ARTISTAS: ESPAÑA NOS ENCARCELA EN CHILE NOS ASESINAN

 

ARTISTAS: ESPAÑA NOS ENCARCELA 

EN CHILE NOS ASESINAN

POR MAITÉ CAMPILLO

Me pregunto de repente y asombrado, por qué

diré Viva Chile Mierda y no Mi her… mosa Patria?

quizás en mi ignorancia repito el eco de otro eco:

¡Viva! dice el roto con la pepa de oro entre los dedos

¡Chile! dice el viento al verde cielo de los ebrios valles

¡Mierda! responde el sapo a la vieja bruja de Talagante

¿Qué problema tan profundo se esconde en las líneas de mi mano?

Viva Chile M…!

 

Un joven camina a ganarse la vida entre una multitud de gente por la avenida principal, llega al lugar donde desarrolla la actividad, tiene el pelo largo ondulado a rastas como nido de aves, su cabellera revolotea soñadora moviendo sus cabellos sobre olas marinas distantes, en sintonía con la suave brisa las hojas de los árboles del parque le saludan mirándole a los ojos, le conocen, es un encuentro que se prolonga desde hace años, el muchacho distraído en lo suyo sigue con la mirada como mirando al infinito, sus fieles botas de cuero conocedoras del terreno le transportan al punto exacto donde los aplausos brincan entre la multitud conocedora del arte que le identifica; es viernes día cinco de enero del 2021, nos encontramos en Chile, lugar donde el carabinero cometió el crimen. Dos días más tarde, sólo dos días mas tarde, una pareja cruza las mismas calles del país, se detienen ante un semáforo en rojo, cruzan la calzada, siguen caminando ante vidrieras de escaparate sobre la acera, dos, tres, cuatro pasos más otras personas corren haciendo deporte y otras como ellos caminan relajadas distantes hablando de sus cosas, un reloj da la hora, la mañana avanza entre los que van y vienen de uno y otro lado disfrutando del día libre, la pareja se siente observada por los carabineros ella sopla un suspiro entre dientes, los carabineros les fulminan con la mirada, caminan solos, sin mascarilla. Un grito como un bocinazo les deja clavados en tierra, les interrogan, les detienen, les llevan a comisaría; las nubes surcan de derecha a izquierda algo así como un cielo raso, los grises van cambiando de tonalidad como intuyendo un desenlace fatal, unos perros callejeros ladran a los carabineros hay gente en la plaza que observa, un monumento se desploma, los latidos de impotencia aceleran el corazón de la pareja, gente pidiendo por las calles caminando sin rumbo fijo, el coche que les secuestra va camino de comisaria, uno de los perros callejeros levanta la pata y mea, la patrulla se aleja con una misión en la mente, la sed de sangre les alienta, una chica tropieza con una baldosa suelta y cae al piso, se levanta, camina dolorida, la pareja secuestrada atónita no da crédito a lo que ocurre la asfixia empieza apoderarse de sus mentes, los minutos pasan, dos, cuatro, seis, siete, el tiempo es inquebrantable. Los muros de la comisaría son un fortín, desde la calle no se oye nada, sólo los gatos maúllan hambrientos, el tiempo pasa; una chica se ve salir de comisaría, es ella, sola, sin su compañero, al que jamás volverá a ver no porque se halla suicidado sino porque le han asesinado. La joven que tropezó con la baldosa camina apurada hacia una cita de trabajo; semana tras semana lleva meses presentándose a diferentes empresas, la cita es en el séptimo piso de un gran edificio, llama, la puerta cede pero no ve a nadie, observa mientras espera el gran ventanal abierto al fondo de puertas corredizas con vistas a la gran ciudad abierto, camina hacia el interior de la sala intentando ver donde dirigirse, a sus espaldas la puerta número 701 inesperadamente se cierra cuando oye un -buenos días- desde ese punto todo se precipita (…) y el tiempo se detiene, ya no es nada, nadie, ni siquiera un nombre. Diez pasos de moqueta hacia el gran ventanal; la ciudad en ebullición toda llena de ruido, de coches, toda llena de vértigo, de griterío toda llena. Esta es la lidia humana: la tremenda batalla de los cascos y los lirios (dejó escrito José Martí). Pues los hombres soberbios ¿no son fieras? Bestias y fieras.

 

Secuestradas, torturadas, violadas, asesinadas; más de 400 víctimas en los dos últimos años, salud visual de Chile queda colapsada por la cantidad de personas que van a quedar ciegas de un ojo a manos del orden, agentes del Estado, avalados por

 

l`autoridad responsable de que más de cien personas hayan perdido su visión y decenas hayan quedado mutiladas, niños baleados, jóvenes asesinados. Vayan por delante algunos ejemplos como Camilo Marcelo Catrillanca, Daniela Carrasco, Pancho Martínez, Camilo Miyaki: El primer Camilo fue ASESINADO por la espalda de un tiro en la cabeza; proyectil disparado por Carlos Alarcón Molina sargento de Carabineros de Chile, durante una operación de represión policial contra la comunidad de Temucuicui. Daniela, más conocida por ‘La Mimo’ fue encontrada ahorcada, colgada de una reja en un paraje cercano al Parque André Jarlan en el sector sur de Santiago de Chile, el Sindicato Nacional Interempresa de Actores y Actrices de Chile ‘exije justicia’, el colectivo feminista NiUnaMenos-Chile denunció que fue ‘ultrajada, torturada y asesinada’ en pleno estallido de la crisis que sigue asolando Chile; la última vez que fue vista era arrestada por carabineros horas más tardes apareció colgada de una reja en una plaza. Pancho hacía malabarismo en la misma zona desde hacía 5 años, ASESINADO a quemarropa acribillado a balazos por un carabinero que huyó corriendo del lugar de los hechos acabando con su vida el 5 de febrero del 2021; la ola de malestar y protestas abordó las calles dejando paralizado casi todos los servicios públicos de la comuna. Días después, Camilo, otro joven chileno es ASESINADO, arrestado por no llevar lo que más que ‘mascarilla’, en Chile se convierte en mordaza y acaba con su vida sin testigos dentro de la comisaria N°51 de Pedro Aguirre Cerda, conocida por interminables abusos y violaciones de derechos humanos, los Carabineros dijeron que se había suicidado, ocurrió en la mañana del domingo cuando Miyaki y su compañera fueron detenidos por la fuerza policial; la compañera fue dejada en libertad cuando el compañero había sido trasladado del calabozo en que se encontraba, lo que dejó sospechas, sobre la nueva celda según la ONG, hay un punto ciego, que no permite apreciar qué sucedió realmente con el joven. En Chile, como en E. español, tampoco se han depurado las leyes del crimen, siguen impunes los asesinos.

 

Desde el Chile acotado por escuadrones de la muerte los vientos disparan la respuesta ¡¡NO a la constitución favorable a Pinochet!! Pero la dinastía de los bemoles muestra la farsa del engaño y la traición a la opinión popular, el dictador criminal, sigue presente entre la tropa. Hitos de alerta entre “saltos” se movilizan cuerpo a cuerpo estratégicamente distribuidos por la ciudad; se trata de acorralar a l` autoridad del orden del exterminio oficial, que sientan la encerrona colectiva, hacerles penetrar el pánico que ellos transmiten y siembran entre crímenes gratuitos. Pareciera un simulacro de emergencia contra la ley marcial o la segunda ley de Newton, fórmula que ofrecemos gratuita a los esbirros para que calculen la fuerza de los nadie, cuando de combatir combatiendo se trata, fórmula que resalta la cola interminable sobre la alienación laboral y brindarse a sí mismo su ‘domingo rojo’ por derecho labrado bajo luz de conciencia y sentimiento. Aún no se ha tragado la globalización nuestro derecho a pensar, y luchar, pero siguen apuntando a los que luchan. Los grupos de combate formados a lo largo y ancho de todo Chile avanzan las protestas contra el crimen, y la explotación, uniendo hitos de punta a punta del planeta como un ejercito de liberación; sobre el asfalto van abonando semillas para poder conversar con los sabios ampliando filas al campo de lucha, vamos llegando. Muchas veces me he pregunto cuáles fueron los momentos cruciales que marcaron mi vida dentro del teatro uruguayo y chileno, puedo responder sin lugar a duda que la militancia, sobre el compromiso total capaz de hacer crecer a una misma arrastrando a su vez lo más rezagado, conducta fortaleciendo trazos de conciencia y reflexión cobrando sentido y razón, una artista como una militante es una constante de amor y resistencia, disciplina jerarquizando compromisos trasmitiendo emociones, sugiriendo y creando espacios de comunicación asumiendo vibración e impulso sobre los momentos decisivos, partiendo del mundo real de opresión, nutriendo dignidad y respuesta.

 

El chileno Manuel Rodríguez recorría de una punta a otra el país asentando golpes a las tropas coloniales, al que muchos poetas chilenos le han cantado en sus versos, especialmente Pablo Neruda. Guerrillero chileno que combatió por la independencia, verdadero héroe popular hijo de padres de este otro lado del mundo y rival de O`Higgins en el caudillaje de la independencia chilena. La leyenda popular le atribuye mil hazañas entre ellas el uso frecuente del disfraz; arte, astucia y actos de conciencia para burlar a los colonos del imperio español. Muere asesinado por una delación, tal es el poder que otorga don dinero al siervo, una de tantas a través de nuestra historia:

 

Señora, dicen que dónde,

mi madre dicen, dijeron,

el agua y el viento dicen

que vieron al guerrillero.

 

Puede ser un obispo,

puede y no puede,

puede ser sólo el viento

sobre la nieve:

sobre la nieve, sí,

madre, no mires,

que viene galopando

Manuel Rodríguez.

Ya viene el guerrillero

por el estero.

Albertina Martínez, fotógrafa chilena, fue encontrada asesinada en su casa de Santiago; sus familiares llamaron a un cerrajero para abrir la puerta no respondía a su llamado, la encontraron tirada sobre el piso, violada, asesinada a golpes, su delito, enfrentar la salvaje represión en las calles con su cámara fotografiando mutilaciones y masacres que contra el pueblo están ejerciendo a orden del presidente criminal Piñeda. No quieren a nadie que denuncie la escabechina que están llevando acabo, Albertina era peligrosa para la salvaje selva represiva y carnívora que ha tomado las calles de la ciudad desde el poder de los corruptos, milicos del asesino presidente. Los familiares constataron que desapareció todo el material fotográfico y de vídeo, cámaras de fotos y ordenadores de su vivienda; la policía política es muy previsora además de asesinar “higieniza” la trama haciendo desaparecer las pruebas delatoras que les implica, secuestrando incluso las cintas de vídeo-vigilancia` del edificio tomado por las fieras. Los mercenarios carabineros son los encargados de la investigación, ellos, los criminales, ejerciendo la investigación ellos, cuerpo sádico represivo que junto a los milicos han dejado decenas de riadas de muertos y cientos de personas mutiladas ellos, los asesinos más asesinos del mundo, ellos han perpetrado decenas de violaciones y torturas, los miserables, los que por salarios y privilegios desmedidos se consideran superiores a la clase obrera chilena con derecho a desaparecerla ellos, sí, contra ellos, otra estampa y grito de guerra enarboló Fernando Alegría… y que vigencia tiene por igual a quién lo escribe quien lo recita (dijo el chileno Alberto Villa) escuchar a Roberto Parada Ritchie que murió en el exilio y su hijo degollado por los “valientes soldados”. Doroteo Arango Aramburo amplia el perfil del mentado que el grito impulsa y recita en su oratoria, como patriota innegable, actor de prestigio y talento quien interpretó el rol de Pablo Neruda en la película Ardiente Paciencia, y cuyo hijo, José Manuel Parada, fue degollado por la junta militar que asolo nuestra patria desde 1973 bajo las ordenes de una potencia extranjera, que dolor tan grande llevamos en nuestra memoria colectiva. A lo que responde Francisco Mancilla …no hay un VIVA SIN SU MIERDA ¡COMPAÑERO!!!

Cuando en noche de luna crece una población callampa

cuando se cae una escuela y se apaga una fábrica

cuando fallece un puerto en el norte y con arena lo tapan

cuando Santiago se apesta y se oxidan sus blancas plazas

cuando se jubila el vino y las viudas empeñan sus casas:

digo cabeza bajo ¡VIVA CHILE MIERDA!

¿Es mi país una ilusión que me sigue como la sombra al perro?

¿No hay Viva entre nosotros sin su Mierda, compañeros?

la una para el esclavo, la otra para el encomendero

la una para el que explota salitre, cobre, carbón, ganado

la otra para el que vive su muerte subterránea de minero…

País – Pájaro, raíz vegetal, rincón donde el mundo se cierra,

quien lo grite no tendrá paz, caerá para seguir adelante.

Y porque de isla en isla, del mar a la cordillera,

de una soledad a otra, como de una estrella a otra estrella,

nos irá aullando en los oídos la sentencia de la tierra:

digo, finalmente, ¡VIVA CHILE MIERDA!

 

Maité Campillo (actriz y directora d` Teatro Indoamericano Hatuey)