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viernes, 26 de mayo de 2023

VALBANERA

VALBANERA

JOSU AIZPURUA

En el siglo pasado, huyendo a Cuba más de mil canarios se vieron flagelados por el naufragio del Valbanera, que, con escala en Santiago, jamás llegó a La Habana. 700 afortunados se quedaron en Santiago y sus motivos son un caudal de novelas infinitas, pero este no es el motivo de mi recuerdo.

Siglos de colonización y sufrimiento hicieron que incluso en el XX, los canarios huían de la miseria y la falta de horizonte económico isleño para, en su pobreza idiomática, partir a Sudamérica, Cuba y Venezuela, donde su dureza y conocimiento de la zafra y la tabacalera les hacía productivos.

Maldición isleña donde solo el godo y sus aliados tenían cauce a su patrimonio y tareas para que sus sagas prosperasen entre el quejido de sus vecinos menos afortunados.

Y eso sigue siendo igual hoy día.

El Régimen78 tiene su versión canaria, entre siglas confusas y vacías para que el isleño de a pie, siga danzando y carnavaleando, ignorante, y avalando “algo” que les convierte en verdugos de sí mismos.

Para ir a mi Centro Médico yo debo pasar entre la mugre municipal que el Pollo de la Bencina ha declarado en la capital chicharrera, con su equipo multisigla y la alquilada. Vivir el hoy de Sta. Cruz y visitar la isla vecina es el mejor ejemplo de lo que nos espera si no se produce el cambio municipal y; otros objetivos, otros aliados, otros caciques, no se hacen cargo de su reflote.

Patricia, sujeta al sucursalismo, tiene ante sí la oportunidad de reciclar el paradigma santacrucero e impedir su cruel desintegración. Hoy ni siquiera hay una ciudad, solo un conjunto de barrios que no pueden hacer una vida común por su incomunicabilidad. La mugre la tiñe, su flora se desvanece, sus árboles del pasado languidecen sin frescura, y toda la ciudad grita por una alcaldesa que la salve del desastre.

Como líder joven, tiene la ciencia suficiente para reorganizar el pueblo, para eliminar los proyectos de encargo de los caciques perennes, para hacer respirar al Toscal salvándolo del Almeyda, y crear un Urbanismo para habitantes, no para inversores especuladores que tajo a tajo están desnudando a una ciudad de vista corta. La petrolera dirige el urbanismo (¿). Este es el mayor problema santacrucero; su urbanismo al servicio caciquil.

En mi Bilbao sujeto al españolismo, padecimos de lo mismo, y hoy ya sin ellos la ciudad se abrió a la ría y los ciudadanos pudieron pasear. Aquí nos falta abrirnos a la mar, verla sin que edificios Benidornianos y los tanques petroleros nos lo impidan, y de paso hagan parques donde viejos y niños no sean atropellados por patinetes.

Toda caminata empieza por un paso; Patricia, límpianos las calles, y de paso la Institución.

Mantener al Alcalde actual es dar el tiro de gracia a la capital, corrupta, decadente y anticuada; ya en la vecina se habla de una sola capital para Canarias, la suya.

No rematen a Sta.Cruz y den una oportunidad a una Capital alternativa. Patricia; desde la alcaldía o desde la oposición, lidera un urbanismo salvador de la capital de la isla chicharrera. El Alcalde ya se agotó y se le ve demasiado el plumero. Pronto se irá a por el botín peninsular, pero, nos deja el caballo de Troya dentro.

 

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