ANTROPOCENO

ANTROPOCENO

JOSU AIZPURUA

Una vez el Comunismo predijo un Mundo social donde cada uno obtendría según sus necesidades, pero, primero debiera pasar por según su trabajo, y lo que es peor: la dictadura del proletariado. A mí; no me gusta ninguna dictadura.

Los no-racistas estamos muy contentos con la abuela Lucy, pero los científicos nos dicen que el ornitorrinco también es de los nuestros y aún falta el eslabón de origen de la vida. ¡Qué complicado es todo!

Pero me dicen que estamos ante el Antropoceno, la culminación social del Homo Sapiens.

Y a mí, que me cuesta creerlo.

Trump, Putin, Zelensky, OTAN, Sánchez, El Sultán marroquí, y otra tropa desviada, contradicen el avance social y alejan el Antropoceno de las posibilidades de este siglo XXI.

Nos están llevando a un mundo de oligarcas, que ya superaron a la Democracia como Sistema y lo suplantan por un Orden Jerárquico, en donde ellos hacen y deshacen al antojo de sus bolsillos.

La Guerra de Ukrania, no es más que el conflicto de intereses entre los oligarcas rusos y los oligarcas americanos del norte.

Pero esa guerra marca el fin de un horizonte nuevo, evolutivo y total, el Antropoceno, para meternos en un Orden sesgado; el Oligoceno.

Conviene bajar de la nube, y reconocer que los oligarcas; son hoy los monarcas del pasado.

Hemos visto por TV como los que mandan en el Mundo se han reunido en Madrid. Mentira. Todos ellos son títeres al servicio de la Oligarquía gringa y aliados.

Son eso que aquí llamamos La Casta que han conseguido en 2022 alumbrar una política para tontos que entregan su voto a quien los margina del progreso social.

Putin es su señuelo que se hace odioso a las masas por su comunismo. Mentira. Putin es anticomunista y está empeñado en hacer desaparecer a Lenin. Su Régimen autocrático es de capitalismo salvaje.

Los EE. UU. que hoy sonríen a “los reyes”, son los que descabalgaron del Poder al Imperio español, son los que les ganaron todas las batallas y los que compraron sus territorios a precio de saldo. Franco entregó a IKE, la soberanía territorial con bases donde quiso. Hoy Biden lo amplió a su gusto. ¿Ya nadie recuerda el hundimiento del Maine?

Al carnicero de Cuba le ponen la mejor plaza de Tenerife y emborronan la placa de Martí, pero cuando llega el jefe Biden lo alojan en el Palacio Real. Es la bajeza moral de los que saben la verdad, pero intentan engañar a los indocumentados.