TODO LO QUE NO SE SABE SOBRE VENEZUELA
ALFREDO
SERRANO
En estos tiempos de
dictadura de la coyuntura, afloran los expertos sabelotodo. Sin embargo, la
mayoría de ellos no aprobaría el más mínimo test de conocimiento del objeto en
cuestión. Con salvadas excepciones, de aquellos que escriben o hablan sobre Venezuela,
ninguno tiene la más remota idea si Lara es una ciudad o un estado, y mucho
menos dónde queda geográficamente. O sea, falta un poco de base para
aventurarse a dar lecciones.
En aras de subsanar
ciertos errores de bulto que condicionan los análisis y comentarios, si me lo
permiten, he aquí algunos datos “desconocidos” para contribuir a la mejor salud
del debate global sobre Venezuela:
1. Juan Guaidó fue
electo por el mismo órgano electoral con el cual se eligió al Presidente
Maduro. Guaidó obtuvo 97.492 votos en Estado de Vargas en el año 2015.
2. La Organización
de los Estados Americanos no ha reconocido a Guaidó como presidente de nada. Lo
ha hecho su secretario general por su cuenta y riesgo, pero no sus estados
miembros como bloque. Naciones Unidas tampoco ha reconocido a Guaidó; y así lo
ha dejado saber claramente en una carta publicada su secretario general António
Guterres, que dio su visto bueno a dar ayudar humanitaria en tanto fuera
solicitado por el actual gobierno. El Papa Francisco tampoco se sumó a lo
propuesto por Trump sobre Guaidó ante una pregunta explicita por una periodista
en el vuelo de vuelta de Panamá. Países de cierta importancia geopolítica,
tales como China, Rusia, Turquía, Irán, México y Sudáfrica, tampoco validan la
opción de otro presidente que no sea Maduro. No todos los países de la Unión
Europea (UE) se suman al desconocimiento de Maduro. Hasta el momento no lo han
hecho Italia, Grecia, Rumanía, Irlanda, Bulgaria, Chipre, Malta y Eslovaquia.
Otro dato: la jefa de la diplomacia europea, la italiana Federica Mogherini ha
aceptado estar en Montevideo el próximo 7 de febrero para iniciar el diálogo en
el seno del grupo de contacto internacional sobre Venezuela. Por su parte, el
Parlasur, el parlamento del Mercosur, tampoco ha considerado de ninguna manera
la existencia de otro Presidente que no sea Maduro.
3. Con reservas
probadas, Venezuela es el octavo país del mundo con mayor cantidad de reservas
de gas; el primero en petróleo; en oro, el valor sus reservas supera el PIB de
Chile o Dinamarca; en hierro, el valor supera al PIB de México o España; en
diamantes, la cifra es mayor al PIB de Paraguay o Bolivia; y para colmo,
recientemente se ha demostrado que hay mucho coltán en su territorio.
4. En términos de
propiedad, el 98,5% de las empresas constituidas en Venezuela son privadas;
0,5% son mixtas y 1% completamente públicas. Y otro dato: el 80% de los medios
de comunicación en Venezuela son privados.
5. Según un
artículo en el New York Times, de acuerdo con los estimados del gobierno de
Trump, las nuevas sanciones le costarán a la economía venezolana 11.000
millones de dólares en ingresos perdidos del petróleo. Y esto se suma a los
efectos ya consumados de decretos previos. El primero fue el de Obama, aprobado
el 9 de marzo de 2015, donde se anunciaron las primeras sanciones contra
Venezuela en base al "riesgo extraordinario" para la seguridad de
EE.UU. Luego vinieron muchos más, ya con la administración Trump en marcha.
6. En el siglo XXI,
Venezuela ha diversificado sus relaciones económicas y política. Y China se
convierte en uno de sus principales socios. Por ejemplo, Venezuela representa
el 40% de la financiación que Pekín concede a toda América Latina. Rusia y
Turquía también son claves en estas nuevas alianzas.
7. A veces se nos
olvida que Venezuela tiene frontera con Estados Unidos regulado por el Tratado
de Límites marítimos de 1978, que fija los límites marítimos entre las islas de
Venezuela en el Mar Caribe y los territorios dependientes de Estados Unidos (Puerto
Rico e Islas Vírgenes).
Son algunos
elementos significativos que debemos considerar a la hora de enjuiciar lo que
está pasando sobre Venezuela. A partir de ahí, hacer análisis hacia delante se
convierte en un ejercicio altamente complejo. Lo único cierto es que cada vez
que Estados Unidos habla de ayuda humanitaria, la cosa no termina bien. Ojalá
esta vez todo se quede en la misma guerra que Trump declaró contra Corea del
Norte, en el muro que jamás se pudo construir en la frontera mexicana. Veremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario