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domingo, 25 de agosto de 2024

XAVIER GARCÍA ALBIOL, UN POSIBLE DELINCUENTE

 

XAVIER GARCÍA ALBIOL, UN POSIBLE DELINCUENTE

¿Sabe usted que el 85% de los ministros del último Gobierno de Aznar participaron del cobro de comisiones ilegales, fueron imputados o condenados por robar?

GERARDO TECÉ

Cartel electoral de García Albiol en 2015. / X

De un primer vistazo podría no parecerlo, pero Xavier García Albiol es un lince. Como en Minority Report, el tipo es capaz de anticipar delitos antes de que sucedan. Son décadas de experiencia en un sector en el que empezó desde abajo, pegando carteles contra los rumanos. Hoy Albiol es todo un referente. Esta semana ha vuelto a demostrarlo, destapando una trama formada por un grupo de chavales marroquíes que hacían el trayecto Ibiza-Barcelona en el mismo barco en el que viajaba el famoso alcalde del PP. Eran jóvenes, iban riéndose y –AVISO: dejen de leer a partir de aquí las personas más sensibles– portaban teléfonos móviles y gafas de sol, según la denuncia publicada en Twitter por García Albiol. Tremendo. Lo que ocurrirá cuando estos marroquíes lleguen a tierra ya lo sabemos todos, concluía su informe policial este sabueso que bien podría haberle robado a Rex el papel de entrañable perro en la serie. Prefirió ser alcalde. Con sus sabores, sinsabores e imputaciones por prevaricación, aún mantiene intacta la ilusión con la que entró en política: que los vecinos lo acaben llamando El Sheriff.

Hay quien dice que esta capacidad de Albiol para predecir delitos mediante la simple observación facial sería racismo. Una acusación muy osada ante la que el alcalde de Badalona se rebela. Se nota que quienes dicen esto no han pisado la calle, se defiende, y la portavoz del PP, Cuca Gamarra, secunda a unos de sus miembros históricos: “Se viven situaciones que todos vemos, pensamos y algunos escriben”. Es decir, cuando Gamarra ve a chavales marroquíes riéndose, pertrechados con móviles y gafas de sol, también piensa que son delincuentes, pero no lo pone por escrito. Ser portavoz de un partido de sensibilidades tan amplias como amplio es el propio cinismo consiste justo en esto. En justificar comentarios que firmaría Alvise en un reservado de la discoteca Pachá al tiempo que vendes la marca moderación. Hablando de moderados, Feijóo no se ha pronunciado sobre la denuncia de Albiol. Si le preguntasen es probable que dijese que ha viajado en barco alguna vez y jamás vio indicios de criminalidad.

Sea como sea, el prisma que propone el Partido Popular, “se viven situaciones que todos vemos”, es interesante y marca lo que debe ser el centro derecha en un momento como el actual. Mostrar tu racismo, pero tampoco pretender liderar el sector. Evitar condenar los bulos contra minorías o las llamadas a la violencia en las calles, pero tampoco aplaudirlos. Se trata de dejar que los prejuicios que enferman a la sociedad se regulen solos en función de la demanda. De colocar en la estantería una marca blanca. Si quiere usted comprar el Vox-Premium o el Alvise-Turbo, ahí los tiene, pero hay que pagar la marca. Deberá usted mostrarse como un psicópata con familiares y amigos 24/7. Si usted, sin embargo, prefiere un racismo cómodo a un precio la mar de razonable, no lo dude y compre el “lo que todos vemos”, “lo que todos sabemos”, “lo que usted ya sabe que está pasando” con esa gente de piel oscura.

Una posición cómoda que tiene sus riesgos. Si las marcas premiumse imponen en la estantería, la marca blanca será acusada de colaboracionista. ¿Por qué Albiol no llamó a la policía cuando vio a una banda marroquí actuando en un barco a base de risotadas? Si, por el contrario, cosas de las modas, la sociedad se llegase a cansar de la ración diaria de xenofobia, se buscará otras aficiones. Dios no lo quiera, al consumidor le podría dar por sustituir prejuicios por datos y el PP tendrá un grave problema. ¿Sabe usted que el 85% de los ministros del último Gobierno de Aznar participaron del cobro de comisiones ilegales, fueron imputados o condenados por robar? ¿Conoce el dato de que la tasa de delincuencia entre quienes pertenecen al PP es infinitamente mayor a la media de la población española, no importa si son migrantes o nacidos aquí? Su cultura es robar, se niegan a adaptarse, dirían los marroquíes al cruzarse con Albiol en el barco. Con los móviles guardados a buen recaudo, no vaya a ser que, en un descuido, al alcalde de Badalona le dé por delinquir, avisarían al resto de la tripulación: cuidado con las pertenencias, que ahí va uno del PP.

 

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