MEDIANEROS

MEDIANEROS

AIZPURUA tar JOSU Mª

Medianeros canarios, intermediarios, colaboracionistas, traidores a vuestra patria, a vuestra saga, palanganeros del catecismo colonial que pesa sobre la vida de los canarios en su propio territorio: la sagrada casa de sus padres.

Vendéis el humo españolista, que aparenta al criollo como “español”, con sus mismas obligaciones, pero sin ninguna de sus ventajas: ¿Sería posible Arguineguin en la Puerta del Sol?

Ya no engañáis a nadie, pero nos encontramos inermes ante vuestras patrañas, lejanos, amordazados, reprimidos por la insularidad fácilmente controlable con poca fuerza del orden desordenado, injusto y ajeno. Cruel destino del colonizado que vemos en la provincia española 53 como se destruye a un Pueblo por el acuerdo del Campechano y el padre del Sultán y que siempre sospecharemos que allí también hablaron de nuestro destino canario.

No es posible el diálogo pues sois de los que mueren con las botas puestas, las botas de la mentira, de la ignorancia, de la mediocridad personal sobre el valor del vecino, de vuestro cainismo sobre el crudo vivir que propiciáis. Mantener la estatua fascista del Caudillo en vuestra Rambla os define como estúpidos e ignorantes de la Historia y causantes del subdesarrollo intelectual de los isleños. Ordeñáis la vaca, pero la leche se va a Madrid, y robando unos cacitos os dais por contentos mirando con “grandeza” al vecino que carece de ellos. Sois patéticos.

Pero no podemos quedarnos en nuestro gofio, nuestra folía y nuestro Carnaval. Sin los medianeros debemos ir encontrando salidas que nos pongan en la Europa s. XXI que es lo que dicen debemos tener. Y debemos mirar atrás, a Marruecos, para que desde nuestra condición dudosa de euroafricanos o afroeuropeos ¡vaya usted a saber!, ubicarnos, comprobar lo cerca que estamos de sus tierras y pensar que ellos son nuestro más cercano mercado y que allí se juega mucho del futuro canario.

El Estado Colonial, la Metrópoli, enfoca Marruecos desde sus políticas madrileñas, y no desde nuestra óptica vecinal, que debe mercadear con su vecino, que no es Alemania, si no Marruecos. Vivir como desconocidos es un error comercial, geoestratégico, colonial y sobre todo Humano. Encontrar sinergias es una labor pendiente. Francia es el vecino de vascos y catalanes, pero el nuestro: es Marruecos.

Me decía un alto mando militar europeo, que un Estado Libre Canario es inviable ante la posición geoestratégica del archipiélago y sus riquezas marinas minerales. ¿Y entonces? ¿A comer gofio y bailar en romerías?

Nada más absurdo que fomentar un regionalismo españolista, y olvidar un nacionalismo canario, pero del s. XXI, amarrado a la Historia, pero fijo en el futuro. La lucha por el relato y la reestructuración del presente para entrar con buen pie en el futuro es la labor necesaria del que tenga corazón canario. Todos; los godos residentes, los descendientes del invasor castellano y los del guanche, tenemos el mismo reto ante el futuro, y a todos nos lloverá por igual. A todos corresponde el encontrar consensos y posibilidades. No estamos solos pues un Rey y un Sultán nos vigilan y el Amo Gringo decide nuestra suerte, pero a nosotros corresponde ponernos en nuestro sitio y reclamar lo justo plantando cara.

Vamos a ello; Canarios. Poco a poco, suave, pero firme.