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sábado, 2 de octubre de 2021

PROSTITUCIÓN Y NEOLIBERALISMO

 

PROSTITUCIÓN Y NEOLIBERALISMO

Eduardo Sanguinetti, filósofo y poeta.

"Las mujeres sometidas a la situación de prostitución, estarían ubicadas en el lugar de objeto, no en el lugar de objeto de deseo, sino en lugar de objeto de goce sádico", Jacques Lacan

El poder real del sistema prostibulario del “libre mercado”, conformado por gobiernos y corporaciones neoliberales del mundo, son responsables del mercadeo de niñas menores de edad y narcotráfico.

Sin alejarnos demasiado, "cruzando el charco", ningún alcahuete de medios-basura de aquí y del mundo, desconocen los delitos cometidos con niñas menores, en fiestas o "partuchas" de "ricos y famosos", tan promocionadas en Punta del Este (Uruguay, paraíso fiscal).

 

Fiestas organizadas para agasajar a la mafia de gerontes corporativistas, farándula cómplice; niñas menores, ofrecidas cual producto a consumir por proxenetas habilitados vaya a saber por quién, pues el poder tiene mandarines y mandaderos; se puede replicar alrededor del planeta en todos los países donde reina el neoliberalismo, donde todo se negocia, hasta los muertos.

 

En el último gobierno del Partido Colorado, en Uruguay, hace un par de décadas, un promotor de modelos argentino, recibió una distinción de manos del presidente en ejercicio, ¿legitimando el delito del proxeneta?

 

Conocida su chacra donde convivía extensas temporadas veraniegas en Punta del Este, con las modelos niñas, menores de edad, autorizadas por padres y madres, para que estas desfilaron cual 'hacienda' en pie por las pasarelas, a la vista de los denominados «ricos y famosos», publicitados en pasquines semanales, legitimando lo ilegítimo.

 

Anualmente en el mundo, alrededor de cuatro millones de mujeres y niñas son ingresadas a la prostitución.

 

En Argentina cientos de ellas son secuestradas y desaparecidas por las redes de proxenetas, y muchas han sido y están siendo asesinadas, avalado el genocidio por el capitalismo en su fase neoliberal, como productor de esclavitud.

 

La globalización que propicia las redes internacionales de trata, produciendo el brutal incremento de secuestros de jóvenes, niñas y niños.

 

Medios de comunicación masiva mafiosos, que inducen y ofrecen modelos sexuales prostituidores, actuando sobre el imaginario social y favoreciendo la dominación proxeneta, consolidan la opinión pública afín a la prostitución, generando también su expansión, produciendo en este caso una réplica masiva, de lo que hacen los proxenetas, en lo individual, para socavar la resistencia de las mujeres que prostituyen.

 

Y la participación de sectores de los gobiernos vinculados a las redes de tráfico de mujeres que, a su vez, se relacionan con los demás tráficos (drogas, armas).

 

El poder político, financiero-corporativo, farándula mediática y las denominadas fuerzas de seguridad tienen sus vasos comunicantes con los "proxenetas" y los "femicidas habilitados", el comercio de prostitutas y la "trata de blancas", asimilados al narcotráfico y demás porquería que degrada la condición humana... sin justicia que atienda estos casos... ¿o también la justicia ausente forma parte de la fiesta del proxenetismo y el tráfico?...

 

La cultura de la prostitución y el porno, esta asimilada cual núcleo constitutivo de ser y estar en Argentina y el mundo.

 

Opera bajo diversas formas de sexismo, asimilado al acontecer de la existencia de una comunidad en estado de aparente «celo casual», basta visualizar los pasquines que ofrecen los kioscos, programas de televisión, films producidos por y para el porno directo o metafórico, Hollywood formidable ejemplo de la prostitución emblematizada como Academia de amplio espectro, Oscar incluidos, meca de la explotación de seres humanos, con la excusa del film que quizás nunca se produjo, ligadas al acoso, la violación y la sodomía.

 

Y todo lo que hace a la sociedad del espectáculo prostibulario en que se debate este sistema bajo el signo del neoliberalismo, ideología jamás anunciada, pero aplicada cual dogma de ninguna religión.

 

La energía libidinal modifica su función social en la medida que la función sexual está hiper promocionada y alentada a cualquier costo, incluidos productos de la industria de la droga que hacen follar hasta a una momia, en nombre del libre mercado, que Gran Hermano Prostibulario, ordena y dispone, pasando a un tercer estadio el «Principio Tecnológico», donde la tan mentada libertad sexual es sojuzgada y puesta en beneficio de prácticas de diversión alienantes, humillantes y represivas, para de ese modo llegar a un control más enérgico sobre un individuo anestesiado, sin capacidad ni voluntad de resistencia, devenido en un femicida ante el empoderamiento de la mujer, ante lo cual el machista no tiene medios civilizados de poder modificar conductas, sólo acude a la posibilidad de ser un troglodita criminal.

 

Toda la mafia conformada por siervos de politicastros y sus porno stars, hoy en función política de importancia, en roles de actrices/actores de films producidos por y para la cultura del porno y la prostitución, apuntalada por el funcionario de turno… hora a hora, con pantalla y micrófono, habilitados por los dueños de medios basura, muestran de qué manera se degrada la condición humana.

 

Difaman, insultan, mienten, con magros discursos y sonrisa abierta a la hora de intercambiar los favores sexuales «fáusticos»… desorientan, confunden al ciudadano cándido y cobarde, con total ausencia de compromiso con la verdad y realidad, que aún cree en la presunta verdad de la prensa diaria y los espantosos balbuceos de los devenidos políticos de teatro bufo.

 

En el núcleo de este tema, la prostitución está asimilada al modo de vida del mundo neoliberal, devenida en una enorme organización con ramificaciones internacionales, que imponen códigos de comportamiento que deberían ser evaluados con urgencia por grupos interdisciplinarios, idóneos y comprometidos con la mujer y su circunstancia.

 

Contra la bestialidad de un sistema sádico, patriarcal, al que se antepuso con rigor el empoderamiento de las mujeres, que devino en el brote psicótico de los «machistas argentos», impotentes ante la posibilidad de encontrarse con mujeres dueñas de si y sus vidas en acto y conocimiento.

 

Con sumo placer y deseo, reivindico al amor y la pasión hacia la mujer, denunciando a este sistema como cómplice de un holocausto en las sombras, donde se manipulan a sus antojo las existencias de miles de niñas y mujeres, devenidas en víctimas fatales de un sistema patriarcal machista, hipercorrupto y criminal.

 

El tráfico de mujeres avalado por los Estados, el sistema patriarcal-neoliberal y favorecido por la globalización, pretende hacer pasar la explotación sexual como si fuera trabajo, buscando legalizar el poder obtenido mediante la violencia y el secuestro, y así incrementar aún más sus ganancias.

 

Me lleva a abordar el antiquísimo tema de la prostitución y sus derivados, el saber que algunas de estas ¿modelos?, hoy "señoras" de algún mafioso “extra large” con bolsillos profundos, elevadas a símbolo del "deber ser”, pareciera son referentes para las nuevas generaciones de niñas y mujeres que comienzan a transitar sus vidas.

 

Y no dudo que las "señoras de la mafia" marcan pautas prostibularias a seguir, que aniquilarán la vida de decenas de miles de niñas y jóvenes mujeres, que, por tendencia, vocación o desesperación, en el marco de lo existencial y de la “vida fácil” que el infecto sistema neoliberal ofrece, tiene un costo altísimo en las generaciones que se irán renovando como mercadería de ocasión según pasen los años.

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