RUMORES

RUMORES

JOSU AIZPURUA

Les voy a contar un chisme; USA lleva 8 años preparando a tropa ukraniana en Alemania. Y el ex Jemad Alejandre, dice que Zelensky “es un producto de Marketing”.

Blanco y en botella.

Y puesto a pensar ¿Cuánto costará esta cosa increíble en la que mueren eslavos de uno y otro lado de “la guerra”? Las empresas de armamento rellenan sus bolsas para muchos años. Y los perroflautas sufrirán sus revanchas con rencor.

Cuando los Oligarcas se repartan el “Mercado”, que ahora está siendo cuestionado, pasarán la factura a las “masas salariales” que pagarán sus excesos bélicos, y aún obtendrán además botines extraordinarios en la reconstrucción ukraniana. Y Hatí y La Palma; seguirán con cuentagotas.

Este siglo XXI nos enseñó cosas horribles, cosas que nunca hubiéramos soñado, como violencia vicaria o VOX, que son lacras antinatura. Nos impiden ver el nuevo ser Humano siglo XXI.

Y si presionamos mucho, y subimos salarios, pensiones, y subvenciones, pongamos un 5%, La Casta de inmediatos nos subirá un 10% en costos con nombres varios. Y si no vendrán de nuevo los “hombres de negro”. Estamos jodidos.

Los muertos de Rusia-Ukrania, los ahogados de Canarias y sus niños presos, los ancianos de las residencias en el C19, los que mueren mal atendidos por la Seguridad Social menguante, ¿Quién los protege? Ni tan siquiera los recuerdan, y creo que La Casta los tiene condenados al ostracismo. No figuran en sus argumentarios que matinalmente envían a sus pesebres periodísticos.

Volvemos a la autoorganización, pues los partidos miran para otro lado, y están en el lado oscuro de la Historia.

Me decía un compañero de banco sin palomas, que tiene ganas de morirse, pero ni eso nos dejan. Es tal su dominio social que, hasta el derecho individual más claro, la vida, la disponen ellos, La Casta subida en la chepa de los obispos. Yo no me suicido pues les alegraría mucho a los fachas. Aguanto y doy pedales, mis discípulos, que no existen, me lo agradecen.

El siglo XX nos planchó con 3 guerras, 14- 36- 39, y en ello aprendimos que no hay Gloria en la Guerra. Por eso pensamos que el XXI nos abría a un nuevo paradigma de Paz y Progreso.

Pero olvidamos la insaciable ambición de La Casta que necesita más miedo, más botines y más mentiras para sostenerlos. Pregona la Patria y exalta al Ejército, pero sus hijos son comisionistas y no cabos de la Legión, plagada de extranjeros para obtener nacionalidad. Entre sus filas pijas no habrá muertos pues a la mili solo van los pobres. El muerto al hoyo; y el “vivo” al bollo.

Hay rumores de que repetiremos el siglo XX.