votar en tela de araña adiestrada del interpretar legal que dicen, nos representa como gobierno, a la asfixia de nuestros derechos pues de sobra es conocida la ramificación directa, con la mano diplomática de los genocidas, como directores de la orquesta. El problema se nos presenta a la hora de contar el planeta, no solo de millonarios, sino de millones que lo asumen por inercia como resultado de su poderosa ley electoral ajena a la política en sufragio universal, sino como espectáculo de su estiércol de mal olor de espaldas al escenario sus butacas, como fortín y escudo cerrando salidas a la cuarta pared, sin dignarse a recibir ni oír ni mirar por donde transita el elenco que representa nuestra obra que sí emana del pueblo, pero no todos así lo perciben, por lo que la ley de la gravedad no hace pie ni se reafirma frente al explotador como espectador de espaldas al creador sobre la escena, aferrados a sus centuriones demócratas de raíz suelta, y ya podrida, que dicen emanan del pueblo pero no para el pueblo ¡Pucha! ¡Que patraña, la electoral, cerrada a la critica y necesidades del cada día en ciclo de cuatro años a la deriva por los derroteros de las sorpresas, no hay cruce de caminos, carajo, donde encontrarse en desigualdad mayor de derechos!!!

 

Los dientes de oro de la era de la ceguera interpretan las elecciones como los grandes empresarios. Sienten la crítica de mal gusto y el sabor rancio en su boca cuanto menos un contrasentido, a su saber estar, vivir y hacer. El reflejo de su mueca dependiente de las bases extranjeras los delata en cobardía, acomodada del insertar la raíz en otro campo haciéndolos llegar al contrapunto, del más vale pájaro en mano, que ciento volando a la deriva derrotados por el acorde mayor en ley de los poderosos. Ellos y ellas líderes elegidos portavoces y pantomimas representantes pasean pies y alargan manos, todo por la ley electoral, brindan sobre un mortecino vaso sin objetivos propios, a la espera de coordenadas, donde la muerte achanta: ¡Nada como la política de la era de los que no tienen tiempo para pensar! Sino la caricia en lengua del diente de la ley, a la chita callando, filtrado en dependencias y entresijos vilipendiando ventilándose las uvas de la cosecha y el jugo de su vino y aguardiente de su piel introduciéndole sin permiso en sus programas y espectáculos, como la cara química de la gratitud que les otorga la grandeza del gusto por la vida. Mareada Curda y Curdelón cual si no pasara nada avanza jugando con nuestras vidas. Beben y Engullen sobornando a lo pendejo el aburrimiento, para borrar las nubes negras de la política asalariada (a la que se les obliga) ajustadxs como ventosa sobre el abanico de la nación, en perfil de vidorra por la patria a cuatro patas sobre los tejados de la ley marcial del fortín de los contratos laborales, al borde del precipicio del desempleo, convirtiendo al paria en patrimonio del capitalismo. Diente de oro y las eléctricas se amotinan ‘a lo progresista’ e invaden todo por la patria, hasta la intimidad más personal, adulterando en su gestión los pagos del recibo por culpa de la inflación, del gas de los garbanzos, en ráfaga del impulso endiablado en 24h en respuesta evangelizadora al intruso “ruso” como la solución al éxodo de los refugiados, en el país de los despidos, por miles, al que por falta de un salario marginan y desahucian hasta no reconocerse así mismos, llamados a callar ni rechistar, a reforzar, el ejército de la caridad.

 

La corrupción en las democracias no escandaliza como para llamar a una rebelión, roban por estar al alcance de la mano no más, bordando los desvíos para el lucro personal y engorde en carnaza de empresas, al alcance y por encima del planeta la potencia del saber vivir para mejor beber sobredosis de redoble y generosidad sobre las catástrofes naturales. Y todo por culpa de las nubes negras, y crisis monetarias al alcance del silencio de los corderos, que nos van dejando en palabras de Cervantes: descosidos, rotos y maltratados, como los ríos, frenando el oleaje de los mares para que compres a precio de oro, el agua inagotable, en manos de empresarios manantiales de ambición. Nos vendimian las uvas, ofreciéndonos posos químicos, pues su ideario es que cuaje la paz mundial atizando la guerra imperial. Ni militancia ni militantes la dignidad ha perdido su lealtad. Los medios guían las masas al frente único, reparten alienación y desarman el pilar básico a favor del imperialismo y su capitalismo; su cabeza, la gran cúpula banquera y sus pies de elefante los ejércitos, sus manos las divisas fortaleciendo monopolios y monarquías. Lo feudal no ha muerto; está lleno el poder de pajes, en servidumbre, al olor de los nuevos ricos del peldaño más bajo de la escalera tras los narcos, trata de blancas y crimen organizado. Es increíble como trabaja la avestruz doctorada, politóloga imperial en rápido despliegue del acné, en un intento de desbancar al contrario no como bien social al refuerzo de la ciencia y filosofía, sino para restablecer sobre el nazismo, su cuotas de poder sobre Europa.

 

Maité Campillo (actriz y directora d` Teatro Indoamericano Hatuey)

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