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domingo, 15 de octubre de 2023

DEL NAPALM SOBRE VIETNAM AL FÓSFORO BLANCO SOBRE PALESTINA

 

DEL NAPALM SOBRE VIETNAM AL FÓSFORO 

BLANCO SOBRE PALESTINA

JAVIER LEZAOLA

Hoy son los niños y niñas palestinos quienes corren como hace medio siglo lo hacía Phan Th Kim Phúc, víctimas también del imperialismo

Human Rights Watch ha denunciado este miércoles que Israel está bombardeado a la población civil de Gaza también con fósforo blanco, un arma química cuyo uso está prohibido contra la población civil. Además de masacrar y dejar sin luz, agua, comida y medicamentos a la población civil de Gaza, Israel estaría utilizando contra ella —según ha denunciado la citada ONG estadounidense y han confirmado varios medios internacionales— este arma química que provoca quemaduras muy graves y fallos multiorgánicos en el corazón, el hígado o los riñones.

 

Todo ello mientras el grueso de la comunidad internacional se divide entre quienes apoyan al Estado sionista y quienes miran hacia otro lado, aunque también aumentan las voces de personas y colectivos que califican abiertamente de genocidio lo que está haciendo Israel en Gaza y de genocidas a sus responsables.

 

Hace medio siglo, era EEUU quien bombardeaba con otra arma química —el napalm— a la población civil de Vietnam, y por razones no muy distintas a estas, y es que la bestialidad imperialista no tiene una frontera determinada ni pertenece a un país determinado.

 

 

La imagen de la vietnamita Phan Th Kim Phúc —entonces, una niña de nueve años— corriendo, arrasada por el napalm, hacia la cámara de un fotoperiodista en 1972 —hacía un lustro que Guevara había caído en Bolivia, también víctima del imperialismo— dio la vuelta al mundo

 

Ya lo dijo el Che Guevara en su discurso ante la ONU —11 de cuyos trabajadores acaban de morir bajo las bombas de Israel en Gaza— de 1964: “Bestias fueron las hordas hitleristas, como bestias son los norteamericanos hoy, como bestias son los paracaidistas belgas, como bestias fueron los paracaidistas franceses en Argelia, porque es la naturaleza del imperialismo la que bestializa a los hombres, la que los convierte en fieras sedientas de sangre que están dispuestas a degollar, a asesinar, a destruir hasta la última imagen de un revolucionario, de un partidario de un régimen que haya caído bajo su bota o que luche por la libertad”.

 

La imagen de la vietnamita Phan Th Kim Phúc —entonces, una niña de nueve años— corriendo, arrasada por el napalm, hacia la cámara de un fotoperiodista en 1972 —hacía un lustro que Guevara había caído en Bolivia, también víctima del imperialismo— dio la vuelta al mundo y acabó concienciando a muchos en todo el planeta sobre la realidad de la guerra de Vietnam. Hoy son los niños y niñas palestinos quienes corren bajo el fósforo blanco de Israel.

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