MENTIRA PALMERA

MENTIRA PALMERA

JOSU AIZPURUA

¡Si! Mentira Palmera, mentira podrida; palmero sube a la palma, y mira para otro lado.

No hay otra explicación a la desidia palmera, donde aún se vive en caravanas, y lo que ofrecen, contenedores decorados como si fueran un tren, es algo sacrílego en aquellas montañas.

Les hacen “homenajes” cuando lo que quieren es dinero y claridad. Lo que gastan en el “homenaje” vendría muy bien para reparar consecuencias volcánicas, y la rapidez con que lo gastan contrasta con la lentitud en las ayudas. Los damnificados aún no viven en casas ni trabajan en sus huertos ni en sus plataneras, y ni siquiera tienen agua. Hay un agravio comparativo canario: Canarias donde se mira con lupa la inversión.

Pero hemos visto movilizaciones, declaraciones valientes, erguidas las portes palmeras, y ya no genuflexas, resignadas, temerosas actitudes ante los amos del Estado. ¡Bravo! Canarias despierta.

Ya es la hora de que el Presidente Torres le cante las 40 al Estado78, aunque ya sé que serán 39, por eso de Canarias, y algunas menos por lo del sucursalismo, pero ya es ineludible que la cuestión Canaria sea un urgente tema de Estado.

¿Qué pasa con Marruecos-Canarias? ¿Quién está negociando nuestro futuro? ¿Por qué no resuelven Ceuta y Melilla y concluyen con Sahara? ¿Cuándo una descolonización Canaria y su reflejo constitucional? ¿Cuándo Europa y España van a discriminar positivamente a Canarias para que alcance el desarrollo europeo, social, económico y tecnológico?

Estos, ¡y muchos más! Son los temas que preocupan en Canarias y a nadie ocupan en Madrid.

Nuestros 3000 niños, africanos como nosotros, que han llegado como nuestros wanches y buscando lo mismo, vida digna, es la muestra de nuestro destino en el mapa de TV juntito a Portugal: ignorar y mentir. Esos niños necesitan amor y preparación, y les inculcamos odio, los marginamos y queremos que lo sientan para que la obra colonial de esclavitud del negro siga anidando en los racistas corazones que se esconden en la derecha. ¿Y la caridad cristiana? ¿Y la igualdad?

Mandarlos a otro lugar, no les resuelve su vida que, sin preparación y aculturación, está destinada al delito. Hay que incluirlos en un programa de vida, Canaria o peninsular, que les garantice vida digna y ser útiles en su entorno. Amontonarlos en segregación, es un delito social del que nos arrepentiremos y al que ellos reaccionarán inexorablemente.

A Margarita le sobran dineros para enviar armas a Ukrania: pídanle algo para el volcán y para los niños MENAs, que son necesidades moralmente superiores a las de matar rusos.

Hay mucha tela que cortar en Canarias; y algunos ya están tomando las medidas, y las tijeras.