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jueves, 18 de abril de 2024

RECORDANDO A GABO

RECORDANDO A GABO

ADALBERTO SANTANA

En estos días se conmemora el décimo aniversario del fallecimiento del más trascendental novelista latinoamericano: Gabriel García Márquez (Aracataca, Colombia  6 de marzo de 1927 – Ciudad de México, 17 de abril de 2014). En su obra escrita destacan una serie de trabajos en distintas vertientes de la literatura. La novela, el cuento y guión cinematográfico, pero también escribió distintos discursos, reportajes, testimonios y memorias. Es decir, sus letras abarcaron diversos campos en los que se desarrolló un gran escritor y un periodista. En todas sus obras escritas nos heredó diversas de visiones del mundo que únicamente podrían haber salido de un hombre comprometido con su tiempo y con sus pueblos latinoamericanos. Pero también, Gabo, tuvo una posición política muy consecuente con su propia vida y con la época que le tocó vivir.

 

En ese último sentido queremos destacar su amplio compromiso con la liberación de los pueblos latinoamericanos y con la visión crítica de nuestras sociedades. Así, en la entrevista que le concedió a Plinio Apuleyo respecto al socialismo, García Márquez le manifestaba: “….en mis opciones políticas personales soy un hombre comprometido, políticamente comprometido”. Agregando su entrevistador ¿Con el socialismo…?, a lo que el gran novelista latinoamericano le respondió:

 

“- Quiero que el mundo sea socialista, y creo que tarde o temprano lo será. Pero tengo muchas reservas sobre lo que entre nosotros se dio en llamar literatura comprometida, o más exactamente la novela social, que es el punto culminante de esta literatura, porque me parece que su visión limitada del mundo y de la vida no ha servido, políticamente hablando, de nada. Lejos de apresurar un proceso de toma de conciencia, lo demora. Los latinoamericanos esperan de una novela algo más que la revelación de opresiones e injusticias que conocen de sobra. Muchos amigos militantes que se sienten con frecuencia obligados a dictar normas a los escritores sobre lo que se debe o no se debe escribir, asumen, quizás sin darse cuenta, una posición reaccionaria en la medida en que están imponiéndole restricciones a la libertad de creación. Pienso que una novela de amor es tan válida como cualquier otra. En realidad, el deber de un escritor, y el deber revolucionario, si se quiere, es el de escribir bien”.

 

En efecto, dentro del compromiso político de García Márquez, se destacó entre sus principios la defensa de la Revolución Cubana y de su larga y estrecha amistad con el Comandante Fidel Castro. En lo personal recuerdo nuestras reuniones en “la Explanada” (la residencia del embajador de Cuba en México), donde un grupo de intelectuales, políticos académicos y periodistas mexicanos y latinoamericanos, periódicamente nos reuníamos para analizar la situación de nuestra América y para llevar a cabo tareas en solidaridad con el pueblo y gobierno cubano.

 

En diversas obras del género testimonio, Gabriel García Márquez, se hizo presente su preocupación por la situación política latinoamericana y mundial. Recordemos algunos de sus textos claves donde nos mostró la situación de la realidad política de nuestra región y del mundo. En ese contexto figuran trabajos como: “Viva Sandino” (1982) y “El asalto: el operativo con el que el FSLN se lanzó al mundo” (1983), trabajos testimoniales como se indican en los títulos dedicados a las gestas heroicas del pueblo nicaragüense. “Noticia de un secuestro” (1996), obra donde nos presenta una crónica periodística de una historia real, tal como fue el secuestro de Maruja Pachón Villamizar que acontece en Colombia, cuando se hacía presente el auge del narcopoder de Pablo Escobar Gaviria, principal activo del llamado Cartel de Medellín. Fenómeno de la violencia criminal que sigue presente en nuestros días en diversos países latinoamericanos.

 

 “Chile, el golpe y los gringos” (1974), es un relato breve donde se describen las situaciones que padeció el gobierno del presidente Salvador Allende  y las condiciones que llevaron a la imposición de la dictadura militar. “Las aventuras de Miguel Littín clandestino en Chile” (1986), ahí Gabo nos narra cómo a mitad de la década de los años ochenta, el director chileno de cine (Miguel Littín), llevó a cabo una serie de grabaciones durante casi dos meses. Reportaje que nos lleva a introducirnos a la situaciones de clandestinaje que vivió el cineasta. Momentos en los que  grabó un material fílmico, que sirvió para producir reportajes y filmes, que testimoniaron la situación que se vivía en la dictadura militar de Augusto Pinochet. En “Viaje por Europa del Este” (2015), es un texto donde el joven escritor colombiano plasmó su visión y crónicas de sus viajes por los países europeos del campo socialista. Y también en sus reportajes figura un rico testimonio de la “Operación Carlota” publicado en diversas revistas, entre ellas en la revista Tricontinental (Cuba) y Proceso (México) 1977, en donde se da cuenta de los preparativos y presencia de las fuerzas revolucionarias cubanas que combatieron con su espíritu internacionalista por la liberación de Angola. Así, la obra periodística y testimonial del Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, es también una fuente necesaria para comprender nuestra historia y el compromiso de una gran escritor con la liberación de nuestra América.

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