LUZ

LUZ

AIZPURUA tar JOSU Mª

Necesitamos luz clarificadora. El Estado78 y sus cómplices quieren embarrar el campo para crear un relato, falso y torticero, de buenos y malos, sistema deformativo con el que llevan 5 siglos cambiando la Historia y convirtiendo la Leyenda Negra en Leyenda Dorada. Son expertos en ello.

“Patria” y “Maixabel” son visiones, de parte, que preparan al ignorante en asumir la falsa dicotomía España buena, ETA mala. Con esa base es más fácil hacer el relato pro-Estado.

Un día en 1893, los hermanos Arana Goiri cayeron en la cuenta de su nacionalidad vasca, y crearon la ikurriña, el PNV, y Euzkadi como forma política de Euskal Herria. Desde 1930, muchos vascos siguen fieles a esa visión que Marchena llama ensoñación desde su gran ensoñación españolista.

Nada es como se dice y nunca salió de Euzkadi un grupo de “asesinos en serie” que formaron una “Organización”. La acción del Estado-España, provocaba en Tierra Vasca distintas reacciones desde la victoria fascista de Franco y hubo quien se resignó, quien mantuvo su rechazo en intimidad y quien se rebeló clandestinamente. Este segmento rebelde vasco estuvo sostenido por el Gobierno de Euzkadi en exilio, donde Isasi (PNV), Iglesias (PSOE-PSE) Nardiz (ANV) y Ausin (IRE) presididos por Leizaola (PNV) que mantuvieron la esperanza de los vascos antifascistas. El PC fue expulsado del Gobierno siguiendo las consignas de EE. UU. en la guerra fría.

“Euskaldun fededun”, consigna cristiana, “Jaungoikoa eta Legi-zarra”, lema sabiniano, encuadran al vasquismo histórico en algo similar a la democracia cristiana y el párroco era una autoridad consentida que recordaba al Padre Sagarna que como muchos otros sacerdotes vascos fue ejecutado por los fascistas.

Pero este idílico panorama se rompe en “EG-juventudes vascas” del PNV que Ajuriagerra no puede reconducir y se rompe en dos sectores, uno inmovilista tradicional y el otro renovador de la lucha, teórico, en el que Madariaga pone las bases de lo que será ETA.

La lucha armada, como respuesta a la situación del genocidio de “lo vasco” que las autoridades ilegales golpistas mantenían, impidiendo el idioma, españolizando los nombres y organismos, y deformando la Historia vasca para mancillar la existencia del Gobierno Vasco en Exilio, es el caldo de cultivo para que unos jóvenes más exaltados se lancen a una aventura insólita; la Independencia y el socialismo. Son ETA. Sus escisiones (5ª/6ª) (M/PM) y otras menores, van cambiando su esencia y los nuevos militantes del fin de siglo deciden su orientación más marxista que en sus inicios.

En el lado pro-Gobierno Vasco, al ver que la consigna ETA encuentra apoyo popular crea organismos de masas y comandos de acción (incruentos) para neutralizar sus acciones. Para centrar el momento, el Comité Ejecutivo de ETA debió reunirse para autorizar una paliza al maestro represor hermano del policía Escobar. Había cierto respeto a la violencia.

Nos torturaban, nos mataban (Txiki y Otaegi); y respondimos de la misma manera. Es cuestionable, pero humano, y este es el hecho a debatir; la justificación de la violencia como respuesta a la dictadura. Hoy en Venezuela se ha intentado algo parecido con ayuda de los fachas hispanos.

Pero la Transición cambió las reglas del juego.

El Gobierno Vasco regresó del exilio y cedió su legitimidad republicana a un organismo preautonómico que anunciaba una autonomía vascongada, de tres provincias, con Nabarra segregada con el mito Foral y dirigida por lo más reaccionario del panorama para españolizarla y acabar con sus rasgos vascos. En mi quinta de la mili (1967), los únicos que no sabían castellano: eran navarros. San Francisco Javier hablaba euskera y nació en la casa familiar en Iparralde, la Benabarre del “zazpiak bat” (7 en 1) que tantas veces pinté por las tapias de mi tierra.

Y aquí se produce el gran error de ETA (m): nació contra la dictadura fascista y no aceptó un inevitable cambio de método ante una democracia europeísta. Siguió matando sin aceptar la realidad del momento político. Las diversas “negociaciones trampa” constituyeron su mayor aliciente para seguir luchando.

Y es este el origen del momento actual en el que el Estado78 quiere apuntarse un tanto, embarrando el campo y sosteniendo el mantra de “todo es ETA”, para no enfrentarse a su responsabilidad en la represión vasca con siglas diversas que en los GAL se cubren de oprobio.

Aznar dijo; “la Tribu no vencerá al Estado” y es la definición más lúcida de lo que siempre hubo en juego entre Euzkadi y España, en la que ETA es un simple enfoque político guerrillero.

Una auténtica guerra se vivió en Tierra Vasca, psicológica y mortal, que fue debilitando a ETA(m) que ya no podía mantener el apoyo popular que tuvo frente al franquismo, y retar la colaboración internacional que se posicionó a favor del Estado78.

Este es el panorama que fue real, y que impide perdones unilaterales, pues nadie quedó limpio de aquella desgraciada época, y hoy nada aportan.

Hay una maniobra continuista para criminalizar un bando y salvar responsabilidades del otro, pero ello es falso. Los muertos, que los hubo en ambos bandos, desgraciadamente ya no tienen remedio, pero pueden servir para que los olvidemos y nos centremos en los vivos que tienen la misión de convivir, respetando su historia, sus posiciones, y su idea de futuro. Con respeto y sin imposiciones. La urna decidirá.

Aznar, Casado y Ayuso, que no saben nada de esto como ilustres castellano-españolistas que son, aterrados ante VOX intentan maniobras estériles pero que dan “imagen” para contrarrestar a VOX. Cometen un nuevo error para “lo vasco”, que pagarán ante la Historia que se sabrá en su momento y en la que quedarán; del lado malo. Necesitan blanquear su pasado, ante lo que pretenden hacer.

En el actual entierro, Otegi no tiene vela, déjenlo estar. Hoy mantiene las antiguas tesis de Euzkadiko Ezkerra y ETA (pm). Pero ETA (m) y la Izquierda abertzale; fue otra cosa. Y EH Bildu nada tiene que ver con ETA (m) ni Herri Batasuna, y entre sus miembros hay enemigos declarados entonces de esa izquierda abertzale, como el exlendakari Garaikoetxea que la llama izquierda abertzale histórica. La izquierda abertzale (patriótica) nace en 1930 con la fundación de ANV-EAE. A mí que fui del primer Parlamento Vasco por ANV-HB, no creo me nieguen la condición de izquierda abertzale; y no soy de EH Bildu.

No falseen que algunos seguimos vivos. Para reescribir la Historia, les quedan muchos testigos que la recuerdan. Nosotros sabemos mucho, pero, no pensamos decirlo.

Por los montes vasconabarros, y por Galizia, Cataluña y Canarias, viven las Tribus del Estado; déjenlas tranquilas y ofrezcan un cobijo adecuado, no sigan hostigándolas. A ETA(m) déjenla en paz, que ya no existe, es Historia que ustedes no saben manejar. Lo que no conocen, los 300 sin resolver, es labor policial, no delatora. Pongan más celo, no sea que les pase como con Míster X de los GAL que aún no sabemos quién fue. Trabajen e investiguen o pregunten a Villarejo.

La Tribu vive en este siglo XXI, y por qué fueron, somos, y si somos; serán.