HILVÁN INSINUATIVO DE SAN ANDRÉS

HILVÁN INSINUATIVO DE

SAN ANDRÉS

Tenerife, 1991

Ensayo

José Rivero Vivas

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(Fragmento

Obra: E.05 (a.67)

(ISBN: 84-95657-43-9)

Editorial Benchomo.

Año 2010)

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Mayo de 2020

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José Rivero Vivas

HILVÁN INSINUATIVO DE

SAN ANDRÉS

Sinopsis

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HILVÁN, relación escrita hacia 1986-87 –meses antes, a mano nació el borrador de La Magua-, según unas Notas recogidas directamente a través de charlas sostenidas, de modo informal, con la gente del lugar. La compilación no pretende ser un estudio, hecho con el rigor científico que requiere un trabajo de tipo estadístico, histórico o etnográfico; pero sí abunda en su dimensión social y resalta positivamente su calor humano.

Se trata sencillamente de comprender que, por su escasa importancia como núcleo poblacional, San Andrés, a excepción del caso de Teresa Pulido Mañes –a día de hoy, es presumible que haya más de una aportación, inclusive en diversa estructura-, no atrae francamente la atención de ningún estudioso, sabio o profesor que dé testimonio de su existencia. Consciente de ello, su autor, oriundo de este pueblo, ha querido fijar su memoria viva antes que el paso del tiempo borre su implantación, y su imperceptible trayectoria caiga irremisiblemente en total olvido.

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José Rivero Vivas

San Andrés – Tenerife

Islas Canarias

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José Rivero Vivas

HILVÁN

(Fragmento)

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Ireneo Fernández Melián, de quien se cuentan grandes proezas como excelente nadador, capaz de venir a San Andrés desde los Roques de Anaga, ese día aguardó paciente en su puesto de escucha; al cerrar la noche, se tiró al agua y cruzó a nado el Tajo, con objeto de incorporarse al bando que su ideal representaba, en cuyas filas termina la guerra de España. Ya en Francia, se adhiere a la Résistance, y toma parte en la organización de la guerrilla en los Montes de Vedène. Luchador infatigable, se suma a los grupos de incursión que se aventuran a cruzar la frontera en oposición armada contra la España franquista, operaciones que al cabo cesan por fundadas sospechas de infiltración enemiga.

Atento al actual discurrir del mundo, quién sabe si pensará en lo infructuoso de tamaño esfuerzo, como es asimismo posible que sueñe con un hermoso paraje, cerca de la Grand-Combe, al pie de aquellos montes que fueron testimonio de la lucha desarrollada en su juventud. Observando la vuelta que ha dado la vida, habrá de considerar que el pasado fue, al menos, de distinto sabor.

Hasta su jubilación trabajó de minero en la comarca de Alès, en el Gard. Hoy vive retirado, con Pilar, su mujer.

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El avezado marino es agricultor en su propio terreno, adonde acuden sus hijos y sus nietos para hacerles compañía, a él y su esposa. En tardes de fuerte brisa, bajando de la cumbre hasta el fondo del pequeño valle de su asentamiento, tal vez recuerde el viento que sopla del Bailadero a la costa y aun más allá; mientras, insinúa su amable sonrisa, mirando ensimismado hacia el llano, y, transportado a luengas distancias, solitario entonces, acaso añore el rumor de las olas batiendo sobre la arena negra de Traslarena, al tiempo que escucha el fragor de los callaos, revueltos por los bancos de mar, cuando barrían poderosos el lugar donde varaban los barcos de pesca de San Andrés.

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José Rivero Vivas

HILVÁN

Insinuativo de

SAN ANDRÉS

Tenerife 1991