Páginas

sábado, 8 de agosto de 2020

LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN: DESINFORMAR NO ES DEMOCRÁTICO

 

LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN: DESINFORMAR NO ES DEMOCRÁTICO

ÁLVARO SOLER MARTÍNEZ


En la actualidad, la democracia occidental se presenta  en plena crisis de legitimación, existen movimientos, discursos y un malestar general que representan un claro ambiente de crispación en todo occidente. Esto no quiere decir que se exijan más derechos o una democracia mejor, ya que encontramos el auge de movimientos de extrema derecha por toda la geografía Europea. No obstante, también está su contrapartida, movimientos ligados a la izquierda como el feminismo, el ecologismo y la lucha obrera que sí que buscan la mejora de la sociedad . En resumen, nos encontramos con un contexto social de crispación, donde la desigualdades que genera el capitalismo neoliberal van creando un caldo de cultivo perfecto para la reivindicación y sobretodo para el conflicto. De este modo, como bien es sabido, el capitalismo genera cada cierto tiempo crisis cíclicas. Cada vez que se produce una crisis se abre un campo de luchas de poder, donde tanto los discursos, como los movimientos sociales ponen en duda los relatos hegemónicos y a las propias instituciones que conforman el «status quo».

 

Asimismo, si nos centramos en el acontecimiento actual que está enmarcando todas las portadas de la agenda pública, encontramos un debate sobre la monarquía o la república. Así pues, estos contextos de conflicto intensificados por una crisis sirven para mostrar con más claridad las luchas de poder que se dan en el campo social, y también son útiles para destapar la verdadera cara de las instituciones.

 

Un claro ejemplo en España lo observamos en los medio de comunicación hegemónicos; Atresmedia, Mediaset, TVE… Con el inicio de la crisis (antes de que se iniciara la pandemia) (sí antes de que se iniciara ya estábamos en recesión), los medios llevaban meses blanqueando al fascismo y atacando a la izquierda sin ningún tipo de escrúpulo; mienten, manipulan, matizan, generan bulos y expanden su opinión transversalmente de ideología neoliberal (con matices dependiendo del medio) de manera masiva. Esto no es sorprendente, son grandes grupos corporativos ligados a los poderes económicos de este país. No obstante, un contexto de crisis (Covid) sumado a otro acontecimiento como (la corrupción de la monarquía), revela de manera menos sutil la verdadera cara de estos aparatos informativos.

 

Asimismo, desde que se destapó la noticia del rey y su fuga de Alcatraz, los medios han iniciado una gran campaña de blanqueamiento de la situación, y no solo los medios televisivos, sino a través de todos los canales; radio, TV, prensa escrita… Esto es un problema muy grave y sitúa a nuestro país en una situación vulnerable. No vamos a negar que en los demás países europeos no ocurren cosas similares (los medios de comunicación hegemónicos están totalmente influenciados por el poder económico, al igual que todo tipo de institución de su calibre e importancia, el poder del capital en el sistema neoliberal está infiltrado en todas sus estructuras). No obstante, el caso español roza lo esperpéntico, es altamente difícil obtener un discurso o relato realmente objetivo de la mayoría de prensa española. Esta manera de actuar de los medios hiere de muerte a nuestra democracia, la inhabilitan. Si los medios de un país, los encargados de informar a una sociedad de manera objetiva e imparcial, es decir, de aportar una información veraz de la realidad social, se dedican a manipular hasta los temas más evidentes; como que Vox es un partido fascista, o que el rey se ha fugado de España para eludir responsabilidades por sus numerosos casos de corrupción (un rey también fascista e impuesto por Franco), difícilmente la gente podrá tomar decisiones coherentes con facilidad, ya que la realidad que se les presenta es ficticia, es un engaño, y va directamente contra los intereses de la ciudadanía. Por otro lado, no estamos pidiendo que cadenas como Antena 3 o Telecinco, claramente conservadoras, den mítines sobre Marxismo, no, lo único que exigimos es honradez, y si un jefe de estado se ha exiliado a causa de sus numerosos casos de corrupción perpetuados durante su mandato, se diga, sin manipulaciones ni tapujos. La falta de veracidad informativa es un gran problema si queremos avanzar como democracia, los medios de comunicación deberán avanzar juntamente a nosotros, y sino, deberemos exigir que cambien y que dejen de actuar como panfletos publicitarios en noticias que se asemejan mucho a las peores décadas del siglo XX.

 

El propósito de los medios de comunicación de masas no es tanto informar de lo que sucede, sino más bien dar forma a la opinión pública de acuerdo a las agendas del poder corporativo dominante.

 

Noam Chomsky

No hay comentarios:

Publicar un comentario