ERRANTES
JOSU AIZPURUA
Ese gran Madrid
Ayusista, libertario y tabernario en apariencia mediática, pero feudo y refugio
de la Casta peremne que parasita el Estado, es lugar elitista donde ellos
socializan y disfrutan. Son muy pocos escondidos entre los 6.752.763 habitantes
madrileños.
Pero los 2.387.370 de Castilla La Vieja (la que se comió a León) y los 2.049.455 de La Nueva, hoy manchega, darían los más de 11 millones que la nación castellana tiene en la actualidad, aunque con una coartada española para diluir su responsabilidad en la llevanza del Imperio, la esclavitud, y la desaparición del oro americano o la derrota de Cuba. Alfonso X queda con el culo al aire.
Hábiles estrategas
para Ma^yrit (la del moro), han convertido a Madrid en motor hispano de “la
libertad y la economía”. Castilla, Vieja y Nueva, son los responsables de tanto
desastre y de la División Azul. ¡Que gran intento! Pero no cuela.
La Casta, con
Franco agonizante, dio el salto a la UE, con el “puedo prometer y prometo” del
Jefe del Movimiento, Suarez, que luego; no pudo. Sus promesas se las llevó el
viento.
Había que hacer un Estado
UE, con las naciones; castellana, vasco-nabarra, catalana, galega, y
territorios varios ya perdida su esencia nacional y regionalizados españoles,
como Andalucía con clara impronta nacional que proclamó Blas Infante, pues esa
tierra nada tiene de Castilla-España. ¿Y se hizo? NO.
Un bodrio legal
surgió de la chistera de la Casta, con las Comunidades Autónomas.
Ilusorias,
irreales, torticeras, las “comunidades” salieron adelante por el pesebre de la
Casta. Internacionalmente no tienen valor alguno, como vimos con Cataluña en su
Procés.
El Federalismo o la
Confederación eran las opciones internacionales disponibles, pero la malicia de
la Casta se fue a otro camino donde trampear como siempre. Atado y bien atado
(1969 Caudillo dixit).
Miraron para otro
lado la Casta traidora, y, Canarias, Sahara, Ceuta y Melilla, quedaron sin descolonizar
y sin base internacional suficiente para garantizar su futuro. Sahara ya sucumbió
a su destino. ¡Que tiempos en que se sentaban en las Cortes españolas, las
españolísimas provincias del Sahara! con sus chilabas y el camello en la
puerta. Farsante España.
Pero Madrid ya
consiguió salir del lio y hoy presenta cara de no haber roto un plato. Su
nacionalismo es de mayor intensidad que el de Urkullu o Aragonés. Cosas
veredes.
Ya hay barra libre
en el Estado, y los vaciados corren a las urnas para que les llenen el pesebre.
Errada España, con
errantes naciones sin Estado que tampoco encuentran acomodo en los
planes unionistas de la Casta. Y es de vital subsistencia crear una “espacio”
Plurinacional, que equilibre naciones y regiones, en base a futuro y no ha pasado
falsificado.
Federen,
Confederen, Descolonicen, y la “España Invertebrada” habrá desaparecido, dando
lugar al concierto de los Pueblos y la Libertad de las personas.
A ver cuando pasa el carro de la basura estatal, y podemos empezar a pensar en un EstadoXXI para vivir sin angustias en lo público y libres en lo privado
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