CASTA VIVA

CASTA VIVA

JOSU AIZPURUA

Viva de “lista”, de abusadora, de traidora a su esencia y castellanidad, que se pasó por el forro y convirtió en vaciada la tierra castellana que hizo vibrar a Machado, pero que a la Casta le hizo concebir un fortin madrileño y desmembrar su Territorio, Castilla la Vieja y Castilla la Nueva, en “comunidades etéreas” Leon, La Mancha, Cantabria, y en su centro el inventado Madrid, que fundo un moro en detrimento de Toledo.

Las actuales Castillas, sin salida al mar en Cantabria, quedan fuera de un concurso territorial donde la capitalidad y acumulación de los oligarcas de la Casta ponen a Madrid, artificialmente por encima de Barcelona que asume su territorialidad y su férula españolista que la impiden ser la gran ciudad ibérica.

Estas maniobras del postfranquismo sin Franco que La Casta implanto para frenar la Transición, con el rey de Franco y el Presidente falangista, anularon la invertebración histórica, vasco-navarra, mediterráneo-catalana, y galega, con sus colonias africanas de Canarias y Ceuta  y Melilla, con sus islotes y Sahara la tierra española de la vergüenza, y el bodrio estatal dio paso a nuevas inestabilidades, Leonesas, Andaluzas, etc.

Al determinar una nacionalidad, se debe reflejar su participación en el Estado con sus derechos y deberes y su referendo popular que será el que de sello democrático a la nación y soporte europeo en su autodeterminación en el Estado o la creación de su propio Estado. Nada de esto se hizo NUNCA, y todo lo realizado es fruto de la inspiración ensoñadora de la Casta, imperialista y corrupta.

Un Senado, guinda insípida del pastel y una Diputaciones, forman el colchón para militantes conos, incapaces de hacer nada más que bulto. Este es el “proyecto” tente mientras cobro, que nadie osa en cuestionar y menos en denunciar y la Federación de Fútbol es un reflejo exacto de lo que es hoy el Estado78.

Y navegando entre contradicciones y traiciones, una “izquierda” postcomunista, avanza entre personalismos y tontadas de poca monta para cuestionar a La Casta y su relato que son el verdadero freno a la Democracia desde que Franco cortó con la República como forma de lograr la mejora de las condiciones de vida y trabajo de la clase trabajadora.

Ese y no otros divertidos de sexo y ocurrencias, es el verdadero camino redentor de los pueblos y naciones ibéricos, la República y la Democracia. Juntos o separados, es igual, los objetivos deben ser comunes y aglutinar mayorías que no puedan ser cuestionadas por el fascismo institucional y sus leyes de parte.