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domingo, 26 de julio de 2020

ESCRITURA RITUAL


ESCRITURA RITUAL
EDUARDO SANGUINETTI,
FILÓSOFO Y POETA.
Bajo el cielo de la Cruz del Sur, yo, un iconoclasta jamás redimido, he construido mi pensamiento de ámbito universal y filiación neoidealista, asimilado a mi tierra y a los que la honran en actos de vida.

No es premeditada esta autorreferencia que instalo en esta página como una gratuita reminiscencia espectral, quizás lo llevo a cabo, porque se trata de Latinoamérica, donde todas sus naciones han padecido y lo siguen experimentando las mismas pesadillas: estampas retrospectivas de la angustia común, de la servidumbre eterna, llevada a cabo por miserables oligarquías feudales y neoburguesías mafiosas, con derecho jamás adquirido de esclavizar, sojuzgar y eliminar al que desobedece las leyes jamás escritas, pero cual norma: la ilegalidad es la nueva legalidad. La justicia de la mano del delincuente capitalista, de todo color ideológico, sin ideología, habilitadas por el poder extranjero, a cambio de que la genuflexión en los ritos sacros de Mercado de Valores de activos inexistentes, se replique eternamente, en nombre de la desmesura y el Gran Capital, hoy en proceso de disolución, ante la presencia de una pandemia que ha llegado para dar señal de que es posible modificar la vida y sus prácticas, con la muerte como signo esclarecedor de una novedosa Tabla de Autoridades, que colapsará todas las previsiones de imperios en putrefacción.


El hecho de preguntarnos día a día si tiene algún sentido simplemente actuar en el mundo nos lleva hacia el ‘absurdo’ y un misticismo bajo presión. Absurdo ante una falta de comprensión cabal del paisaje planetario en un punto extremadamente existencial y personal. Manifiesto que el hombre está dotado de una manía irreparable de buscarle un orden, un sentido a las cosas, origen del absurdo y del final de juego, donde comienzan a accionar los que huyen del planteo de preguntarse ¿qué hacemos aquí? Son los que han construido un mundo para pocos, juntando bibelots, son los parásitos colonizadores, que, cual bacterias de infecciones sintomáticas, en la ubicuidad de su ser y estar, degradándolo todo.

Con compasión enternecida y sarcasmo ocasional, no puedo dejar de decir que, detrás del espectáculo de una democracia fingida, lo que está instalado en el mundo, en realidad, es un poderoso deseo de control al pueblo. Noam Chomsky avizoró el porvenir, que es hoy, cuando dijo: “Los medios de comunicación son a la democracia lo que la propaganda es a la dictadura”.

Pareciera que no hay un espacio final donde retirarse, a no ser que nos quedemos quietos, inmóviles. Si llegáramos a hacerlo, sin perder el equilibrio, sin dejarnos llevar por la embestida, puede ser que seamos capaces de permanecer y de esa manera accionar contra todo lo que degrada nuestra condición de simplemente “ser”.

Desde el momento de despertarnos por la mañana, hasta el momento de acostarnos, no ignoramos que todo es una farsa, una estafa, una vergüenza. Lo intuimos, lo sabemos, lo experimentamos, sin embargo, la mayoría de los habitantes del planeta, colabora con la perpetuación del fraude, asimilados a los modos de esclavitud y explotación de un sistema genocida. Estos modos de producir espectros, provocan una crisis ecológica multiforme, que no deja de afectar a ninguno de los sectores vitales para que la humanidad permanezca en un planeta libre de contaminaciones concretas y virtuales.

La ausencia de ideología convertida en religión de ninguna fe, más que nunca en el siglo XXI, muestra por su brutalidad, su potencial destructivo y sus estratégicas alianzas a espaldas de los pueblos, la necesidad de una ruptura y de la reinvención son prioritarios: un giro de 180 grados emancipador se impone, arribar a la "nueva normalidad" afianzando el clima de una nueva vida, sería maravilloso, para quienes nos nutrimos de valores éticos y en coraje, siempre en acto de demoler a las bestias que día a día confrontan, difamando insultando y mintiendo, desde infectos medios de información falaz, lanzada para confundir a pueblos en estado de orfandad.Llo hacen en nombre de la mafia que reina en el mundo y nada por debajo de la desmesura... nauseabundos discursos de ignorantes, enanos del entendimiento, de bolsillos profundos.

A través de las resistencias y las luchas, se trata de construir una épica del siglo XXI. Es por ello que nos parece completamente imperativo desarrollar frente a los grandes problemas movimientos de masas unitarios, luchas de resistencia coordinadas a escala internacional; dirigirse hacia una nueva internacional situacionista, ecológica, antirracista, humanista; llevar a cabo campañas unitarias internacionales y participar en los marcos que permitan animarla en paz y en armonía.

Controlar la marcha de la economía y la erradicación definitiva del hambre, la miseria, la discriminación, la educación degradada manipulada en beneficio de ricachones que gobiernan por y para ricachones, a través de medios de instrucción desfasados de la realidad que los educandos viven.

Las instituciones son elementos esenciales del mantenimiento del orden social y de la propiedad privada como modo de esclavizar y marcar diferencias inexistentes, verdades de mentiras inocultables. En síntesis, no construir un movimiento de acondicionamiento, sino un movimiento de ruptura con el orden imperante de explotación y esclavitud, que la comunidad mundial soporta.

Individuos asociativos, altermundialistas, jóvenes comprometidos en la acción, antiguos militantes decepcionados de diferentes trayectorias, militantes de la diversidad, personas que llegan nuevas a la política y personas que retoman su actividad, intelectuales comprometidos con su tiempo, nutridos de coraje y de ánimos libertarios por igualdad y verdad.

Recordemos, que aún hoy queda tiempo para asistir al entierro de los muertos recientes, mañana no habrá tiempo, puesto que los muertos serán dejados allí mismo, donde caen, pero para aquel que derrame alguna lágrima, toda nuestra vida se extiende en una ininterrumpida mañana que arranca de la nada cada día, nada debajo del paroxismo y el delirio en que se transita la vida, creo así la llamábamos.

Creo que el mundo entero, el conocido y el desconocido, está estropeado, gritando de dolor y de locura, la publicidad de “cualquier cosa” ha generado alucinaciones y anulado percepciones… todo en aparente calma, tranquilo; pareciera que la consigna es mantener el cuerpo en forma para los gusanos.

El empapelado con que las nuevas biotecnologías de punta han cubierto el mundo de la realidad se cae a jirones. Para descubrir una nueva realidad, primero es preciso desarmar los desagües, estos están tapados con embriones de todo tipo y origen.

No se propone nada que pueda durar más que unas horas. Estamos viviendo una cantidad de vidas en el espacio de apenas una, a través de ciertos signos asistimos al fin de un tiempo, de una época, de una civilización, el anestesiamiento, el embotamiento, la lobotomización, como también la aceleración, la inflación, la masturbación -no ignoren que se masturban espiritualmente si se sienten satisfechos con las promesas de ridículos gobernantes-, descuidando la cristalización de dichas promesas, luego la masturbación convertida en método se ha extendido a todos los espacios de la existencia en esta tierra.

Pertenecen definitivamente al pasado, se han muerto sin dejar descendencia, fenómenos tales como el desarrollo paulatino de los talentos, su lenta maduración natural.

No ignoro que mi escritura está cargada como un cielo de tormenta, plena de resonancias, cuyo significado no se asimila hasta después de un choque. Estoy seguro de que si pudiéramos suprimir los medios de publicidad, como se presentan hoy, manipulando la vida de la humanidad, daríamos un gran paso adelante. Los medios, hoy, engendran violencia, mentiras, odios, envidia, sospecha, temor. No necesitamos la presunta verdad de la prensa mercenaria. Lo que precisamos es alegría, verdad, paz, soledad y ocio.

Después de descartar las versiones engañosas, las percepciones artificiales, los simulacros impuestos, las realidades inventadas, impuestas por las criminales corporaciones de medios, podremos abordar los temas que hacen a nuestra vida y su devenir. A partir de entonces se puede tratar de aclararlos e intentar resolverlos. A partir de ahí, solo de ahí, se podrá enfrentar un destino, -con sentido- nuestro destino, en capacidad de abandonarse a él, aun padeciéndolo, disfrutar el aquí-ahora-ya.

(*) Filósofo y poeta

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